Descartes, la Duda Metódica y el Escepticismo Filosófico
Enviado por Chuletator online y clasificado en Filosofía y ética
Escrito el en español con un tamaño de 3,75 KB
El relativismo es el concepto que sostiene que los puntos de vista no tienen verdad ni validez universal, sino que solo poseen una validez subjetiva y relativa a los diferentes marcos de referencia. En general, las discusiones sobre el relativismo se centran en cuestiones concretas; así, el relativismo gnoseológico considera que no hay verdad objetiva, dependiendo siempre la validez de un juicio de las condiciones en que este se enuncia; o el relativismo moral, que sostiene que no hay bien o mal absolutos, sino dependientes de las circunstancias concretas. Similares postulados se defienden tanto en el relativismo lingüístico como en el relativismo cultural.
La Duda Metódica de Descartes
Existe una distinción entre la duda metódica, que designa un método y consiste en poner en duda todo lo que aparece como verdadero y cierto para llegar a un conocimiento absoluto, eliminando todo lo que es falso; y la duda sistemática, que indica una posición de principio.
La hipótesis del genio maligno es un recurso argumentativo propuesto por René Descartes en las Meditaciones metafísicas. Con él, Descartes culmina la duda metódica, que adquiere así la máxima radicalidad.
Descartes sugiere que tal vez hemos sido creados por un Dios que nos obliga a engañarnos sistemáticamente, que ha dispuesto nuestra naturaleza de tal modo que creemos estar en la verdad cuando realmente estamos en el error. Con esta hipótesis se cuestiona la legitimidad de las proposiciones que parecen tener la máxima evidencia, las que se presentan con "claridad y distinción".
Descartes y el Escepticismo
Argumentos de Duda Cartesiana
- El primer argumento era la **“duda sobre la fiabilidad de los sentidos”**. Si en algunas ocasiones los sentidos nos engañan, no pueden ser fuente de conocimiento porque no siempre obtendremos la verdad.
- El segundo, la **“dificultad de distinguir la vigilia del sueño”**, consistía en lo siguiente: los sueños nos parecen reales y en numerosas ocasiones los confundimos con la realidad, por lo que podemos estar en un sueño continuo y el mundo ser fuente de nuestra imaginación.
- El tercero y último es la **“hipótesis del genio maligno”**. Esta es la duda más radical debido a que es la más improbable. Esta hipótesis nos empuja a imaginar que puede haber alguien superior que nos haga pensar que lo verdadero es falso y lo falso verdadero. Con esto, descarta a la razón.