El Desastre de 1898: Consecuencias de la Guerra Hispano-Estadounidense y el Fin del Imperio Español

La Guerra Colonial y la Crisis de 1898

El Contexto Económico y el Auge del Nacionalismo

Cuba y Puerto Rico basaban su economía en la agricultura de exportación, principalmente:

• Azúcar de caña
• Tabaco

Estos cultivos empleaban mano de obra negra esclava. El desarrollo económico alcanzado por estas colonias las hacía extremadamente lucrativas para la metrópoli.

Las leyes arancelarias impuestas por el Gobierno de Madrid convirtieron a estos territorios en un «mercado cautivo» de los textiles catalanes o las harinas castellanas. Esta situación perjudicaba gravemente a los cubanos, quienes podían encontrar productos mejores y más baratos en Estados Unidos. La hegemonía española se centró cada vez más en la defensa de los intereses de una reducida oligarquía esclavista.

La Situación en Filipinas

El caso filipino era bien diferente. Allí la población española era escasa, con muy pocos capitales invertidos. El dominio español se sustentaba en una pequeña presencia militar y, sobre todo, en el poder de las órdenes religiosas.

El descontento colonial encontró líderes en figuras clave del nacionalismo independentista:

• José Rizal (Filipinas)
• José Martí (Cuba)

El Estallido de la Guerra y la Intervención de Estados Unidos

La Guerra Larga (1868-1878) había sido un primer aviso de las aspiraciones independentistas de los cubanos. La ausencia de reformas facilitó el desarrollo del anticolonialismo. En 1895 estallaron de nuevo insurrecciones independentistas en Filipinas y Cuba.

Una dura y cruel guerra volvió a provocar que soldados de las clases más humildes fueran embarcados hacia esas distantes islas. La gran novedad fue la ayuda estadounidense a los rebeldes cubanos. La guerra de Cuba mostró la pugna entre un imperialismo moribundo, el español, y otro que marcaría los tiempos venideros, el norteamericano, cuyo interés por la isla caribeña era doble:

1. Económico: Cuba era la primera productora de azúcar del mundo.
2. Geoestratégico.

El Hundimiento del Maine y la Declaración de Guerra

La explosión que provocó el hundimiento del acorazado Maine, que se hallaba en el puerto de La Habana, así como la muerte de 266 de sus tripulantes, desató una campaña periodística de las cadenas de Pulitzer y Hearst. El presidente McKinley, alentado por una opinión pública cada vez más belicista, declaró la guerra a España.

El conflicto fue un paseo militar para Estados Unidos, que conquistó Cuba, Puerto Rico y Filipinas.

El Tratado de París y las Consecuencias Territoriales (1898)

España firmó la Paz de París en diciembre de 1898. Por este acuerdo, España cedía a Estados Unidos los siguientes territorios:

• Puerto Rico (que hoy sigue siendo un Estado Libre Asociado)
• Filipinas
• La Isla de Guam

Cuba alcanzó la independencia bajo la «protección» estadounidense (establecida mediante la Enmienda Platt y la base militar de Guantánamo). La sustitución del dominio español por el norteamericano engendró un profundo descontento en las antiguas colonias. Estados Unidos tuvo que hacer frente a una guerra en Filipinas (1899-1913); y en Cuba el sentimiento antinorteamericano se extendió por amplias capas sociales.

El Impacto en España: El «Desastre del 98»

Desde la perspectiva española, la pérdida de las últimas colonias vino a denominarse el «Desastre del 98» y tuvo una importante influencia en la conciencia nacional. La irresponsabilidad de los Gobiernos de la Restauración había llevado a una situación que costó la vida de decenas de miles de españoles, primero en la guerra contra los insurrectos cubanos, y después en un conflicto contra Estados Unidos que no se podía afrontar.

Consecuencias Económicas y Políticas

El fin de la guerra permitió al ministro Fernández Villaverde abordar algunas reformas necesarias en el sistema de impuestos y en la emisión de deuda, lo que supuso un saneamiento de la situación de la Hacienda. Por primera vez en mucho tiempo, a principios del siglo XX, el Estado español tuvo superávit. La pérdida de las colonias implicó también una importante repatriación de capitales que fueron invertidos en la economía peninsular.

La Crisis de la Conciencia Nacional

No obstante, la derrota ante Estados Unidos y la pérdida de combatientes provocó una conmoción en la sociedad española. Su impacto en el mundo de la política y la intelectualidad generó una profunda crisis de la conciencia nacional, que marcaría la obra de los autores de la Generación del 98:

• Unamuno
• Baroja
• Maeztu
• Machado
• Azorín
• Valle-Inclán

Surgieron propuestas de reforma como el Regeneracionismo de Joaquín Costa, que reivindicaba una verdadera democracia, basada en las clases medias, y la modernización política, económica, social y educativa. Por otro lado, cobraron mayor presencia los nacionalismos periféricos, ante una crisis de «la idea de España».

La derrota de 1898 había puesto de relieve todas las limitaciones del régimen de la Restauración y su parálisis a la hora de afrontar el futuro del país.