Desarrollo de la Guerra Civil Española y el Bienio Derechista: 1933-1939
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Desarrollo de la Guerra Civil Española: 1936-1939
1936: El inicio del conflicto y la toma de Madrid
El plan inicial de los nacionales era ocupar Madrid para terminar rápidamente la guerra. Para ello, el grueso de las tropas de Marruecos (las más modernas y mejor entrenadas del Ejército) cruzó el estrecho de Gibraltar e iniciaron una marcha desde Andalucía, por Extremadura y Toledo, hasta llegar a las afueras de Madrid en el mes de octubre. Ante un inminente ataque, el gobierno republicano dejó Madrid y se estableció en Valencia. Mientras, se organizó en Burgos el Gobierno nacional, siendo nombrado jefe del Estado el general Francisco Franco.
1937: Fracaso en Madrid y la campaña del Norte
Tras casi seis meses de durísima batalla en las inmediaciones de Madrid, el ejército de Franco fracasa en su intento y, en abril de 1937, decide iniciar la ocupación del norte de España. En junio, los nacionales ocupan Bilbao y después las demás ciudades y zonas mineras e industriales del País Vasco, Cantabria y Asturias. El gobierno republicano había perdido ya todo el norte de España. El 26 de abril de 1937 se produjo el tristemente célebre bombardeo de la población vasca de Guernica.
1938: La Batalla del Ebro
En este año, el ejército franquista avanza sobre Aragón y alcanza el Mediterráneo por Castellón, logrando así uno de sus principales objetivos: dividir la zona republicana en dos partes, lo que hará más difícil su resistencia. Pero en julio de ese año, para impedir el avance del enemigo, los republicanos concentran todas sus fuerzas en el Ebro, iniciándose el enfrentamiento que decidirá el resultado definitivo de la guerra: la Batalla del Ebro. Tras diversas ofensivas y contraofensivas, en diciembre el ejército republicano se hunde.
1939: Caída de Cataluña y fin de la guerra
Franco lanza una ofensiva contra Cataluña. Barcelona cae el 26 de enero. En febrero, sólo Madrid y la zona centro resistían ya al ejército de Franco. El desmoronamiento del Gobierno y del Ejército republicano era total. Las tropas franquistas avanzan ya sin apenas oposición. El 28 de marzo, Madrid se rinde sin disparar un solo tiro. El 1 de abril, Franco da su último parte de guerra.
El Bienio Derechista (1933-1936)
Las elecciones de noviembre de 1933 fueron ganadas por los partidos de la derecha (40%) y el centro (23%). Fue elegido presidente el líder del Partido Radical (centro político), Alejandro Lerroux, con el apoyo parlamentario del partido más votado, la CEDA.
Se revisan muchas de las reformas del periodo anterior y a otras se les da una orientación moderada. La reforma agraria y la legislación militar se mantienen, pero cambia la política educativa: se construyen menos escuelas públicas, no se cierran las católicas y se pone fin a la enseñanza mixta. Esta situación provoca la radicalización de los partidos de la izquierda.
La Revolución de Octubre de 1934
El 5 de octubre de 1934 estalla una huelga general revolucionaria en toda España, convocada por un comité dirigido por socialistas, comunistas y algunos anarquistas. La entrada de la CEDA en el gobierno era considerada por la coalición azañista (republicanos, PSOE) como la llegada del fascismo. De este modo, al día siguiente, por iniciativa de la UGT, se producen huelgas generales en todas las ciudades, que fueron contestadas con el decreto de estado de guerra por el gobierno. La huelga fue seguida desigualmente: más fuerte en Asturias y Cataluña.
La Revolución de Asturias
En Asturias se produjo una revolución social. A partir de una huelga general se produce una insurrección armada. De la represión se encargó el general López Ochoa y Franco, al frente de la Legión. El saldo: 4000 muertos, numerosas detenciones, condenas a muerte. Son detenidas 30.000 personas.
Por su parte, el gobierno español suprimió el estatuto y encarceló al gobierno catalán, pero sin derramamiento de sangre.
Finalmente, varios escándalos de corrupción rompen y desacreditan al gobierno, por lo que el presidente de la República, Alcalá Zamora, vuelve a disolver las Cortes y convoca nuevas elecciones para febrero de 1936.