Desatención, Hábitos Nerviosos y Ansiedad: Enfoques y Soluciones Prácticas
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Comprendiendo la Desatención y el TDAH
Síntomas de Desatención (TDAH)
Se requieren seis o más de los siguientes síntomas de desatención, persistentes por lo menos durante 6 meses, en un grado que es desadaptativo e incoherente con el nivel de desarrollo:
- No presta atención suficiente a los detalles o incurre en errores por descuido en las tareas escolares, en el trabajo o en otras actividades.
- Tiene dificultades para mantener la atención en tareas o actividades lúdicas.
- Parece no escuchar cuando se le habla directamente.
- No sigue instrucciones y no finaliza tareas escolares, encargos u obligaciones en el centro de trabajo (no se debe a comportamiento negativista o a incapacidad para comprender instrucciones).
- Tiene dificultades para organizar tareas y actividades.
- Evita, le disgusta o es renuente en cuanto a dedicarse a tareas que requieren un esfuerzo mental sostenido (como trabajos escolares o domésticos).
- Extravía objetos necesarios para tareas o actividades (por ejemplo, juguetes, ejercicios escolares, lápices, libros o herramientas).
- Se distrae fácilmente por estímulos irrelevantes.
- Es descuidado en las actividades diarias.
Técnicas Operantes para el Manejo Conductual
- Refuerzo/Economía de fichas: Sistema para incentivar conductas deseadas.
- Extinción/Refuerzo de conductas incompatibles: Eliminar refuerzos de conductas no deseadas y reforzar alternativas positivas.
- Sobrecorrección: Corregir el efecto de una conducta inadecuada y practicar la conducta correcta. Aplicable en conductas puntuales y muy determinadas.
Procesos de Atención y Estrategias de Apoyo
Los procesos de atención son una serie de mecanismos cognitivos que los niños deben aprender a controlar. Sin embargo, los niños con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) pueden no ser capaces de hacerlo de forma autónoma, por lo que es fundamental que los adultos a su alrededor comprendan y apliquen estrategias de apoyo.
- Relajación: Aunque por sí misma no mejora el trastorno de TDAH, enseña a los niños autocontrol y puede ser un complemento útil.
- La Técnica de la Tortuga: Estrategia para el autocontrol emocional y conductual.
- Solución de problemas: Enseñar habilidades para abordar y resolver dificultades de manera estructurada.
Trastorno Disocial: Factores e Intervención
Factores Psicosociales Asociados al Trastorno Disocial
- Familias desestructuradas o con dinámicas parentales incompetentes.
- Presencia de un trastorno del comportamiento o enfermedad mental grave en alguna de las figuras de relevancia parental.
- Ambiente social desfavorecido, con carencias económicas y de valores.
- Clima escolar y atención educativa inadecuados (ya sea por exceso o por defecto).
- La demostración de un cariño excesivo o, por el contrario, la falta de afecto, también pueden contribuir a problemas en niños y niñas.
- Exposición a la violencia.
Intervención en el Trastorno Disocial
Los trastornos de conducta se consideran un problema de adaptación al entorno. El objetivo de la intervención es la corrección de esta disfunción, por lo que la evaluación debe tener en cuenta todos los sistemas implicados. El análisis de la conducta del alumno y de su ambiente cobra una importancia crucial.
Principios de la intervención:
- Tratamientos multimodales: Es necesario el uso de enfoques combinados.
- Intervención sistémica: No solo se debe realizar una intervención individual, sino también familiar y grupal, para solucionar el problema contando con un apoyo mayor.
- Enfoque en habilidades: La intervención debe centrarse en el desarrollo de habilidades, competencias y fortalezas en el niño, no únicamente en la reducción de las conductas disruptivas.
- Contextualización: Debe realizarse una intervención individualizada y en el contexto del sujeto, a través de programas de aplicación colectiva que involucren a la familia, la escuela y los servicios sociales.
- Intervención multidisciplinar: Requiere la colaboración de diversos profesionales.
Hábitos Nerviosos: Comprensión y Tipos
Naturaleza y Desarrollo de los Hábitos
- Carácter gradual: Los hábitos suelen comenzar con una frecuencia baja y, progresivamente, se convierten en una conducta normal y habitual en la vida diaria.
- Reacción social: Las reacciones del entorno pueden influir en la persistencia de un hábito.
- Una autoridad que castiga la acción puede, en algunos casos, ayudar a superarlo.
- Otras veces, la reacción del entorno (como generar más estrés al intentar castigar la conducta) puede contribuir a mantener el hábito.
- La permisividad de los adultos también puede ayudar a mantener estas acciones.
¿Son Neuróticas las Personas con Hábitos Nerviosos?
No necesariamente. Los hábitos nerviosos suelen ser costumbres presentes en personas consideradas normales. Por esto, no debemos confundir a individuos con hábitos nerviosos con aquellos que padecen una enfermedad neurótica, ya que en ocasiones estas manías no causan daño significativo a la persona ni afectan negativamente su vida.
Tipos Comunes de Hábitos Nerviosos
Onicofagia (Morderse las Uñas)
Es un hábito que suele comenzar a partir de los cuatro años.
Consecuencias:
- Problemas estéticos: Las uñas pueden verse muy afectadas.
- Posible retraimiento social.
Tricotilomanía (Arrancarse el Pelo)
Consiste en el arrancamiento crónico y repetitivo del pelo, que termina provocando alopecia. Se asocia con una sensación de tensión antes de realizar la conducta y alivio una vez ejecutada. Suele aparecer alrededor de los 13 años.
Consecuencias:
- Problemas de estética.
- Posible retraimiento social.
Tics
Son movimientos o emisiones de sonidos o palabras involuntarias, repentinos, de corta duración, repetitivos y estereotipados. La frecuencia e intensidad son variables. En algunas personas, existe un patrón permanente, mientras que en otras, estos tics solo suceden en momentos de tensión y/o ansiedad. Aunque se suelen recomendar tratamientos de relajación, esta técnica no se considera una medida definitiva para solucionar el problema. Suelen aparecer sobre los seis años.
Tipos de tics:
- Motores
- Verbales
- Síndrome de Gilles de la Tourette (combinación de tics motores y vocales crónicos)
Estrategias para Superar Hábitos Nerviosos
Aprendizaje de la Reacción de Competencia
Esta técnica se enfoca en reemplazar el hábito no deseado por una conducta incompatible.
Uso:
- Identificar la conducta: Determinar claramente la conducta que se desea suprimir con el sujeto.
- Conciencia y acción: Cada vez que el sujeto se dé cuenta de que ejecuta o va a ejecutar el hábito, debe iniciar la reacción de competencia.
- Señal de inicio: Usar la señal asociada al hábito (el impulso o la situación que lo desencadena) como señal para iniciar la reacción de competencia.
- Duración: La duración de la reacción de competencia será de aproximadamente tres minutos. Este tiempo no tiene que ser exacto y puede ajustarse, ya que tres minutos podrían ser excesivos en algunos casos.
- Práctica con espejo: Utilizar un espejo puede ser útil durante las prácticas para aumentar la autoconciencia.
Ejemplos aplicados a Onicofagia y Tricotilomanía:
- Apretar o agarrar un objeto: La presión debe ser lo bastante intensa para que la persona la perciba y se haga consciente de lo que está haciendo. Por ejemplo:
- Al leer un libro: sujetarlo con fuerza.
- Al escribir: presionar la mano contra el papel.
Consejos para la Intervención en Hábitos Nerviosos (Especialmente en Niños)
- Suprimir soluciones ineficaces: Evitar castigar, advertir constantemente o reñir, ya que suelen ser contraproducentes.
- Motivación: El éxito, especialmente con niños, dependerá de su motivación para practicar la reacción de competencia.
- Comprensión conjunta: Leer con el niño las instrucciones para el control del hábito.
- Beneficios claros: Comentar y destacar los beneficios de eliminar el hábito.
- Refuerzo positivo: Reforzar activamente los cambios positivos y los esfuerzos.
- Felicitaciones diarias: Marcarse un mínimo de felicitaciones diarias por los progresos.
- Manejo de errores: Cuando el niño cometa un error o parezca no poner mucho interés, hacerle ver que se comprenden las dificultades que implica dejar el hábito, en lugar de recriminar.
- Recordatorios positivos: Los recordatorios sobre la reacción de competencia deben realizarse de forma positiva y, preferiblemente, después de haber reforzado al niño por otros aspectos.
- Autorregistro: Animar al niño a que lleve un registro de la frecuencia del hábito para visualizar el progreso.
Trastornos de Ansiedad: Fobias, Ansiedad por Separación y TOC
Criterios Diagnósticos de las Fobias Específicas
- Temor acusado y persistente que es excesivo o irracional, desencadenado por la presencia o anticipación de un objeto o situación específicos.
- La exposición al estímulo fóbico provoca casi invariablemente una respuesta inmediata de ansiedad (en niños, esta puede manifestarse como lloros, berrinches, inhibición o aferrarse).
- La persona reconoce que este miedo es excesivo o irracional (este reconocimiento puede faltar en niños).
- Los comportamientos de evitación, la anticipación ansiosa o el malestar provocados por el estímulo fóbico interfieren acusadamente en la rutina normal del sujeto, en sus relaciones laborales (o académicas) o sociales, o bien producen un malestar clínicamente significativo.
Fobia Escolar
El niño o niña con fobia a la escuela presenta las siguientes características:
- Expresa su negativa a asistir al colegio tanto verbal como conductualmente.
- Suele presentar síntomas somáticos (dolores de cabeza, estómago, etc.) antes de ir o al estar en el colegio.
- En el colegio, su comportamiento puede tender a ser disruptivo o, por el contrario, de inhibición extrema.
- Anticipa consecuencias desagradables relacionadas con la escuela: que se rían de él/ella, ser rechazado/a, no saber contestar, tener dolores, recibir riñas de los maestros, etc.
Nota: El texto original mencionaba "ANSIEDAD POR SEPARACIÓN" como encabezado, pero el contenido que seguía describía las obsesiones y compulsiones, características del Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC). La siguiente sección se ha estructurado en torno al TOC.
Obsesiones y Compulsiones (Características del Trastorno Obsesivo-Compulsivo - TOC)
Obsesiones
Se definen por:
- Pensamientos, impulsos o imágenes recurrentes y persistentes que se experimentan como intrusos o inapropiados y causan ansiedad o malestar significativos.
- Estos pensamientos, impulsos o imágenes no se reducen a simples preocupaciones excesivas sobre problemas de la vida real.
- El sujeto intenta ignorar o suprimir dichos pensamientos, impulsos o imágenes, o bien intenta neutralizarlos mediante otros pensamientos o actos (compulsiones).
- El sujeto reconoce que estos pensamientos, impulsos o imágenes obsesivos son el producto de su mente (no vienen impuestos desde fuera, como en la inserción del pensamiento).
Compulsiones
Se definen por:
- Comportamientos (por ejemplo, lavado de manos, ordenación, comprobación) o actos mentales (por ejemplo, rezar, contar, repetir palabras en silencio) de carácter repetitivo, que el individuo se ve obligado a realizar en respuesta a una obsesión o con arreglo a ciertas reglas que debe aplicar de manera rígida.
- El objetivo de estos comportamientos o actos mentales es la prevención o reducción del malestar, o la prevención de algún acontecimiento o situación negativos; sin embargo, estos comportamientos o actos mentales o bien no están conectados de forma realista con aquello que pretenden neutralizar o prevenir, o bien resultan claramente excesivos.