Filosofía Helenística: Estoicismo, Epicureísmo y Escepticismo en la Búsqueda de la Felicidad
Enviado por Chuletator online y clasificado en Filosofía y ética
Escrito el en
español con un tamaño de 4,41 KB
El Periodo Helenístico: Un Nuevo Horizonte Filosófico
El periodo helenístico es una etapa histórica de la Antigüedad en la que encontramos un florecimiento del arte, la pintura y la arquitectura. Comenzó tras la muerte de Aristóteles y Alejandro Magno y terminó con la conquista romana. Es herencia de la cultura griega, expandida a través de las conquistas de Alejandro Magno. En esta época, desaparece la polis como centro de la vida y aparece el nuevo concepto de ciudadano cosmopolita.
Existe una nueva idea en la filosofía: el hombre ya no encuentra la respuesta en la comunidad (la polis), sino que busca una nueva libertad individual. El objetivo subjetivo es recuperar la seguridad para alcanzar la felicidad, y la naturaleza puede ser un lugar donde encontrar leyes que seguir. Se proponen estructuras para el conocimiento: la física, que nos explica cómo es el universo; la lógica, que refuerza la ética; y la ética, que nos enseña cómo poder vivir.
Tres Corrientes en la Búsqueda de la Felicidad
Las tres corrientes principales buscan la felicidad, pero desde diferentes puntos de vista.
Estoicismo: La felicidad en el deber
Esta corriente abarca 600 años de pensamiento. Entre sus autores más destacados se encuentran Zenón de Citio, Marco Aurelio y Séneca. Tenían una idea en común: el universo está ordenado, es cerrado y la filosofía tiene que aprender cómo es. Piensan en él como algo totalmente material, pero donde existe un principio activo (el logos) que ordena de forma racional este universo. Es decir, existe una razón de por qué existen las cosas. No hay azar, sino una causalidad estricta (determinismo).
El hombre forma parte de este todo y debe vivir una vida racional, que es vivir según la naturaleza, es decir, asumir las cosas y el destino. Su ideal es aguantar los dolores que te suceden en la vida, alejarse de las pasiones y abstenerse de todo lo irracional. Hay que encontrar la apatheia —que nada nos afecte— y con esta encontramos el gran objetivo que es la ataraxia: la tranquilidad intelectual, donde se encuentra la felicidad.
Epicureísmo: La búsqueda de la felicidad a través del placer
La filosofía epicúrea se divide en tres partes:
- Gnoseología: El conocimiento deriva de las sensaciones claras.
- Física: El mundo se contempla desde el indeterminismo. Existe el azar y no existe un porqué ni un destino (lo que choca con el determinismo estoico).
- Ética: El placer es la meta. Se define como un equilibrio entre las diversas partes del cuerpo y del espíritu que nos produce bienestar. Sin embargo, no todo el placer es necesario. Se distinguen:
- Placeres naturales y necesarios: Relacionados con la supervivencia.
- Placeres naturales pero no necesarios: Aquellos que cubren los deseos naturales de una manera determinada o refinada.
Los miedos a superar
Para alcanzar la felicidad, es necesario superar ciertos miedos:
- A la muerte: Mientras vivimos, ella no existe, pero hay quien toma decisiones por miedo a morir.
- A los dioses: No debemos temer que nos juzguen o nos persigan.
- Al azar y al destino: No debemos angustiarnos por la incertidumbre de la naturaleza.
Una vez superados estos miedos, llegamos a la felicidad.
Escepticismo: La felicidad en la abstención del juicio
Su principal autor fue Pirrón de Elis. Su idea central es que no existen verdades absolutas, por lo que solo cabe la epojé o suspensión del juicio. Esta actitud los lleva a la ataraxia (la paz mental), sin perturbar al intelecto. Su lema podría resumirse en «vive y deja de preocuparte».
Opiniones y legado
No digas nunca «así es», sino «me parece que es». Nadie tiene la razón absoluta, así que no intentes imponer la tuya. Las ideas de los escépticos fueron recogidas por Descartes, quien las utilizó para fundamentar su propio criterio de verdad.