Federico García Lorca y la Tragedia de 'La casa de Bernarda Alba'
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La casa de Bernarda Alba
Estamos ante un fragmento de la obra teatral titulada La casa de Bernarda Alba, cuyo autor fue Federico García Lorca (1898-1936). Esta obra, estrenada en Buenos Aires en 1945 por Margarita Xirgu, pertenece a la Generación del 27. Se observa que pertenece al género teatral o dramático y al subgénero de drama rural o tragedia. Como se observa, en este caso, la obra pertenece al tercer acto, en el cual la familia se entera de la aventura entre Adela y Pepe el Romano, lo cual les parece terrible, en especial a la madre, Bernarda. Al ser enteradas de dicha aventura, Bernarda se vuelve completamente loca y trata de matar a Pepe (no lo consigue por su mala puntería) y Adela, al ver la acción de la madre, decide suicidarse. Según la madre se entera, decide no decírselo a nadie e insiste en que su hija ha muerto virgen.
Contexto Teatral de la Obra
La producción teatral de Lorca se enmarca dentro del teatro innovador de la preguerra. El panorama teatral del primer tercio del siglo XX en España puede resumirse en varias tendencias:
- El teatro poético modernista
- El teatro cómico
- La comedia tradicional
- El teatro innovador, creado por Ramón del Valle-Inclán y Federico García Lorca.
Junto con Valle-Inclán, Federico García Lorca es uno de los autores del teatro renovador.
Espacio y Tiempo en la Obra
Centrándonos ahora en el espacio, el desarrollo de la acción transcurre en la casa de Bernarda Alba, la cual es escenario de la represión física y moral de sus habitantes. Tras los muros de esa casa, se encuentra el mundo exterior, que aparece en la escena de diferentes modos: unas veces por el sonido de las campanas o el ladrido de los perros, etc.
En cuanto al tiempo, esta obra presenta una estructura de carácter circular. Cada uno de los actos transcurre en un momento diferente del día (mañana, tarde y noche) y los protagonistas reiteran ese discurrir temporal que, de acuerdo con el desarrollo lógico de la acción, abarcaría mucho más tiempo, por lo que no hay correspondencia entre el tiempo dramático y el real.
Estructura de la Obra
La estructura de la obra se puede dividir en tres partes:
- Planteamiento: Se desarrolla lo ocurrido entre Adela y Pepe el Romano.
- Nudo: La familia discrimina a Adela por mantener relaciones sexuales con Pepe el Romano.
- Desenlace: Adela termina suicidándose porque cree que Pepe había sido asesinado por su madre, Bernarda. En el desenlace se muestra la consecuencia, se deja entrever muy bien el carácter de los personajes y se rompe con la autoridad.
Personajes Principales
Con respecto a los personajes, destacan los siguientes:
- Bernarda: Una señora de 60 años que desempeña el papel de madre tirana que sujeta a sus hijas y a su propia madre. Va siempre vestida de luto y actúa igual tanto en el primer acto como en el último.
- Adela: La hija menor de Bernarda, tiene 20 años y es la más guapa. Es la única de las hijas que se rebela contra la madre, se enamora de Pepe el Romano (futuro marido de su hermana mayor, Angustias) y por este motivo sucede una tragedia al final de la obra (su suicidio).
- Pepe el Romano: No aparece en ningún momento en la obra, pero es el pretexto del final de la obra, despierta la rebelión.
- Poncia: La criada de 60 años, sabe todo lo que ocurre en la casa, incluyendo las aventuras entre Adela y Pepe el Romano.
- Angustias: La hija mayor, destinada a casarse con Pepe el Romano.
- Martirio: Hija de Bernarda, es pesimista y tiene un secreto: está enamorada de Pepe; es fea físicamente y fue la que desveló el secreto de las aventuras de Adela y Pepe.
- Magdalena: Segunda hija de Bernarda, para ella las ilusiones no existen.
Este fragmento es un diálogo. Se observa que en esta parte los que más destacan son Adela, Bernarda y Magdalena. La obra se realiza siempre en la casa, que es un símbolo de la represión que tienen las mujeres. Además, cabe destacar las acotaciones que realiza el autor para hacernos una idea de la manera en que actúan los personajes.
Características del Fragmento
Se puede definir este fragmento como teatral porque es un texto que especifica el diálogo que debe decir cada actor, detalla el desarrollo de cada escena, brinda información sobre la escenografía, etc. Y, además, es del subgénero dramático porque tiene un final negativo para los personajes. Presenta diferentes rasgos. En primer lugar, las metáforas, que son de diferentes formas, como de exclamación retórica. Hay nueve metáforas presentes, como, por ejemplo, en la línea 1: “qué pobreza la mía, no poder tener un rayo entre los dedos”, “está respirando como si fuera un león” y “hubiera volcado un río de sangre sobre su cabeza”. Por otro lado, aparece una comparación o símil, que a su vez es una metáfora. También aparecen epanadiplosis, anadiplosis, personificaciones como “a la muerte hay que mirarle a la cara” o “los muros no defienden la vergüenza”, y además de hipérbaton.