Esquizofrenia: Síntomas, Formas Clínicas y Delitología
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Esquizofrenia: Formas Clínicas
Esquizofrenia Hebefrénica
Suele iniciarse entre los 15 y 20 años. Se caracteriza por un precoz, progresivo y profundo vaciamiento afectivo. Se va perdiendo el interés por el mundo exterior y se desarrollan rasgos extravagantes de la personalidad. Domina la estupidez afectiva, la indiferencia, la inversión de los afectos y los sentimientos ambivalentes, así como la despersonalización y la ausencia de la realidad.
Puede haber agitación y agresividad inmotivada, signos de disgregación del pensamiento y de ruptura de los mecanismos volitivos.
Esquizofrenia Simple (Heboidofrenia)
Los heboides presentan un notable descenso de la emotividad, de la capacidad de contacto y el rendimiento. Progresivamente se tornan apáticos, indiferentes, autistas, pero sin presentar alucinaciones ni ideas delirantes. Suele comenzar en la adolescencia, hundiéndose el individuo, poco a poco, hasta llegar, al cabo de diez o más años, a una situación de esquizofrenia crónica. Entre ellos se encuentran vagabundos, jóvenes con constante inestabilidad laboral, timadores, perversos sexuales y prostitutas.
Esquizofrenia Catatónica
Presenta síntomas psicomotores: actitudes rígidas, flexibilidad cérea, negativismo, obediencia automática, catalepsia, estereotipias, gestos y actitudes inadecuados, mutismo, posturas absurdas, hiperquinesias, inmovilidad, incoherencia y verbigeración. Oscila entre dos situaciones extremas: el estupor o bloqueo catatónico, y la catatonia hipercinética, acompañada de alucinaciones, vivencias delirantes y distimias depresivas o hipomaníacas y confusión mental.
Es posible objetivar signos netamente somáticos: seborrea facial, estreñimiento, fiebre, adelgazamiento o engorde rápidos, cambios del hemograma, deshidratación y piel fría.
Esquizofrenia Paranoide
Tiene entidad propia a lo largo de todo el transcurrir vital. Se caracteriza por trastornos del contenido del pensamiento, en forma de vivencias delirantes primarias o secundarias, poco o nada sistematizadas, así como por alucinaciones, auditivas ante todo; pudiendo haber, además, trastornos del curso del pensamiento. En la mayor parte de los casos, faltan signos relativos a los sentimientos y a la voluntad.
Suele iniciarse entre los 22 y 30 años de edad. Se observa un elevado número de actos antisociales debido a que los pacientes pueden reaccionar violentamente contra personas o cosas.
Esquizofrenia Pseudoneurótica
Tipo Esquizoafectivo
Los pacientes pueden estar muy inhibidos y deprimidos y presentar ideas de autolisis, expresando, además, ideas delirantes de tipo persecutorio, teniendo claros trastornos del pensamiento y quejándose de ser controlados por fuerzas externas. Resaltan más los síntomas esquizofrénicos que los trastornos del estado de ánimo.
Esquizofrenia Latente
Presenta síntomas primarios, trastornos del pensamiento y de la conducta, pero que no manifiestan ningún síntoma secundario.
Esquizofrenia Latente Residual
Es el estado definitivo en que queda el paciente tras un brote o período de actividad clínica.
Esquizofrenia Crónica Indiferenciada
Presenta trastornos del pensamiento, la afectividad y la conducta.
Delitología del Esquizofrénico
Presenta una considerable importancia médico-legal. Los afectos de esta enfermedad delinquen con frecuencia y sus delitos, en ocasiones, son de la máxima gravedad. Su génesis es doble: el automatismo y la impulsión. El automatismo es un acto sin motivación y es propio de las formas simple y catatónica. La impulsión es un acto con motivación delirante, propio de las demás formas clínicas, y que da lugar a frecuentes actos de auto y heteroagresividad.
La proclividad delictiva es muy alta en la forma paranoide, seguida de cerca por la forma simple, y teniendo valores bastantes más bajos las formas hebefrénica, catatónica y restantes. El homicidio y otros delitos contra la integridad corporal y los delitos contra la propiedad se sitúan en primer lugar. Debido a la pérdida de contacto con la realidad y con su disposición afectiva, los enfermos cometen a menudo delitos de desacato, resistencia y atentado a la autoridad.
El homicidio consiste en un acto absurdo, impremeditado, insólito, psicológicamente incomprensible. Las lesiones ofrecen matices similares a los del homicidio. Si a la psicosis se añade deficiencia intelectual, cometen pequeños delitos contra la propiedad, y si el autismo es muy acentuado, propenden al nomadismo. Pueden intervenir en delitos de atraco a mano armada y estafa, tratándose generalmente de postpsicóticos con defecto de su personalidad. En los delitos contra la propiedad, resalta lo absurdo, lo desconcertante de su acción.
Esquizofrenia: Síntomas Primarios
Disociación de la Personalidad
Es el núcleo o alteración fundamental de la enfermedad: esquizofrenia significa pensamiento o cerebro cortado, escindido o disociado. Se extiende a todas las funciones psíquicas básicas: pensamiento, afectividad, inteligencia, conducta motora. En el esquizofrénico falta el normal sentimiento de unidad y actividad propia de su personalidad. Existe un fracaso progresivo de las relaciones del enfermo con el mundo exterior. Esto produce la sensación de aniquilamiento - y la angustia acompañante- que sufre. Hay una pérdida de la despersonalización, desaparición de la identidad y conciencia del Yo. Los pacientes no pueden dirigir su pensamiento o creen que éste les es impuesto por otros, dando origen a síntomas secundarios. La personalidad está separada de la realidad.
Trastornos de la Afectividad
Se observa rigidez afectiva como un estado fundamental, que permanece inmutable a las variaciones de su vida. También indiferencia a todo, hipersensibilidad afectiva con reacciones bruscas, coléricas, y labilidad afectiva, con cambios de humor inmotivados y oscilaciones de ánimo sin causa aparente. Se puede producir una reacción afectiva contraria a la reacción normal: paratimia. También se puede experimentar una sensación de malestar general y ansiedad, períodos de terror intenso. Se produce una falta de tacto social, peticiones de ayuda, rechazos, solicitudes amorosas y actitudes hostiles. Aislamiento.
Los pacientes pueden presentar trastornos en el sentido del ser: sienten que el centro de su identidad está cambiando de manera misteriosa. Autismo: consideran sus ideas y fantasías egocéntricas e ilógicas como realidades, y tienden a evitar la relación con los demás.
Trastornos de la Conciencia, Percepción y Conducta Motora
Es escaso el porcentaje de trastornos de la conciencia, pero existe un trastorno de la sensopercepción. Hay trastornos de la atención. Está disminuida la fuerza intencional de la finalidad del pensamiento. Se observa imposición del pensamiento y la interceptación, sustracción o robo del pensamiento. Son frecuentes las pararrespuestas o respuestas de lado y la creación de neologismos, palabras nuevas. También hay una pérdida de la iniciativa y falta de armonía entre las sensaciones exteriores con las de la sensibilidad profunda, lo que constituye un aspecto de la despersonalización. En ocasiones existe ambivalencia.
Los esquizofrénicos muestran múltiples trastornos de la conducta motora: mutismo, ecolalia (repetición inmediata de las frases que escuchan), ecocinesia (repetición de los movimientos y gestos de la persona que está situada delante del enfermo), negativismo activo (hacer lo contrario de lo que se le pide) y negativismo pasivo (no hacer lo que se le sugiere). En esquizofrénicos crónicos pueden objetivarse estereotipias verbales (repetición de las mismas preguntas o frases) o motoras (repetición de movimientos o ademanes extraños). Otras veces hay una obediencia automática.
10) Síntomas Secundarios
Son menos constantes.
Alucinaciones
Son frecuentes en los esquizofrénicos y pueden motivar su conducta en grado variable. Son más frecuentes al comienzo de la enfermedad. Las más frecuentes son las auditivas, seguidas de las cenestésicas y táctiles; luego vienen las olfatorias; las menos frecuentes son las visuales y gustativas.
- Alucinaciones auditivas: cuchicheos, pitidos, campanadas, voces que se dirigen al enfermo.
- Alucinaciones táctiles: contactos, presiones, roces, manoseos, descargas eléctricas, pinchazos o cortes.
- Alucinaciones cenestésicas: sensaciones desagradables que se originan en el interior del cuerpo.
- Alucinaciones cinésicas: sensaciones anómalas de la estabilidad corporal, vividas por el enfermo como desplazamientos: el suelo sube y baja, vuela.
- Alucinaciones olfatorias y gustativas: el paciente huele los gases de la pared, nota en la comida la mezcla con el veneno con el que le están intoxicando, etc.
- Alucinaciones visuales: ve personas, objetos o escenas en el techo de la habitación.
Al comienzo de la enfermedad, los enfermos son intensamente impresionados por las alucinaciones; más tarde van perdiendo parte de su valor emocional.
Ideas Delirantes
- Delirio de relación: no tiene explicación dinámica ni motivos comprensibles. Se caracteriza porque las cosas adquieren relaciones totalmente diferentes a las normales. La esencia del delirio consiste en establecer relaciones sin causa. Las ideas delirantes de relación nunca son sistematizadas; son absurdas.
- Delirio de significación: aparición de vivencias autorreferenciales.
- Delirio de influencia: consecuencia de otros síntomas primarios (los trastornos del pensamiento) y, a veces, de las alucinaciones. El paciente percibe sentimientos, sensopercepciones, imposiciones y robo del pensamiento, no está seguro de si continúa siendo él mismo o de si no es más que un mero instrumento de cualquier influencia extraña. El delirio de influencia tiene un contenido persecutorio o de perjuicio.
El delirio de influencia tiene dos características: a) constituye un recurso del esquizofrénico para poder vivir en un mundo disociado y desestructurado; b) el delirio está configurado por los estados emocionales y alucinatorios del psicótico, así como por las peculiaridades de su personalidad.