Evolución del Pensamiento Histórico: Desde la Antigüedad hasta la Actualidad

La Historia como Ciencia

El observador se encuentra dentro de la cosa observada, enfrentándonos a dificultades propias como la inobservabilidad directa del pasado. El historiador parte de sus experiencias propias, que proyecta en el pasado, de forma que, si no entendemos bien la historia, tenemos que conocer bien al historiador y a su entorno. Este observa las fuentes del conocimiento histórico con la ayuda de algunas ciencias y técnicas, permitiendo que el conocimiento de la historia sea visto desde un punto de vista científico. El conocimiento histórico es imperfecto, pero gracias al método crítico, se convierte en válido y verificable.

Evolución del Pensamiento Histórico

Antigüedad y Edad Media

La historia de los pueblos de la antigüedad estaba basada en los dioses y los hombres, partiendo de sociedades agropecuarias poco cambiantes con ciclos constantes e inmutables de la naturaleza. La historia bajo el cristianismo en la Edad Media continuaba con la idea de la mezcla entre los hechos y los seres naturales y el providencialismo, deseos inescrutables e incomprensibles de Dios.

Renacimiento e Ilustración

El racionalismo se consolidó en el occidente cristiano en el siglo XVIII. El “cisma de occidente” y, sobre todo, el Renacimiento ponen la razón y al hombre en primer plano, provocando que la idea de la fe y Dios vaya retrocediendo cada vez más. El providencialismo se sustituye por la fe en la ciencia y el progreso, exaltando la figura de los griegos y romanos. Se producen disputas entre papistas y reformadores, excitando al estudio de la historia desde el cristianismo y la iglesia, ayudándose de otras ciencias para hacer este desarrollo. La Ilustración vuelve con fuerza y con ideas nuevas, con concepciones del Renacimiento y acentuando su espíritu más crítico.

Romanticismo

El Romanticismo es la reacción contra la Ilustración, contra la Revolución Francesa y las injusticias provocadas por la Revolución Industrial. Se exaltan los elementos de la Edad Media y sus formas de vida, equiparándolo con las corrientes reaccionarias y progresistas, idealizando el pasado más nacional.

Positivismo

El positivismo histórico se inicia en el siglo XIX, basado en la represión de las ideas de la Ilustración y del Renacimiento, desde su alto nivel y prestigio de las universidades alemanas. Tiene la voluntad de limitarse a reproducir y divulgar las fuentes del conocimiento histórico, narrando los hechos tal y como son, evitando, si se puede, el componente subjetivo. La introducción al estudio de la historia se centra en su preocupación en la historia política, militar e internacional, la economía y la cultura. La historia catalana y española se ve influenciada por el positivismo alemán.

Marxismo

El movimiento marxista es la confluencia entre la economía política inglesa, el socialismo francés y la filosofía hegeliana, que aparece como la reacción contra las atrocidades de la Revolución Industrial. Marx no decía que el proletariado ganaría porque la causa fuera justa, sino porque era la clase social más dinámica. Decía que el capitalismo tendría que desaparecer víctima de sí mismo. La aparición de esta doctrina comportó una sobrevaloración de los aspectos económicos y sociales. Con el triunfo del marxismo-leninismo de la Unión Soviética, se estableció un estricto control con los investigadores y docentes.

Escuela de los Annales

La Escuela de los Annales fue constituida por un conjunto de historiadores en los años 20, los cuales publicaban trabajos en la revista *Annales d'histoire économique et sociale*. Estos creaban una ampliación de los términos objeto de historia, interesándose en los aspectos de la vida social. Estos historiadores son marxistas y se apoyan en las ciencias auxiliares, sobre todo las ciencias sociales. Esta combinación proporciona una cierta superioridad a estos historiadores respecto a otros científicos, los cuales se preocupan más por plantear problemas y la interpretación de los hechos históricos que no por buscar soluciones o por su descripción.

En Cataluña fue introducida por Pierre Vilar en combinación con Jaume Vicens i Vives, los cuales ejercieron gran influencia en el pensamiento catalán y español.

Nuevas Perspectivas en la Historia

Si antiguamente la historia estaba basada en los grandes poderosos, ahora se estudiarán también todas las clases de personas y hechos que aparecen en la historia de movimientos obreros, ciencia, la vida cotidiana, de las mujeres.

Historia de las Mentalidades

Desde los años 70 se pone de moda la historia de las mentalidades, donde se estudian las concepciones y sentimientos de determinadas personas, basadas en conceptos filosóficos y antropológicos de cosmovisión. Los testamentos eran redactados de manera muy personal y sincera, siendo de interés para la historia del derecho y las instituciones.

Historia Oral y Nuevas Tecnologías

La aparición de nuevos métodos, como la reproducción del sonido y la imagen, proporcionan nuevas fuentes de conocimiento del pasado, siendo una revolución también en la divulgación de conocimientos históricos. Pero este método es un método de reconstrucción del pasado que lleva consigo elementos erróneos, a la par que deficientes y poco fidedignos. Uno de los principales métodos es la “historia oral”, el cual tuvo mayor divulgación durante los años 70, con una gran corriente de testimonios orales, pero estos presentan problemas de veracidad.

Finalidad de la Historia

Mientras que la historia es lo que el historiador estudia del pasado, su finalidad también es filosófica, ya que el historiador pretende ver qué consigue con su trabajo. En el Antiguo Régimen tenía una finalidad moralizante, didáctica, panegírica e ideológica. Los historiadores trabajan al servicio del estado-patrón, acentuando que el pasado es diferente del presente. La historia sirve y servirá como refugio, esperanza y suelo delante de las adversidades que se presentan en el presente, siendo esta neutra, intentando el historiador mostrar su lado más objetivo y veraz.