Criterios de Evaluación Estratégica: Adecuación, Factibilidad y Aceptabilidad en la Gestión Empresarial

Evaluación y Selección de Estrategias: Criterios Clave para el Éxito Organizacional

El proceso de evaluación y selección de estrategias consta de tres etapas fundamentales, cuyos criterios son: adecuación, factibilidad y aceptabilidad. Es crucial tener en cuenta los intereses y motivaciones implícitos de los directivos, las relaciones de poder entre los distintos grupos de interés o la tendencia estratégica del momento. Cabe señalar la imposibilidad de demostrar a priori la estrategia óptima y garantizar el éxito.

1. Criterio de Adecuación (Suitability)

La adecuación de las estrategias evalúa cómo estas se adaptan a la misión, a los objetivos y a la situación identificada en el estudio estratégico. Observa los siguientes aspectos:

• Cómo hace frente a las dificultades identificadas en el estudio estratégico.
• Cómo explota nuestras fortalezas y las oportunidades del entorno.
• Cómo se adecua a la misión y a los objetivos estratégicos de la organización.

Enfoques para la Evaluación de la Adecuación

Se pueden llevar a cabo dos enfoques principales:

1. Evaluación de la adecuación mediante modelos estratégicos: Trata de establecer a priori la adecuación de las alternativas estratégicas, utilizando un proceso de razonamiento lógico basado en modelos teóricos para evaluar la idoneidad de una estrategia.
2. Evaluación de la adecuación mediante evidencia empírica: Trata de analizar empíricamente los resultados concretos obtenidos con la estrategia que se ha elegido. Son relevantes los trabajos del Instituto de Planificación Estratégica del Reino Unido (RU) y, en España, la encuesta Estra Empre F.SEPI.

2. Criterio de Factibilidad (Feasibility)

La factibilidad de las estrategias hace referencia a su consistencia o ajuste con la organización en la que va a ser implantada, así como a la disponibilidad de los recursos y capacidades necesarios para el éxito de la estrategia. Hay que tener en cuenta:

• Factibilidad financiera: Disponibilidad de los fondos financieros que necesite la estrategia en cuanto a su volumen, fuentes y plazos.
• Disponibilidad de otros recursos: Posesión de los recursos y capacidades necesarios para poder desarrollar la estrategia.

Problemas asociados a la Factibilidad

Se identifican dos problemas principales:

1. El grado en el que los recursos y capacidades actuales de la empresa tienen que cambiar para implantar la estrategia.
2. La forma en que pueden explotarse mejor las competencias esenciales para mantener la ventaja competitiva con la nueva estrategia.

3. Criterio de Aceptabilidad (Acceptability)

Mide las consecuencias de adoptar una determinada estrategia, es decir, si los resultados esperados son aceptables por los grupos de interés de la empresa. Una estrategia es aceptable cuando se espera que mejore la situación actual.

Criterios de Aceptabilidad y Medición

1. Rentabilidad y creación de valor: A mayor creación de valor, más aceptable.

   Medidas: Rentabilidad financiera (TIR, PAY-BACK). Problemas: Identificación de ingresos (I) y costes (C), y que no suelen tener en cuenta beneficios intangibles.

2. Riesgo/Fracaso Operativo (FRO): Derivado de la posibilidad de fracaso o como consecuencia de malos resultados conjuntos.

   Medición: Ratios de endeudamiento o liquidez. Se utiliza el Análisis de Sensibilidad (variación de resultados con cambios en supuestos básicos).

3. Riesgo Político: Reacción negativa de los grupos de interés ante la estrategia elegida.

   Reacción de grupos de poder: La reacción de los agentes de la empresa frente a la implantación de la estrategia puede poner en peligro su éxito.

Implantación de la Estrategia

La implantación de la estrategia es el conjunto de actividades y decisiones necesarios para poner en marcha la estrategia de modo que se consigan la misión y los objetivos estratégicos planteados. Indica cómo actuar para conseguir lo que se quiere hacer.

Si la elección de la estrategia no es adecuada, se manifestará un problema que permitirá corregir el rumbo. Una elección pobre en la formulación o una implantación deficiente implican resultados pobres. La formulación y la implantación no son problemas independientes. Estos ajustes son indicativos del grado de éxito de una empresa.