Los Fallos de la Memoria: Distorsiones y Alteraciones Psicológicas

Distorsiones de la Memoria

Existen diversos factores y procesos que pueden distorsionar nuestros recuerdos. A continuación, se describen algunas de las distorsiones más comunes:

• Tiempo

  La memoria se debilita con el paso de los años, porque las nuevas experiencias difuminan nuestros recuerdos más antiguos.

• Distracción

  Los fallos de la memoria por distracción se producen porque estamos preocupados por otros asuntos y no prestamos la atención necesaria a lo que debemos recordar.

• Bloqueo

  Es una búsqueda de información frustrada. A veces, no podemos recordar el nombre de un conocido cuando nos encontramos con él en la calle, aunque sintamos que lo tenemos “en la punta de la lengua”.

• Atribución errónea

  Consiste en asignar un recuerdo a una fuente equivocada; por ejemplo, confundir la fantasía con la realidad o recordar un hecho pero atribuírselo a la persona incorrecta.

• Sugestibilidad

  Es la tendencia de un individuo a incorporar información engañosa que procede de fuentes externas (otras personas, medios de comunicación) en sus recuerdos personales. Franz Kafka analizó esta cuestión en su obra El proceso.

• Propensión o sesgo retrospectivo

  Refleja la influencia de nuestros conocimientos y creencias actuales sobre el modo de recordar el pasado. A veces, elaboramos nuestros recuerdos para que encajen con nuestras creencias y necesidades actuales.

• Persistencia

  Consiste en recordar sucesos del pasado que preferiríamos olvidar, porque están ligados a nuestra vida emocional y se imponen en nuestra mente de forma intrusiva. Así, recordamos experiencias difíciles de olvidar, como la muerte de un ser querido o el rechazo de un amante.

Alteraciones de la Memoria

Las alteraciones de la memoria, a menudo más graves que las distorsiones, se concretan en los procesos de la memoria a largo plazo y son calificadas, en su mayoría, como amnesias.

Amnesia

La amnesia es la pérdida total o parcial de la memoria, originada por un problema neurológico (lesiones cerebrales, enfermedades) o por causas psicológicas (traumas).

Podemos distinguir varios tipos:

• Amnesia anterógrada o de fijación: Es la incapacidad para adquirir nueva información y recordar los sucesos después de una lesión cerebral o un desorden degenerativo, como la enfermedad de Alzheimer. Una persona con amnesia anterógrada olvida dónde ha dejado las cosas o con quién acaba de hablar.
• Amnesia retrógrada: Es la incapacidad de recordar el pasado, es decir, los acontecimientos que han ocurrido antes de la lesión cerebral. El paciente no recuerda su vida anterior, pero puede aprender nuevas habilidades.
• Amnesias psicógenas: Son producto de un trauma psicológico. Por ejemplo, las víctimas de violaciones pueden desarrollar una amnesia psicógena respecto al suceso, que les impide recordar la experiencia traumática como mecanismo de defensa.
• Demencia senil: Es un declive gradual de las funciones intelectuales. El primer síntoma suelen ser los problemas de memoria, originado por un trastorno degenerativo del cerebro.
• Amnesias funcionales: La memoria de una persona puede verse afectada por su estilo de vida. Factores como el estrés crónico o la ansiedad tienen una clara influencia negativa en los procesos de la memoria.

Hipermnesia

La hipermnesia es una exageración de la facultad de la memoria. Estas personas recuerdan datos inútiles o con un nivel de detalle extraordinario, como páginas completas de una guía telefónica. Suele presentarse en jóvenes con trastornos del espectro autista.

Paramnesia

La paramnesia es la elaboración de falsos recuerdos; se recuerda algo que no ocurrió. Esto puede manifestarse en personas que cuentan recuerdos falsos (confabulación) o que son mentirosos patológicos.