Estructura y Gestión de la Hacienda Pública Española: Presupuestos, Ingresos y Déficit
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La Hacienda Pública
El Estado, para poder cumplir sus funciones y desarrollar sus actividades, realiza gastos (denominados gastos públicos) y, paralelamente, necesita obtener ingresos para financiar dichos gastos. Dentro del amplio proceso de descentralización que se ha producido en los últimos tiempos, la estructura del sector público español se ha configurado en tres grandes niveles:
Administración del Estado
Compuesta por las administraciones públicas, los organismos autónomos y otras entidades públicas. El conjunto de sus gastos e ingresos queda reflejado en los Presupuestos Generales del Estado.
Comunidades Autónomas
Tienen su propio sistema presupuestario y su financiación se produce mediante su participación en los ingresos del Estado, con recargos sobre impuestos estatales y a través de tributos propios o cedidos (total o parcialmente) por el Estado.
Corporaciones Locales
También elaboran sus presupuestos y se financian vía aportaciones de la Administración Central y mediante sus propias tasas e impuestos.
El Presupuesto
El presupuesto representa un instrumento básico de planificación financiera a corto y medio plazo, con tres características fundamentales:
- Su contenido principal es el conjunto de gastos necesarios para desarrollar las actividades de la entidad.
- Incluye también los instrumentos de financiación de los gastos.
- Está referido a un determinado plazo, normalmente un año.
Para las administraciones públicas, el presupuesto es el marco jurídico y financiero al que se debe ajustar toda su actividad. Los gastos marcados en el presupuesto tienen carácter limitativo, mientras que los ingresos tienen un carácter estimativo.
Principios Presupuestarios
- Principio de competencia: Los presupuestos del Estado son elaborados por el poder ejecutivo y presentados al poder legislativo, que los aprueba mediante ley.
- Principio de universalidad: Los presupuestos deben recoger todos los gastos e ingresos del sector público estatal (Estado, organismos autónomos, Seguridad Social, otros entes públicos y sociedades estatales).
- Principio de unidad: La totalidad de gastos e ingresos públicos ha de presentarse en un presupuesto único.
- Principio de especialidad: Las cantidades especificadas en los presupuestos deben ser gastadas única y precisamente en aquello para lo que habían sido asignadas.
- Principio de temporalidad: Todo el presupuesto ha de referirse a un plazo determinado, normalmente el año natural, después del cual pierde su vigencia.
- Principio de publicidad: La aprobación y la gestión del presupuesto tienen naturaleza pública. El Parlamento y la opinión pública siguen la gestión a través de las sesiones de control al gobierno en las Cámaras.
Clasificación de los Presupuestos de Ingresos
Los ingresos, a diferencia de los gastos, no se imputan a los programas, sino que se clasifican de forma orgánica y económica.
- Clasificación orgánica: Muestra el agente al que se le imputan los ingresos (por ejemplo, el Estado o un organismo autónomo).
- Clasificación económica: Define el objeto o la clase de ingreso y se utiliza para su imputación contable.
Ingresos fiscales
- Impuestos directos: Recaen sobre el patrimonio y las rentas generadas por los contribuyentes. Son impuestos nominativos, que debe pagar cada sujeto atendiendo a sus circunstancias personales.
- Impuestos indirectos: Gravan el consumo de bienes y servicios, con independencia de las circunstancias personales del sujeto.
- Tasas: Tributos que se exigen a cambio de la prestación de servicios por parte de los entes públicos a los beneficiarios de esos servicios.
Ingresos no fiscales
- Transferencias corrientes: Cantidades que la Administración General del Estado recibe de otras entidades.
- Ingresos patrimoniales: Rentas generadas por los bienes patrimoniales del Estado y que se ingresan en el Tesoro Público (por ejemplo, los dividendos de las empresas públicas).
- Enajenación de inversiones reales: Producto de las ventas de bienes patrimoniales del Estado, considerados ingresos extraordinarios.
- Transferencias de capital: Ingresos provenientes, fundamentalmente, de los fondos estructurales de la Unión Europea.
La gestión de los Presupuestos Generales del Estado consiste en un conjunto de operaciones encaminadas a conseguir los objetivos marcados en cada uno de los programas que lo componen, mediante la realización de los gastos incluidos en el presupuesto.
Desde la perspectiva contable, la gestión presupuestaria se divide en cuatro fases:
- Autorización para realizar el gasto.
- Compromiso de gasto.
- Obligación de realizar el orden de pago: Se emite un mandato de pago contra la tesorería del Estado.
El Déficit Público
El saldo presupuestario es la diferencia entre los ingresos y los gastos del Estado. Puede presentar tres situaciones:
- Equilibrio: Cuando los ingresos son iguales a los gastos.
- Déficit: Cuando los gastos son superiores a los ingresos.
- Superávit: Cuando los ingresos son superiores a los gastos.
El problema que plantea el déficit público es su financiación, que puede realizarse por dos vías:
- Endeudamiento: A través de diversos instrumentos financieros, el Estado pide prestado a ciudadanos o a otros países.
- Recurriendo al Banco Central: El déficit se financia mediante la creación de nuevo dinero (monetización del déficit).
Mediante el equilibrio presupuestario se pretende, según se recoge en los Presupuestos Generales del Estado:
- Consolidar una cultura de estabilidad económica.
- Prolongar el crecimiento de la renta y la creación de empleo para garantizar a medio plazo la convergencia real con la media de la Unión Europea.
- Asegurar la viabilidad de la protección social.
- Facilitar nuevas reformas tributarias.
- Acelerar el ritmo de reducción de la deuda pública.
- Mejorar las políticas públicas de inversión y gasto social.