Doctrina Fundamental: El Pecado y las Tres Virtudes Teologales (Fe, Esperanza y Caridad)
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El Pecado: Definición, Consecuencias y Tipología
Definición y Naturaleza del Pecado
El pecado es una falta contra la conciencia recta; consiste en faltar al verdadero amor a Dios y al prójimo.
Es una ofensa a Dios, porque se hace el mal que Dios detesta.
Consecuencias del Pecado
El pecado rompe la comunión con Dios, distorsiona el ser del hombre al apartarlo de su último destino, introduce la división y el conflicto en el interior del pecador, y lo enfrenta con su prójimo. Además, desgarra a la familia y a la sociedad.
Tipos de Pecado según la Acción
- Pecado de acción: Se hace lo que no se debe.
- Pecado de omisión: Se deja de hacer lo que se debe.
Distinción entre Pecado Mortal y Pecado Venial
Pecado Mortal
El pecado mortal rompe la comunión con Dios, al preferir el hombre un bien incomparablemente inferior. Entraña la pérdida de la caridad (amor) y del estado de gracia.
Presupone pleno conocimiento y entero consentimiento.
Para restablecer la comunión con Dios se necesita de una nueva iniciativa de la misericordia de Dios y una conversión del corazón, que se realiza, de ordinario, por el Sacramento de la Reconciliación.
Pecado Venial
El pecado venial se comete cuando no se observa la norma moral en materia leve, o cuando se la quebranta en materia grave, pero sin pleno conocimiento o sin entero consentimiento.
No rompe la comunión con Dios, pero debilita la caridad e impide el progreso espiritual y moral.
Las Virtudes Teologales: Fundamento de la Vida Cristiana
Definición y Propósito
Las virtudes teologales son las disposiciones permanentes y habituales que Dios infunde y concede al cristiano para obrar como hijo suyo y merecer la vida eterna. Son la Fe, la Esperanza y la Caridad.
Las virtudes teologales fundan, animan y caracterizan el obrar moral del cristiano.
La Fe
La Fe es el acto por el que “el hombre entero se entrega libremente a Dios” (Dei Verbum, 5), que se le comunica.
Esa entrega lleva consigo el asentimiento de su entendimiento y de su voluntad a cuanto Dios le ha manifestado sobre sí y sobre su designio.
El acto de fe es un acto de amor. La fe, como simple asentimiento a unas verdades, que no despliega su verdad y su fuerza en el amor, y no fructifica en obras buenas, es una fe muerta.
La Esperanza
La Esperanza es la virtud que nos permite aspirar a la vida eterna en Dios como felicidad nuestra, poniendo nuestra confianza en las promesas de Cristo y apoyándonos no en nuestras fuerzas, sino en los auxilios de la gracia del Espíritu Santo.
Por ella es posible soportar con valor y paciencia sufrimientos y persecuciones.
Se opone tanto a la desesperación como a la falsa confianza en la propia capacidad y rendimiento.
La Caridad (El Amor)
La Caridad es la virtud por la cual podemos amar a Dios sobre todas las cosas por Él mismo, y a nuestro prójimo como a nosotros mismos por amor a Dios (Catecismo de la Iglesia Católica, 1822).
El amor a Dios es el sí total, sin reservas ni condiciones, a Dios y a sus mandamientos. Desde ahí es posible el amor al prójimo.
La caridad tiene por frutos el gozo, la paz y la misericordia.