Diversidad de la Vegetación en España: Factores, Regiones y Especies
Enviado por Chuletator online y clasificado en Geografía
Escrito el en español con un tamaño de 8,1 KB
Factores que influyen en la vegetación
La vegetación, también conocida como flora, está integrada por formaciones vegetales, que son el conjunto de especies vegetales de un área determinada. Los tres tipos principales son el bosque (compuesto por árboles), el matorral (arbustos) y el prado (herbáceo). En la Tierra, la vegetación se distribuye en grandes conjuntos florísticos o reinos florales, que a su vez se subdividen en regiones. España forma parte del reino Holártico, que abarca los continentes al norte del trópico de Cáncer, e incluye cuatro regiones: la boreoalpina, la eurosiberiana, la mediterránea y la macaronésica.
La vegetación española es muy diversa, con alrededor de 6000 especies. Esta diversidad se debe a factores físicos como el clima (temperatura y precipitación), el relieve (altura, orientación a barlovento/sotavento y posición en solana/umbría) y el suelo. También influyen factores humanos, como la vegetación secundaria, que es el resultado de la intervención humana.
Región Eurosiberiana: Clima Oceánico
El paisaje vegetal del clima oceánico corresponde a la región floral eurosiberiana. La vegetación de esta región se adapta a la poca insolación y a la precipitación suave, regular y abundante. Destacan el bosque caducifolio, la landa y el prado.
- Bosque caducifolio: Es denso y está formado por árboles altos, de hoja grande y caduca (que se cae en invierno). El roble exige menos humedad y tolera mal el calor y el frío excesivo. Prefiere suelos silíceos y se encuentra en Galicia y en la cordillera Cantábrica. El haya es un árbol de montaña que exige mayor humedad, tolera mal el calor y muy bien el frío. Prefiere suelos calizos y se encuentra en el Pirineo navarro y en la cordillera Cantábrica. El bosque marcescente es propio del clima oceánico de transición.
- Landa: Es un matorral de altura baja (puede alcanzar hasta 4 metros) y resulta de la degradación del bosque caducifolio. Destacan el brezo, el tojo y la retama.
- Prados: Son una vegetación herbácea que ocupa gran parte del paisaje oceánico y se utiliza como alimento para el ganado.
Región Mediterránea: Clima Mediterráneo
El clima mediterráneo corresponde a la región floral mediterránea, con formaciones xerófilas adaptadas a la aridez. Las hojas son pequeñas y duras (esclerófilas). Predomina el matorral y el bosque perennifolio, que, al igual que el caducifolio, se ha visto reducido por los incendios y la acción humana, como la agrarización.
- Bosque perennifolio: Es poco denso y está formado por árboles de media altura, con tronco sinuoso, rugoso y grueso. La hoja es pequeña y perenne. Destacan la encina, que soporta la sequía, el calor estival y el frío invernal, y se adapta a casi todo tipo de suelo, aunque prefiere el calizo. Su fruto, la bellota, se utiliza para alimentar al ganado. El alcornoque necesita cierta precipitación, inviernos moderados y suelos silíceos. De su gruesa corteza se obtiene corcho, y se concentra en el suroeste peninsular. El pino es resultado de repoblaciones debido a su adaptación a climas extremos, su rápido crecimiento y el uso de su resina y madera para construcción o papel.
- Matorral mediterráneo: Presenta tres tipos:
- Maquia: Formada por arbustos de más de 2 metros y muy densos, como la jara, el brezo, el lentisco y la retama.
- Garriga: Incluye arbustos y matorrales de poca altura que dejan zonas sin cubrir.
- Estepa: Compuesta por hierbas bajas mezcladas con arbustos espinosos, propia de la semiaridez del sureste y el valle del Ebro, como el palmito, el tomillo y el esparto.
Vegetación de Ribera
En las riberas de los ríos, la humedad impregna el suelo, por lo que la vegetación presenta rasgos diferentes a medida que se aleja del río. Los bosques de ribera incluyen el aliso y el sauce, cuyas raíces necesitan estar en el agua; el chopo, el álamo y el fresno, cuyas raíces solo requieren humedad en su parte inferior; y el olmo, que exige menos humedad. Junto a estos bosques crecen juncos y matorrales.
Vegetación de Montaña
La vegetación de montaña se dispone en pisos según la latitud, la altitud (gradiente vertical de temperatura) y la orientación (las fachadas norte suelen ser de umbría y barlovento, y las del sur suelen ser a la solana y a sotavento). El bosque aparece hasta los 10 °C de media. Los matorrales surgen a partir de donde el frío impide el crecimiento de árboles. Los prados y pastizales se encuentran en zonas de nieve en invierno, mientras que las plantas rupícolas viven sobre rocas o en su interior, como los líquenes y los musgos.
- Montaña alpina o pirenaica (Pirineos): Tiene cuatro pisos:
- Basal: Presenta encinas, robles y hayas.
- Subalpino: Tiene coníferas naturales como el pino y el abeto, que pueden formar bosques mixtos con el haya.
- Alpino: Está dominado por prados, roca desnuda y canchales donde crecen plantas rupícolas.
- Nival: Con nieve todo el año, no tiene vegetación.
- Montaña atlántica: Se encuentra en el norte de la cordillera Cantábrica. El piso basal tiene bosque caducifolio; el supraforestal, landa; y las cimas, prados.
- Montaña mediterránea: Incluye las montañas del resto de la península y Baleares. El piso basal tiene bosque perennifolio, precedido de maquia en las montañas más al sur, y a mayor altitud tiene caducifolios y/o pinares. El supraforestal tiene maquia o garriga, y los prados están solo en cimas umbrías.
Región Macaronésica: Vegetación de Canarias
El paisaje vegetal de Canarias corresponde a la región floral macaronésica. Destacan los endemismos, que son especies vegetales exclusivas de las islas, y las reliquias, que son vegetaciones de épocas geológicas pasadas que se han conservado en enclaves reducidos bajo climas distintos a los actuales.
- Piso basal: Las plantas están adaptadas a condiciones extremas, como la salinidad (halófilas) y la arena (psamófilas).
- Zonas intermedias: El aumento de humedad y el descenso térmico favorecen la presencia de especies como las palmeras, los dragos y las sabinas.
- Termocanario: La vegetación se adapta al mar de nubes o a la niebla generada por los vientos alisios, que aportan humedad y reducen la insolación. Destaca la laurisilva, un bosque muy denso compuesto por más de 20 especies, característico de estas condiciones húmedas.
- Supracanario: Solo está presente en Tenerife y La Palma. Predominan los matorrales como la retama y se encuentran endemismos únicos como las violetas del Teide.
En resumen, la gran variedad de vegetación en Canarias refleja su diversidad climática, aunque la acción humana ha contribuido a la degradación de algunos paisajes.