Desarrollo del Lenguaje Oral en Educación Infantil: Fases y Estrategias Metodológicas
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Desarrollo de la Lengua Oral en la Primera Infancia
Fase Holofrástica (12-18 meses)
Entre los 12 y 18 meses, el niño dice las primeras palabras: configuraciones semejantes a las producciones adultas, que hacen referencia al contexto compartido y tienen función de frase. A través de las palabras frase, el niño comunica intenciones y significados que el adulto es capaz de interpretar apoyándose en los índices paralingüísticos y extralingüísticos. La palabra del niño adquiere sentido en el contexto compartido.
Fonéticamente, produce palabras semejantes a las producidas por el adulto, pero también construcciones inventadas que los adultos que conviven con él conocen. Sus emisiones se caracterizan por la media lengua, el ceceo y el rereo. Asimismo, existe el defecto acusado de cambiar el orden de las sílabas en las palabras.
Fase Telegráfica (20-24 meses)
A partir de los 20-24 meses, se produce un rápido aumento del vocabulario. Cuando el niño va creciendo, tiene más necesidades de comunicación y percibe que las palabras son más cómodas que los gestos. Cuando el niño construye enunciados con dos o tres palabras juntas y seguidas, lo llamamos expresión telegráfica.
Al mismo tiempo que se inicia un tipo de articulación sintáctica, se manifiesta la adquisición de la conciencia de cada una de estas palabras como entidades aisladas y, por lo tanto, diferenciadas, cargadas de significado en sí mismas.
Directrices Metodológicas para la Enseñanza-Aprendizaje de la Lengua Oral (T4)
Objetivos para el Desarrollo de Competencias
Para desarrollar la Competencia Lingüística:
- Deben desarrollar progresiva y correctamente el sistema de articulación de los sonidos de su lengua.
- Deben aumentar el repertorio léxico, aprendiendo a utilizar los términos con precisión.
- Deben aprender las características de la morfología y de la sintaxis de la lengua.
Para desarrollar la Competencia Comunicativa:
- Adquirirán fórmulas sociales habituales.
- Aprenderán a intervenir en una conversación.
- Aprenderán el valor de los elementos no lingüísticos que acompañan a la expresión oral.
El Desarrollo de Ambas Competencias en Educación Infantil (EI)
El desarrollo de ambas competencias se logra en Educación Infantil mediante:
- El uso del lenguaje para funciones distintas.
- La utilización de distintos tipos de texto según las situaciones funcionales en las que participe.
- La participación en todo tipo de situaciones.
En EI no parece adecuado seleccionar y planificar unos contenidos concretos, sino que es más apropiado guiarse por la creación de situaciones educativas que permitan conseguir unos objetivos muy generales y en las que, de forma integradora, se fomenten adquisiciones de todas las áreas.
Organización Espacial y Situaciones de Aprendizaje
Cuidando la colocación de los niños en esas situaciones, tendremos:
1. Situaciones con un objeto de observación
Los niños deberán colocarse alrededor del mismo de manera que puedan observar y escuchar al mismo tiempo. El docente debe desplazarse por detrás de ellos para que pueda hablar individualmente con el niño que quiera y para que esté a disposición de todos.
2. Situaciones sin objeto de observación
Los niños están sentados en la alfombra; el docente también está sentado e intentará colocar cerca de él a los niños más inhibidos a la hora de participar y a los niños con atención más dispersa. Colocará más o menos estratégicamente a los niños con mayor nivel de participación para que constituyan núcleos activos repartidos entre el grupo.
Estrategias Docentes para Fomentar la Expresión Oral
Se puede ayudar al niño a que se exprese de la siguiente manera:
- Haciéndoles preguntas abiertas cuyas respuestas no sean conocidas por la maestra.
- Realizando series de preguntas que permitan al niño precisar mejor lo que quiere decir.
- Utilizando expresiones para extraer información del niño, expresiones menos directas que llevan a los niños a formular enunciados más complejos y abiertos.
- Haciendo partícipes a todos de las respuestas de tal o cual niño que, a lo mejor, lo ha dicho en voz baja y muy cerca de la maestra porque no está seguro de si lo dice bien.
- No respondiendo a preguntas a las cuales ellos mismos pueden contestar si se les ayuda.