Filosofía de Marx: Materialismo Histórico, Sociedad y Críticas Contemporáneas
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El Materialismo Histórico de Karl Marx: Fundamentos y Críticas
Para Karl Marx, la historia no es una mera colección de hechos, como la concebían los empiristas, ni una sucesión abstracta de categorías, al modo de los idealistas. Tampoco es el resultado de la acción aislada de los denominados "personajes históricos". Por el contrario, la historia es el producto del modo en que los seres humanos organizan la producción social de su existencia. En este sentido, el materialismo histórico se postula como un conocimiento científico de la historia humana, cuyas fases y destino estarían determinados dialécticamente, desde su origen en el comunismo primitivo hasta su culminación en la reconciliación del ser humano con su esencia en la comunidad.
El Conocimiento Científico y la Liberación Humana
El conocimiento científico, según Marx, posee un carácter inherentemente crítico en un doble sentido:
- Discriminación de hechos: Permite discernir y analizar los hechos históricos y sociales, adhiriéndose a ellos mediante el método dialéctico.
- Orientación hacia la liberación: Su propósito último es la emancipación del ser humano, buscando una sociedad donde el individuo viva reconciliado con su verdadera esencia: el trabajo.
La Concepción Marxista del Ser Humano
En su profunda concepción del hombre, Marx integra y supera las aportaciones de dos influyentes pensadores alemanes: Ludwig Feuerbach, quien lo concibe como una esencia universal, y Georg Wilhelm Friedrich Hegel, que lo entiende como una realidad procesual. Para Marx, el ser humano se define por las siguientes características:
- Ser natural-activo: El hombre tiene la tarea fundamental de construirse a sí mismo a través de su interacción con la naturaleza.
- Ser esencialmente social: Un individuo aislado de las relaciones sociales y del devenir histórico es una mera abstracción, una entelequia. La humanidad se constituye en la interacción colectiva.
- Ser histórico: En una doble dimensión, el ser humano se forja a sí mismo y, simultáneamente, construye la historia.
- Ser práxico: La esencia del hombre radica en su capacidad de transformar la realidad a través de la praxis, la acción transformadora.
Estructura y Tipos de Sociedades
Las sociedades concretas son entendidas por Marx como formaciones sociales en las que pueden coexistir diversos modos de producción. Cada producción social se articula en torno a tres componentes interrelacionados:
- Una estructura económica compleja (la base material).
- Una superestructura jurídico-política compleja.
- Una superestructura ideológica compleja.
A lo largo de la historia, Marx identifica cuatro tipos principales de sociedades, cada una caracterizada por un modo de producción dominante:
- El comunismo primitivo.
- La sociedad antigua (esclavista).
- La sociedad feudal (occidental).
- La sociedad capitalista.
Las Clases Sociales y la Lucha de Clases
Marx diferenció las clases sociales principalmente por su relación con los medios de producción. Aunque su obra presenta diversas categorizaciones, las más fundamentales son:
- Las clases poseedoras de los medios de producción (como capitalistas y terratenientes).
- Las clases no poseedoras, que solo disponen de su fuerza de trabajo (el proletariado).
Son estas clases sociales las verdaderas protagonistas del cambio histórico, impulsado por la lucha de clases. Marx atribuye a los cambios sociales un carácter inherentemente revolucionario, donde una clase emergente (la clase trabajadora o proletariado) desplaza a la clase dominante (la burguesía o clase propietaria). Como consecuencia de esta transformación en la base económica, se produce una radicalización del cambio en la superestructura jurídico-política e ideológica. Sin embargo, esto no implica una anulación total de los valores precedentes, sino más bien una profunda transformación y reconfiguración de los mismos.
Fases de la Revolución Comunista
Marx concibe la revolución como un proceso que se desarrollaría en tres fases sucesivas:
- Etapa Democrática (Dictadura del Proletariado): Tras la toma del poder político por parte de la clase trabajadora, se establece una dictadura del proletariado. Su objetivo es obligar a la burguesía a ceder sus privilegios económicos y políticos, sentando las bases para la transformación social.
- Etapa Socialista: En esta fase, el Estado democrático, a la vez que potencia el desarrollo de los medios de producción y fomenta la riqueza social, procede a la abolición progresiva de las clases sociales.
- Etapa Comunista: Constituye la meta final del proceso revolucionario. Una vez abolida la propiedad privada y, con ella, las clases sociales, el Estado pierde su razón de ser y, finalmente, se extingue.
Críticas al Materialismo Histórico como Ciencia
A pesar de la pretensión de Marx de establecer un conocimiento científico de la historia, el materialismo histórico ha sido objeto de importantes críticas desde la filosofía de la ciencia contemporánea:
Karl Popper y la Pseudociencia
Para Karl Popper, el marxismo, y por extensión el materialismo histórico, no puede considerarse una ciencia en el sentido estricto. Lo califica más bien como una pseudociencia o una teoría especulativa. La razón principal radica en que la concepción contemporánea del método científico, basada en la falsabilidad, no es compatible con la idea que Marx tenía del método dialéctico, que Popper consideraba irrefutable y, por tanto, no científico.
Jon Elster y el Marxismo Analítico
Por otro lado, Jon Elster, desde una posición de marxismo analítico, opina que el materialismo histórico ofrece una explicación holística y funcional de la sociedad. Sin embargo, argumenta que para que una teoría funcional sea verdaderamente científica, requiere la presencia de un mecanismo de retroalimentación que explique cómo las funciones se mantienen o se adaptan. Elster sostiene que el materialismo histórico carece de este mecanismo de retroalimentación explícito, lo que le impide ser considerado una ciencia en un sentido riguroso.
En conclusión, desde los parámetros de la ciencia contemporánea y las perspectivas del marxismo analítico o crítico, el materialismo histórico no logra satisfacer los criterios para ser clasificado como una disciplina científica.