Consecuencias del Desastre del 98: Insurrección Filipina, Guerra Hispano-Estadounidense y Regeneracionismo
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c) La insurrección filipina (1896): Filipinas se rebela en 1896. Polavieja, al mando de las tropas españolas, actuó con extrema dureza y ejecutó a José Rizal.
d) El accidente del “Maine” y la intervención de los EE.UU: En 1898 tuvo lugar la voladura del Maine, donde mueren más de 250 marinos norteamericanos. Estalló a causa de algún accidente, pero la prensa y el gobierno de EE.UU culparon a España y se ofrecieron a comprar la isla. Los políticos de la Restauración prefirieron una derrota honrosa antes que una paz comprada. EE.UU declara la guerra a España en abril de 1898. La lucha fue desigual y la derrota imperdonable: hundimiento de las escuadras españolas en Filipinas y Santiago de Cuba, desembarcos de los “marines” sin problemas.
e) El Tratado de París y el fin del imperio español: El Tratado de París supone la liquidación definitiva del viejo imperio colonial español, ajustando su presencia a su papel real de potencia de segunda fila. Por él, Cuba será independiente, mientras que Puerto Rico, Filipinas y otras islas del Pacífico pasan a manos de los EE.UU.
Repercusiones del “Desastre”
- Pérdidas humanas: Las pérdidas humanas en las guerras de 1895-1898 costaron unas 120,000 muertes, la mitad soldados españoles. La mayoría de las bajas se debieron a enfermedades infecciosas.
- Los perjuicios psicológicos y morales: Fueron importantes: los supervivientes volvían heridos, mal atendidos, muriendo de hambre o mutilados. A ello se añadió la desmoralización de soldados y de la población civil, que al empezar la guerra no mostró mucho entusiasmo, pero avanzado el tiempo, viendo cómo morían sus hijos o llegaban mutilados, pasó de la indiferencia a la enemistad.
- Las pérdidas materiales: La derrota supuso la pérdida de los ingresos procedentes de las colonias, así como de los mercados privilegiados y de las mercancías, que como el azúcar, el cacao o el café, deberían comprarse en el futuro a precios internacionales.
- La crisis política: El desgaste fue de ambos partidos, pero afectó al liberal y a Sagasta, a quien tocó afrontar la derrota. Con él desapareció la primera generación de dirigentes de la Restauración, que cedió el terreno a los nuevos líderes. Lo más grave fue el desprestigio militar derivado de la dureza de la derrota.
- Resentimiento militar y antimilitarismo popular: Los militares quedan heridos y buscan culpables en los políticos que dirigieron mal la guerra, que no “dotan” convenientemente el presupuesto militar. Las clases populares aumentan su rechazo hacia el ejército: el reclutamiento se hizo como siempre, salvándose los hijos de las clases pudientes, yendo y sufriendo la guerra los hijos de quienes no tenían recursos, que se quedan sin mano de obra en casa, que a veces pierden el hijo o lo traen lisiado, y todo por una guerra que defiende un territorio donde los negocios los hacen las clases privilegiadas. El espectáculo de heridos y mutilados aumentó el rechazo popular al ejército, el movimiento obrero hizo campaña contra el sistema de reclutamiento.
- El regeneracionismo: Fue un importante movimiento intelectual y crítico que surgió a partir del desastre del 98, rechazaba el sistema político y social de la Restauración. Sus representantes más destacados: Unamuno, Costa y Ganivet. El regeneracionismo tuvo una vertiente literaria, la Generación del 98, que dio nuevos impulsos a la vida intelectual y política del país a principios del siglo XX.