Explorando las Teorías Clave de la Inteligencia: Desde su Medición hasta sus Múltiples Dimensiones
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Historia y Medición de la Inteligencia
El Test de Binet-Simon y el Cociente Intelectual (CI)
En 1899, el gobierno francés estableció la enseñanza obligatoria hasta los 14 años y, con el fin de conocer las capacidades de los alumnos y detectar posibles retrasos, encargó a Albert Binet la elaboración de una prueba. Junto con Théodore Simon, Binet desarrolló unas pruebas que consistían en tareas ordenadas por edades, diseñadas para indicar la edad mental del alumno, es decir, si esta correspondía a su edad cronológica. Estas pruebas, conocidas como el Test de Binet-Simon, eran muy variadas e incluían tareas como memorizar palabras, evaluar la sintaxis lingüística y trabajar con números.
En 1911, William Stern propuso el Cociente Intelectual (CI) como método para puntuar los tests de inteligencia. Esta cifra se obtiene dividiendo la edad mental de la persona entre su edad cronológica y multiplicando el resultado por 100. La interpretación del CI es la siguiente: si la edad mental es mayor que la cronológica, el CI será superior a 100; si es menor, el CI será inferior a 100; y si coinciden, el CI será igual a 100.
En 1916, Terman revisó el Test de Binet-Simon y estableció una nueva versión con una escala revisada. A este nuevo test se le conoce como Test de Stern Binet Simón. En su quinta revisión, se estableció la siguiente escala de puntuación:
- 145-160 puntos: Muy avanzado
- 131-144 puntos: Avanzado
- 120-129 puntos: Superior
- 110-119 puntos: Promedio alto
- 90-109 puntos: Promedio medio
- 80-89 puntos: Promedio bajo
- 70-79 puntos: Límite
- 55-69 puntos: Ligero retraso
- 40-54 puntos: Retraso
Principales Teorías de la Inteligencia
Teoría Bifactorial de Spearman
Charles Spearman, al observar los resultados de las pruebas administradas a niños, notó que aquellos con buenas calificaciones en una prueba tendían a obtener buenos resultados en todas, y lo mismo ocurría con los malos resultados. De esto dedujo que la inteligencia está compuesta por dos factores principales:
- Factor G (General): Se manifiesta en diversas pruebas y tareas cognitivas, siendo considerado innato e invariable, y subyace a las distintas habilidades de la persona.
- Factor S (Específico): Es propio de habilidades particulares, siendo adquirido y modificable.
Teoría Multifactorial de Thurstone
En 1938, Louis Leon Thurstone propuso un modelo multifactorial que no incluía el Factor G, sino que especificaba 8 factores primarios distintos e independientes entre sí:
- Comprensión verbal
- Fluidez verbal
- Rapidez perceptiva
- Razonamiento deductivo
- Capacidad espacial
- Aptitud numérica
- Memoria
- Razonamiento inductivo
Posteriormente, el razonamiento deductivo e inductivo se unieron en un único factor, denominado Factor R. La rapidez perceptiva y la memoria fueron excluidas en revisiones posteriores.
Teoría Tridimensional de la Inteligencia de Guilford
Joy Paul Guilford agrupó los factores de la inteligencia en tres dimensiones principales:
- 1. Dimensión de las Operaciones: Incluye procesos como la cognición, la memoria, el pensamiento convergente, el pensamiento divergente y la evaluación.
- 2. Dimensión de los Contenidos: Se refiere a la naturaleza de la información, como visual, auditiva, simbólica, semántica y conductual.
- 3. Dimensión de los Productos: Describe las formas en que la información se organiza, como unidades, clases, relaciones, sistemas, transformaciones e implicaciones.
Este modelo genera 150 factores distintos que permiten describir y medir de manera muy precisa las habilidades relacionadas con la inteligencia.
Teoría de las Inteligencias Múltiples de Gardner
En la década de 1980, Howard Gardner propuso su Teoría de las Inteligencias Múltiples, distinguiendo 8 inteligencias distintas y relativamente autónomas:
- Inteligencia Lingüística
- Inteligencia Lógico-Matemática
- Inteligencia Corporal-Kinestésica
- Inteligencia Espacial
- Inteligencia Intrapersonal
- Inteligencia Interpersonal
- Inteligencia Musical
- Inteligencia Naturalista
La Inteligencia Emocional
La Inteligencia Emocional es un conjunto de habilidades que una persona adquiere por nacimiento o desarrolla a lo largo de su vida. Implica la capacidad de analizar y comprender las propias emociones, así como las de los demás, en lugar de limitarse a sentirlas. Esto significa conocer nuestros sentimientos y no reprimirlos, buscando que las personas sean auténticas, sinceras y capaces de autoanalizarse.