Diabetes Mellitus: Definición, Tipos, Síntomas y Estrategias de Tratamiento

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Definición de Diabetes Mellitus

La Diabetes Mellitus (DM) es una patología caracterizada por el déficit de secreción de insulina, la cual es sintetizada por las células beta de los islotes de Langerhans del páncreas. Esta hormona se produce inicialmente en forma de un precursor (proinsulina) que, al ser liberada en la sangre, se descompone en insulina y péptido C.

Función y Efectos de la Insulina

La insulina es la hormona anabolizante por excelencia. Su función primordial es favorecer la incorporación de la glucosa sanguínea a las diferentes células insulinosensibles del organismo (músculo, hígado y tejido adiposo), donde actúa como fuente energética.

Acciones Metabólicas Clave

  • Metabolismo Glucídico: Almacena la glucosa no utilizada en forma de glucógeno (en el hígado y músculo) y propicia la conversión de glucosa en grasas cuando el consumo de glúcidos es elevado.
  • Metabolismo Lipídico: Desempeña un papel importante favoreciendo la lipogénesis (formación de grasas).
  • Metabolismo Proteico: Estimula la síntesis proteica y disminuye la gluconeogénesis hepática a partir de los aminoácidos (AA).

Debido a estas acciones, la insulina es considerada una hormona hipoglucemiante.

Clasificación de la Diabetes Mellitus

  1. Diabetes Mellitus Tipo 1 (DM1)

    Se caracteriza por la destrucción de las células beta, resultando en un déficit absoluto de insulina. La DM1 se subdivide en autoinmune (la más frecuente) e idiopática (cuando es de causa desconocida).

  2. Diabetes Mellitus Tipo 2 (DM2)

    Se presenta en pacientes resistentes a la insulina. La mayoría son obesos y suele aparecer después de los 40 años. No suele tener síntomas en el comienzo, por lo que puede diagnosticarse tras años de su aparición.

  3. Diabetes Mellitus Gestacional (DMG)

    Ocurre durante el transcurso del embarazo. La hormona placentaria tiende a elevar la glucemia. Se produce en el 2-3% de los casos, sobre todo en embarazadas de edad avanzada, con antecedentes de diabetes o en pacientes obesas. En estas situaciones es necesario practicar la curva de glucemia. Es importante que la paciente sea diagnosticada y tratada adecuadamente.

  4. Otros Tipos Específicos

    Engloban diferentes situaciones como defectos genéticos de las células beta, enfermedades del páncreas exocrino, diabetes inducida por medicamentos o endocrinopatías.

Estados de Pre-Diabetes

  • Glucemia en Ayunas Alterada (GAA)

    Pacientes con cifras de glucemia en ayunas anormales (entre 110 y 125 mg/dl).

  • Alteración de la Tolerancia a la Glucosa (ATG)

    Persona con cifras de glucemia normales, pero que, frente a una sobrecarga de glucosa, la glucemia oscila entre 140 mg/dl y 199 mg/dl dos horas después de la ingestión de glucosa.

Manifestaciones Clínicas

Los síntomas clásicos de la diabetes incluyen:

  • Poliuria: Se orina mucho porque la glucosa en la orina arrastra agua (diuresis osmótica).
  • Polidipsia: Mucha sed debido a la pérdida de agua por la orina.
  • Polifagia: Apetito excesivo porque la glucosa no se puede utilizar como fuente de energía celular, generando una demanda constante de energía. Aunque se coma más, el problema metabólico no se soluciona.
  • Astenia (Cansancio): Fatiga por la falta de glucosa en las células, sobre todo las cerebrales, y por la pérdida de masa muscular.
  • Adelgazamiento: Pérdida de masa muscular y adiposa al utilizarse como fuente de energía ante la falta de glucosa disponible para las células.

Complicaciones Agudas

Las complicaciones agudas más importantes son la cetoacidosis diabética y la hipoglucemia.

Objetivos del Tratamiento

El tratamiento se centra principalmente en:

  1. Normalización de la glucemia.
  2. Prevención y tratamiento de las complicaciones agudas y crónicas.
  3. Conseguir una adaptación psicológica adecuada del paciente.

Estrategias para la Normalización de la Glucemia

Para normalizar la glucemia contamos con tres pilares:

  • Dieta: Proporciona la energía y los nutrientes necesarios para mantener un estado óptimo de nutrición.
  • Ejercicio Físico: Aumenta el consumo de energía.
  • Insulina: Permite la utilización de la glucosa, siendo esencial en caso de que la diabetes sea insulinodependiente.

Prevención y Adaptación

La prevención de las complicaciones agudas y crónicas se basa en el mantenimiento de una glucemia normal. Las complicaciones vasculares pueden prevenirse también con modificaciones dietéticas.

Para conseguir una buena adaptación psicológica del paciente, es fundamental que este sepa autocontrolarse, siendo capaz de llevar un seguimiento adecuado, siempre con la supervisión de su diabetólogo.

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