Desarrollo Emocional y Social en la Primera Infancia: Claves para Niños de 3 a 6 Años

Modelos Funcionales de las Emociones en la Infancia (3-6 años)

Los modelos funcionales explicativos de las emociones en la etapa infantil (3-6 años) se caracterizan por los siguientes rasgos fundamentales. Estos modelos se centran en comprender las funciones de las emociones, destacando su papel esencial en el desarrollo y la adaptación del niño.

• Relación con otros procesos: Las emociones son fenómenos estrechamente vinculados con procesos cognitivos, perceptivos y sociales, entre otros.
• Adaptación al entorno: Se investiga cómo las emociones facilitan la adaptación del niño a los medios físico, social y cultural.
• Nuevos focos de investigación: Existe un creciente interés en el vínculo entre emociones y acción, así como en las funciones sociales de la emoción.

El Enfoque Funcionalista y el Desarrollo Emocional en Educación Infantil (3-6 años)

El enfoque funcionalista describe el desarrollo emocional en la educación infantil (3-6 años) concibiendo las emociones como fuerzas centrales y adaptativas que influyen en todos los aspectos de la actividad humana, incluyendo el procesamiento cognitivo, la conducta social e incluso la salud física.

Las emociones como determinantes clave:

• Impacto en el procesamiento cognitivo

  Las reacciones emocionales tienen un profundo impacto en el procesamiento cognitivo. Impulsan el aprendizaje y ejercen poderosos efectos sobre la memoria. Esta relación entre procesamiento y emoción es bidireccional.

• Influencia en la conducta social

  Las señales emocionales de los niños influyen en la conducta de otras personas, y, a su vez, las reacciones emocionales de los demás regulan la conducta social del niño.

• Repercusión en la salud física

  Las emociones también influyen significativamente en el bienestar físico del niño.

Expresión Emocional: Temor y Ansiedad en la Etapa Infantil (3-6 años)

Durante la etapa de los 3 a los 6 años, el niño debe aprender a gestionar el estrés causado por el temor y la ansiedad. Es crucial diferenciar entre ambos conceptos:

• Temor: Es la respuesta emocional ante una situación concreta y claramente identificable.
• Ansiedad: Surge cuando la causa que la origina es desconocida o difusa.

El temor y la ansiedad pueden tener diversos orígenes en la infancia. A veces, los niños pequeños experimentan miedo al abandono o a dejar de ser queridos por sus padres. Las fuentes de algunos temores son claras, como el miedo al médico o a los hospitales. Sin embargo, otros miedos están más relacionados con la fantasía o los sueños, como el miedo a la oscuridad o a los monstruos. Para afrontar estos miedos, el adulto debe recurrir a la amabilidad y la empatía, evitando el uso de la fuerza o el ridículo.

Desarrollo del Autoconcepto y Autodescripciones en Niños (3-6 años)

El autoconcepto se define como el conjunto de características (físicas, intelectuales, afectivas, sociales, etc.) que configuran la imagen que un sujeto tiene de sí mismo. A partir de este autoconcepto, se desarrolla la autoestima, que es la valoración de uno mismo en función de la percepción que se tiene de sí mismo.

Las descripciones que los niños en educación infantil hacen de sí mismos son las siguientes:

• Utilizan términos simples y globales (ej., bueno, malo, grande, pequeño).
• Se basan en características concretas y observables: aspectos físicos, actividades habituales, preferencias o gustos y posesiones.
• Suelen describirse con un sentido predominantemente positivo.
• En esta etapa, comienzan a emplear opuestos (ej., bueno-malo) para identificarse a sí mismos o a otros.
• A lo largo de esta etapa, los niños progresan en su autoconcepto y en el reconocimiento de los demás.

Perspectivas sobre el Desarrollo del Conocimiento Social en la Infancia

Existen dos perspectivas principales sobre el desarrollo del conocimiento social en la etapa infantil:

• Perspectiva Constructivista

  Según esta perspectiva, el niño no solo absorbe la información de su entorno, sino que la transforma activamente para asimilarla a sus conocimientos previos. El niño se informa sobre su entorno y lo interioriza, construyendo así su propia comprensión de la realidad social.

• Perspectiva Socioevolutiva

  Esta perspectiva sostiene que la posición que ocupa el individuo en su grupo social determina, en parte, sus representaciones sobre la realidad social. El conocimiento que el niño tiene sobre la realidad social influye significativamente en su posición dentro del grupo.