La Estructura del Conocimiento en Kant: Sensibilidad y Entendimiento Trascendental

La filosofía de Immanuel Kant, especialmente en su obra cumbre, la Crítica de la Razón Pura, explora profundamente cómo es posible el conocimiento humano. Para Kant, el proceso de conocer se divide en dos facultades fundamentales: la sensibilidad y el entendimiento, cada una con sus propias formas y funciones a priori.

Estética Trascendental: La Sensibilidad y las Formas de la Intuición

Los objetos nos son dados mediante la sensibilidad, y esta es la única facultad que nos proporciona intuiciones. Dentro de la sensibilidad, Kant identifica dos formas a priori fundamentales: el espacio y el tiempo.

Existen dos modos de sensibilidad:

• Sentido externo: Por el cual nos representamos en el espacio objetos como exteriores a nosotros.
• Sentido interno: Por el cual intuimos en el tiempo nuestros estados psíquicos (pero no el alma misma).

Según Kant, el espacio y el tiempo son las condiciones subjetivas a priori que hacen posible toda experiencia, ya sea externa o interna. En conclusión, en la sensibilidad encontramos:

• Una materia empírica: las sensaciones.
• Una forma a priori: el espacio y el tiempo.

El resultado de esta unificación y ordenación de las sensaciones en el espacio-tiempo es el fenómeno.

Consecuencias Clave de la Estética Trascendental:

• El objeto conocido (el fenómeno) no coincide exactamente con la cosa en sí misma (el noúmeno).
• Aparece una distinción fundamental entre fenómeno y noúmeno o cosa en sí. Son los fenómenos los que conocemos, no las cosas en sí mismas.
• El espacio y el tiempo, fuera del sujeto, no son nada; y en el sujeto, si no hay sensaciones, solo son estructuras vacías.
• Los objetos en sí son desconocidos, y lo que nosotros llamamos objetos exteriores no son otra cosa que simples representaciones de nuestra sensibilidad.

Las Matemáticas Puras y su Fundamento Trascendental

Las matemáticas puras se componen, según Kant, de proposiciones sintéticas a priori. La cuestión central es cómo es posible que tales proposiciones se construyan a priori (es decir, independientemente de la experiencia). La respuesta es ya evidente: se fundamentan en las intuiciones a priori del espacio (para la geometría) y del tiempo (para la aritmética, ya que el número surge por la adición sucesiva de la unidad en el tiempo).

Las matemáticas son posibles como ciencia porque se asientan en dos elementos a priori:

• El espacio, que hace posible la geometría.
• El tiempo, que hace posible la aritmética.

Analítica Trascendental: El Entendimiento y las Categorías

La capacidad de pensar el objeto de intuición es el entendimiento. Kant afirma: “Sin sensibilidad, ningún objeto nos sería dado, y sin entendimiento, ninguno sería pensado.”

Esta interdependencia es crucial: “Los pensamientos sin contenido son vacíos; las intuiciones sin conceptos, ciegas. Las dos facultades no pueden intercambiar sus funciones; el conocimiento únicamente puede surgir de la unión de ambas.”

El entendimiento es la facultad de pensar el objeto dado en la intuición empírica, es decir, el fenómeno. Como pensar es lo mismo que juzgar, según Kant, el entendimiento también puede ser definido como la facultad de juzgar. La “crítica del entendimiento” consistirá en descubrir las formas a priori del entendimiento que hacen posible el pensamiento.

Conceptos y Categorías: Las Formas del Pensamiento

Pensar o juzgar supone el uso de conceptos. Kant distingue dos tipos:

• Conceptos empíricos: Generalizaciones tomadas de la experiencia (como “hombre” o “casa”).
• Conceptos a priori (Categorías): Son “puestos” por el entendimiento. Constituyen las estructuras o leyes a priori del pensamiento. Gracias a ellos podemos pensar, es decir, construir nuestros juicios acerca de los fenómenos. De este modo, nuestra experiencia adquiere carácter de necesidad y universalidad, haciéndose posible la física como ciencia.

La correlación entre sensibilidad y entendimiento es perfecta. La sensibilidad es receptiva y posee intuiciones; el entendimiento es activo y carece de intuiciones. La sensibilidad aporta el contenido del pensamiento (la materia); el entendimiento aporta la estructura. Ambos se necesitan: no puede haber verdadero conocimiento si una intuición sensible no es pensada mediante una categoría.

En conclusión, en el entendimiento hay:

1. Una materia: el fenómeno.
2. Una forma: las categorías.

De aquí se deduce la regla fundamental sobre el uso de las categorías: solo valen para unificar los fenómenos, y solo pueden aplicarse a ellos.

La Tabla de las Categorías

La tabla de las categorías es obtenida por Kant a partir de la tabla de los juicios. A cada tipo de juicio corresponderá una categoría especial:

• Por la cantidad
• Por la cualidad
• Por la relación
• Por la modalidad