Exploración del Ascetismo y Misticismo en el Siglo XVI: Fray Luis, San Juan y Santa Teresa

La Espiritualidad en el Siglo XVI: Ascetismo y Misticismo

Reinado de Felipe II.

Reforma dentro del clero: fomento de la espiritualidad más primitiva. Algunas órdenes clericales siguen tesis humanistas y más espirituales.

Características: mayor austeridad, recogimiento, prácticas para mejorar la conducta moral y espiritual.

Esta nueva espiritualidad la abrazan cuatro órdenes:

• Agustinos
• Franciscanos
• Dominicos
• Carmelitas

Ascetismo y Misticismo

Ascetismo: se rehúyen los placeres materiales para imitar la vida de Cristo y acercarse a Dios a través de estas prácticas. Algunas son: el ayuno, la soledad, la oración, la humildad, el trabajo, la introspección, etcétera. La voluntad depende del creyente. Precede al misticismo.

Misticismo: es la experiencia misma de la unión con Dios. Esta unión depende de la voluntad misma de Dios, independientemente de llevar una vida ascética o no.

Las Tres Vías para la Unión con Dios

Fray Luis de León (1527-1591)

Fray Luis de León (1527-1591), descendiente de una familia de conversos, fue profesor en la Universidad de Salamanca y escribió libros de teología y traducciones de la Biblia.

Fray Luis de León rechaza un estilo de vida basado en los bienes materiales y apuesta por una vida sencilla, apartada de la sociedad, dedicada a contemplar la belleza de la naturaleza, que nos hace ver la grandeza de Dios.
Sus odas adaptan la temática clásica al sentimiento religioso y la lira es su forma métrica preferida. Su estilo es sencillo y elegante; abundan las imágenes centradas en la naturaleza. Sus modelos son Horacio y Virgilio.

Principales obras:

• Oda a la vida retirada: expresa su deseo de alejarse del mundo y acercarse a la soledad del campo para sentirse más cerca de Dios.
• Oda a Francisco Salinas: desarrolla la idea platónica de que la música acerca a Dios, pues eleva el alma a la contemplación del bien divino.
• Noche serena: la admiración de una noche estrellada inspira la añoranza del cielo y de liberación del mundo.

San Juan de la Cruz (1542-1591)

San Juan de la Cruz (1542-1591) fue un monje carmelita que escribió un número muy reducido de poemas. Sus composiciones más importantes explican la experiencia mística, es decir, la fase culminante de un proceso de acercamiento a Dios.

Las fuentes de San Juan de la Cruz son tres: la lírica tradicional, la lírica de Garcilaso y la Biblia.

Para expresar su experiencia religiosa, inexplicable, utiliza los temas y tópicos de la lírica amorosa.

Principales poemas:

• Noche oscura del alma: Narra el encuentro (unión mística) de una muchacha (el alma) que sale de su casa de noche para encontrarse con su Amado (Dios).
• Cántico espiritual: un extenso poema que presenta un diálogo entre la esposa y el esposo, y que constituye un símbolo del encuentro entre el alma y Dios. Este poema recorre varias fases:
  • La esposa busca al esposo, una acción que simboliza la búsqueda que hace Dios del alma del cristiano (vía purgativa).
  • El encuentro de los esposos, que representa la contemplación de Dios (vía iluminativa).
  • La unión de los esposos, que simboliza la unión mística (vía unitiva).
• Llama de amor viva: Obra escrita en forma exclamativa, expresa el gozo del alma abrasada por el amor divino.

Santa Teresa de Jesús

Cultivó tanto la prosa como el verso:

En su poesía explica su experiencia mística y anima a sus compañeras de congregación.

En su prosa cuenta experiencias de su infancia, su gusto por la lectura y su lucha reformadora de las órdenes religiosas.

El castillo interior o las Moradas es un tratado de oración de carácter metafórico: el alma es un castillo con habitaciones (símbolo de las tres etapas de la mística) que hay que atravesar hasta llegar a la unión con Dios.

El tono sencillo y coloquial contribuye al carácter didáctico de su obra.