Evolución Estilística de Valle-Inclán: De las Sonatas al Esperpento de Luces de Bohemia
Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Lengua y literatura
Escrito el en español con un tamaño de 4,23 KB
Evolución de la Obra de Valle-Inclán: Justificación de la Inclusión de Luces de Bohemia en su Etapa Correspondiente
Valle-Inclán (Villanueva de Arosa, 1866 - Santiago de Compostela, 1936) es uno de los autores más controvertidos, rigurosos, extravagantes y geniales que ha dado nuestra literatura. Su vida, excéntrica y aventurera, se desarrolla entre Galicia, Madrid e Hispanoamérica. Inicia los estudios de Derecho, pero no los termina. Es famoso por su vida bohemia y por su apariencia estrafalaria. Ideológicamente, evolucionó desde una postura tradicionalista a posturas mucho más críticas y comprometidas con su tiempo (primer esperpento).
Su obra recorre con acierto la poesía (La pipa de Kif), la novela (Tirano Banderas) y, sobre todo, el teatro, donde alcanza sus mayores logros: La marquesa Rosalinda, Comedias Bárbaras, Luces de bohemia... En sus piezas teatrales hallamos a un escritor vanguardista que se caracteriza por su afán de renovar la dramaturgia española, tanto en la concepción de lo escénico como en la incorporación de elementos narrativos y cinematográficos.
Etapas de su Trayectoria Literaria
Modernismo
Inició su trayectoria literaria en el Modernismo. En sus cuatro Sonatas se recogen las memorias del marqués de Bradomín, consideradas como la mejor manifestación de la prosa modernista. Estructuradas como una composición musical en cuatro tiempos, destacan por su elegancia exquisita y su provocación amoral. A esta etapa pertenecen también sus primeras producciones teatrales: Tragedia de ensueño y El yermo de las almas.
Primitivismo
Su segunda etapa, la del primitivismo, comienza con las Comedias bárbaras, obras míticas donde aparecen extraños personajes tiránicos, violentos o tarados. Se trata de un "canto" a un mundo en descomposición. Esta trilogía, formada por Águila de blasón, Romance de Lobos y Cara de plata, es difícilmente representable debido a su gran longitud, a los rapidísimos cambios de escenario y a las extensas acotaciones escénicas. Las Comedias bárbaras constituyen novelas dialogadas que mantienen un escaso vínculo con el género teatral.
Teatro Artificioso
En su tercera etapa, caracterizada por un distanciamiento artificioso, Valle escribe obras teatrales, la mayoría en verso. Se trata de experimentos dramáticos donde el autor crea un mundo artificioso, muy literario y estilizado. La marquesa Rosalinda o La cabeza del dragón son algunas piezas de este periodo.
El Esperpento
Su última etapa, la más lograda, es la de los esperpentos. En ella sobresalen Luces de bohemia (1920) y la trilogía Martes de carnaval.
El Esperpento y Luces de Bohemia
Valle acuña el término esperpento para referirse a unas obras creadas con una estética personal y renovadora. Mediante esta técnica, el autor distorsiona la realidad para censurar y parodiar la decadente situación nacional. Su intención es llegar a una “superación del dolor y de la risa” y mostrar lo absurdo, el “sentido trágico” y su disconformidad con la vida española de su tiempo, lo que lo aproxima a las preocupaciones de los noventayochistas.
Luces de bohemia destaca por la distorsión de la realidad y la parodia de los modelos clásicos, así como por la creación de un lenguaje donde lo sublime y lo vulgar conviven en partes iguales. Max Estrella, el protagonista ciego, emprende una particular odisea que no se desarrolla en los míticos escenarios clásicos, sino en los espacios más sórdidos de una nación sumida en la miseria física y moral. Y es que, como afirma el propio Max, "España es una deformación grotesca de la civilización europea".
La presencia insistente de la muerte, el empleo de animalizaciones, cosificaciones o muñequizaciones, y los frecuentes contrastes y reducciones al absurdo son otros rasgos que aproximan esta obra capital al mundo del teatro esperpéntico.