Estrategias y Principios Metodológicos Esenciales para la Educación en Valores
Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Magisterio
Escrito el en español con un tamaño de 3,39 KB
Estrategias y Principios Metodológicos en Educación
La Educación en Valores requiere no solo secuenciar los contenidos, sino también una metodología coherente que permita la consecución de los objetivos marcados. Los principios generales para ello son:
- Aprendizaje Significativo
- Aprendizaje Cooperativo
- Aprendizaje de Resolución de Conflictos
Aprendizaje Significativo
El aprendizaje significativo es aquel cuyo contenido puede relacionarse con los conocimientos previos del alumno.
Su aplicación supone adecuar los contenidos a los esquemas o conocimientos previamente aprendidos e interrelacionar todos los contenidos del aprendizaje escolar.
Los requisitos para que el aprendizaje significativo se produzca son:
- El material debe tener alguna utilidad y sentido.
- Material adecuado al nivel de desarrollo evolutivo del niño.
- El alumno debe poseer suficiente conocimiento previo.
- El alumno debe presentar una actitud activa, atenta y motivada hacia el aprendizaje.
El aprendizaje significativo promueve un mejor rendimiento académico, da sentido y coherencia al aprendizaje escolar y favorece la motivación.
Aprendizaje Cooperativo
Supone la división del grupo de clase en subgrupos o equipos (de 5 o 6 alumnos máximo) que desarrollan una actividad.
Implica la interdependencia de los alumnos porque cada uno alcanza sus objetivos si, y solo si, los demás alcanzan los suyos y los resultados que persigue cada miembro son igualmente beneficiosos para los otros.
El aprendizaje cooperativo es de gran eficacia para:
- Mejorar las relaciones entre alumnos y disminuir prejuicios étnicos, lo que supone igualar el estatus académico de los alumnos.
- Desarrollar el sentido de responsabilidad individual y social, la capacidad de cooperación y la solución dialogada de conflictos.
- Mejorar el rendimiento y la motivación por el aprendizaje en la materia.
Además, ofrece a los profesores la oportunidad de mejorar su eficacia y poder de motivación sobre los alumnos y, con ello, incrementar su control sobre el aula y su efectividad como docente.
La puesta en práctica exige que se cumplan ciertas condiciones:
- Apoyo normativo. Los profesores deben apoyar y promover un clima de confianza y respeto.
- La interdependencia positiva. Conseguir una recompensa grupal cuando los miembros del grupo dependen unos de otros para lograrla favorece la cooperación real. Es decir, el profesor debe enseñar habilidades de colaboración y comunicación; y puede ser necesario recompensar específicamente la cooperación entre los alumnos cuando ellos mismos no son capaces de colaborar.