Evolución de los Derechos: Políticos, Sociales y la Ciudadanía en el Estado de Derecho
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Derechos Políticos
A lo largo de los siglos XIX y XX se generalizaron las declaraciones de derechos como parte de las constituciones occidentales y se abrió paso a la inclusión de ciertos derechos que no habían sido tenidos en cuenta antes, como los de participación política, tales como el derecho de asociación política, sufragio universal para los hombres y derechos de la mujer al voto y a ocupar cargos públicos. Podemos destacar:
- Las enmiendas 13, 14 y 15 de la Constitución de los EEUU de América, que ratifican la abolición de la esclavitud en todo el territorio nacional.
- Desde finales del s. XIX y durante el XX, las constituciones de gran parte de los países han reconocido los derechos políticos de la mujer.
Derechos Sociales, Económicos y Culturales
Los primeros derechos de este tipo que fueron reconocidos fueron el derecho a la educación, a la asociación sindical, a la huelga y a las garantías de seguridad e higiene en el trabajo. Algunos documentos de esta nueva fase de reconocimiento son:
- La Const. Francesa de 1848 recoge instrucciones que protegen a los trabajadores y la obligación del Estado de proporcionar enseñanza primaria gratuita a todos los ciudadanos.
- En la década de los 80 el canciller alemán Bismarck impulsó medidas como el seguro de enfermedad, contra accidentes laborales y las pensiones para la vejez.
- La Const. Mexicana de 1917 reconoce los derechos laborales y las prestaciones de la Seguridad Social, sin discriminación por sexos.
- La Const. Alemana de 1919 regula los derechos sociales, económicos y culturales, diseñando lo que posteriormente se llamó ‘’Estado social de derecho’’.
Ciudadanía Social
El reconocimiento progresivo de los derechos condujo a consolidar la noción de ciudadanía social en el s. XX, principalmente a partir del libro Ciudadanía y clase social. En dicha obra el autor define la ciudadanía como el conjunto de derechos y deberes que vinculan a la plena pertenencia a una sociedad. La ciudadanía social incluye los derechos sociales como trabajo, educación, vivienda, salud y prestaciones sociales en los casos de vulnerabilidad. La protección de esos derechos está garantizada por el Estado nacional, conocido ahora como Estado social de derecho. Históricamente era conocido como el Estado del bienestar, lo cual ha sido sin duda un gran avance, pero que hoy no deja de tener problemas porque dicho Estado ha entrado en crisis críticas que están afectando también a la posibilidad de un Estado social que satisfaga las exigencias de la ciudadanía social. Satisfacer dichas exigencias es indispensable para que las personas se sientan y sepan ciudadanos, ya que solo se siente parte de una sociedad quien sabe que esa sociedad se preocupa activamente por una supervivencia digna. Pero esto puede lograrlo un Estado de justicia, no de bienestar. Sigue siendo posible e irrenunciable proteger los derechos sociales propios de la ciudadanía social en un Estado de justicia, y no solo en nuestro país, sino en una Europa social que debería tener como tarea histórica llevar al nivel cosmopolita la ciudadanía social.
Reconocimiento de la Ciudadanía
El reconocimiento de la ciudadanía se refiere a la responsabilidad que tiene cada sociedad respecto a su propia población para asegurar que realmente se reconoce como ciudadanos a las personas que reúnen determinados requisitos que no deben ser arbitrarios ni injustos. Un aspecto del reconocimiento es el legal y otro es el real o afectivo.
El Ejercicio de la Ciudadanía
El ejercicio de la ciudadanía se refiere a la responsabilidad que corresponde a cada persona en una sociedad cuando ejerce como ciudadano. Este aspecto remite a dos asuntos fundamentales: el ejercicio de los deberes cívicos y el ejercicio del voluntariado. Los deberes cívicos forman el mínimo exigible a todos, mientras que el voluntariado depende de la generosidad de cada cual. Los deberes forman parte del ámbito de lo exigible en justicia, mientras que el voluntariado parte del sentido de la gratuidad de cada persona.