Concepción del Alma en Platón: Dualismo, Partes e Inmortalidad
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Antropología Platónica: La Naturaleza del Alma
Platón consideraba que descubrir la verdadera naturaleza del alma era una tarea divina y extensa. Su filosofía, en este aspecto, tenía dos intenciones principales: éticas y gnoseológicas.
1. Dualismo Platónico
La concepción platónica del mundo es dualista, dividiéndolo en dos realidades distintas. Esta visión también se aplica a su concepción del ser humano, en la que distingue entre alma y cuerpo. La superioridad del mundo de las Ideas sobre el mundo sensible se traduce, en el contexto antropológico, en una prioridad absoluta del alma sobre el cuerpo.
- El cuerpo: Es considerado la cárcel del alma, un lastre negativo y un estorbo del que el alma debe liberarse gradualmente. El cuerpo inclina al alma hacia los placeres sensibles.
- El alma: Es muy superior al cuerpo, constituye nuestro verdadero yo, es de naturaleza espiritual y proviene del mundo inteligible. El alma es el principio que mueve al cuerpo. El alma racional es una creación directa del Demiurgo. Desciende a la tierra a través de un carro alado y queda instalada en el mundo sensible.
2. Las Partes del Alma
Platón divide el alma en tres partes:
- Alma racional: De naturaleza divina, situada en el cerebro, se dedica al pensamiento puro.
- Alma irascible: Fuente de pasiones nobles, situada en el tórax e inseparable del cuerpo.
- Alma apetitiva: Situada en el abdomen y mortal, de ella provienen las pasiones más bajas.
3. Inmortalidad del Alma
Platón argumenta la inmortalidad del alma en el Fedón, utilizando varios razonamientos:
- Argumento de la sucesión de contrarios: A la vida le sucede la muerte y viceversa.
- Argumento de la participación del alma en la Idea de la Vida: El alma participa en la Idea de la Vida, por lo que no puede contener su contrario, la muerte. Por lo tanto, el alma es inmortal.
- Argumento de la semejanza con las Ideas: El alma es semejante a las Ideas, por lo que es inmaterial, simple e indivisible, y por lo tanto, no puede descomponerse ni corromperse.
- Argumento de la anamnesis: El alma recuerda las Ideas que conoció antes de unirse al cuerpo, lo que implica una preexistencia diferente.
- Argumento ético del dominio del cuerpo: Si el cuerpo y el alma se destruyeran al morir, los que no han dominado las pasiones y han cometido maldades quedarían impunes. Para que el bien y el mal reciban su justo premio o castigo, el alma debe ser inmortal.
- Argumento de la simplicidad: El alma conoce a las Ideas porque son semejantes, por lo que el alma es simple y no puede corromperse.
- Argumento del principio de movimiento: El alma es vida, es decir, principio de movimiento.
4. Los Mitos del Alma
Platón dedicó algunos de sus mitos a explicar la naturaleza del alma. Las almas, creadas por el Demiurgo, se encarnan en cuerpos materiales en una primera encarnación. Después de la muerte, el alma peregrina durante 1000 años, encarnándose en diferentes cuerpos. En el mito de Er, Platón establece una jerarquía de valores según la virtud: filósofo, rey, hombre de estado, gimnasta o médico, profeta o sacerdote, poeta, obrero o labrador, sofista y tirano.
5. Influencia de la Doctrina del Alma
La filosofía cristiana asimiló la doctrina platónica del alma para elaborar su propio concepto, influenciado por la revelación cristiana. En el siglo XVII, Descartes propuso una concepción del ser humano que retomaba el dualismo platónico. Nietzsche, por otro lado, percibió esta espiritualidad como una traición a la vida terrenal, considerando el deseo de la muerte como una manifestación de la debilidad de los valores occidentales.