España en el Siglo XVI: Sociedad, Economía, Cultura y Esplendor Renacentista
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Población y Actividades Económicas en la España del Siglo XVI
- La población creció en el siglo XVI, alcanzando los 7.8 millones de habitantes. Castilla, con 6.1 millones, era el reino más poblado y el que soportó el peso económico del imperio europeo.
- La economía castellana pasó por una fase expansiva gracias a los metales preciosos que venían de América.
- La agricultura extendió la superficie cultivada; en Castilla continuó predominando la ganadería ovina.
- La artesanía creció en la primera mitad del siglo XVI por el aumento de la demanda americana.
- El comercio con Europa exportaba materias primas e importaba manufacturas. El comercio con América era un monopolio de Castilla; vendía artículos castellanos y extranjeros a cambio de metales preciosos y productos coloniales.
La Sociedad Española en el Siglo XVI
Los grupos privilegiados, la nobleza y el clero, fueron sometidos a la autoridad real. Ambos estamentos mantuvieron sus privilegios, su prestigio social y su poder económico.
El tercer estado siguió integrado principalmente por campesinos.
Cultura y Arte en la España del Siglo XVI
La Cultura Española del Siglo XVI
El siglo XVI inició la etapa más floreciente de la cultura española, conocida como el Siglo de Oro.
- La enseñanza alcanzó una gran importancia en las universidades de Alcalá de Henares, Salamanca y Valladolid.
- La literatura: Se iniciaron dos géneros de gran trascendencia posterior: la novela picaresca (como El Lazarillo de Tormes) y la novela mística (con Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz).
El Arte del Renacimiento en España
La difusión del Renacimiento en España se vio favorecida por los contactos con Italia, donde España tenía posesiones. Esto facilitó la llegada de artistas italianos, los viajes de formación de artistas españoles y la difusión de estampas y grabados. Sin embargo, la plena aceptación de este estilo se vio frenada por la persistente influencia del Gótico.
La Arquitectura Renacentista
Estilo Plateresco (1500-1530)
Los edificios mantenían las formas góticas en el interior, pero recubrían toda la fachada con abundante decoración renacentista. Esta incluía medallones, escudos y grutescos. Los grutescos eran motivos decorativos propios del Renacimiento, formados por seres fantásticos resultantes de la combinación de elementos humanos, vegetales y animales; solían tener una cabeza o torso humano/animal en la parte superior que acababa en motivos vegetales en la inferior. El nombre "plateresco" se debe a que estos motivos imitaban pinturas descubiertas en grutas subterráneas de monumentos antiguos (como los baños de Tito y Livia en Roma) y se realizaban con una minuciosidad semejante al trabajo de un platero.
Ejemplos: Fachada de la Universidad de Salamanca, Convento de San Marcos de León.
Estilo Purista (1530-1560)
Este estilo adoptó elementos constructivos plenamente renacentistas y simplificó y redujo la decoración en comparación con el Plateresco.
Principal edificio: Palacio de Carlos V en Granada.
Estilo Herreriano (1560-1600)
Su nombre proviene del arquitecto Juan de Herrera. Se caracteriza por la simplicidad de las formas, el uso de cubiertas exteriores de pizarra con inclinación y una marcada desnudez decorativa.
Ejemplo principal: Monasterio-Palacio de El Escorial, encargado por Felipe II en 1563 para conmemorar la victoria de San Quintín sobre los franceses.