Comprender el Suelo: Formación, Propiedades y Clasificación Global

El Suelo: Composición, Estructura y Tipos

¿Qué es el Suelo?

El suelo es la capa superficial, disgregada y de espesor variable que recubre la corteza terrestre. Se forma a partir de la meteorización mecánica y química de la roca preexistente y es el medio donde puede asentarse la vegetación. Constituye la base de la alimentación humana y de la existencia de vida en la Tierra.

Textura del Suelo

La textura del suelo se refiere al tamaño de las partículas que lo componen, lo cual influye directamente en su porosidad y capacidad de retención de agua:

• Cuando el tamaño de las partículas es grande (gravas, arenas), el tamaño de los poros entre ellas también es grande. El agua circula con facilidad y se infiltra rápidamente hacia niveles inferiores. Esto resulta en un suelo con muy poca capacidad de retención de agua, inadecuado para el crecimiento de la vegetación.
• Si el tamaño de las partículas es demasiado pequeño (arcillas), el tamaño de los poros también es muy reducido. El agua no puede circular por ellos y queda retenida, encharcando el suelo. Estos suelos son impermeables e inadecuados para el crecimiento de la vegetación.
• Los suelos de grano intermedio (limos o mezcla de partículas de diferentes tamaños), con porosidad media, permiten que el agua circule de forma lenta sin quedar encharcados. Estos suelos tienen la capacidad de retención de agua óptima para el crecimiento de la vegetación.

Perfil del Suelo: Horizontes Característicos

El perfil del suelo es su estructura en corte vertical, donde se observan una serie de capas u horizontes superpuestos característicos. En un suelo ideal, se distinguen los siguientes horizontes:

• Horizonte A o de Lixiviación

  Contiene pocas sales minerales, ya que estas son arrastradas hacia el subsuelo por el agua de infiltración (proceso de lixiviación). En esta zona se encuentran las raíces de las plantas. Se divide en estratos:

  • Nivel A0

    Acumulación de restos orgánicos no alterados.

  • Nivel A1

    De color oscuro debido a la presencia de humus, que confiere al suelo su capacidad de retención de agua y cationes (Ca++, K+, NH4+, etc.), lo que se traduce en su fertilidad.

  • Nivel A2

    De color más claro debido al intenso lavado. Predomina la materia mineral.

• Horizonte B o de Acumulación

  De color claro por la ausencia de humus. Es una zona de acumulación de sales, y adquiere coloraciones específicas según la sal acumulada (ej., cálcicas, de color blanco).

• Horizonte C o de Transición

  Abundan los restos de la meteorización de la roca madre (en suelos autóctonos). En suelos alóctonos, son los materiales depositados por el agua o el viento.

• Horizonte D o R (Roca Madre)

  Compuesto por la roca madre sin meteorizar (en suelos autóctonos). Se encuentra a profundidad variable.

Tipos de Suelos según el Clima

La clasificación de los suelos a menudo se relaciona con las condiciones climáticas predominantes:

• Suelos de Zonas Frías y Húmedas (Podsoles)

  Son los Podsoles, típicos de climas fríos y templados frescos donde la precipitación es mucho mayor que la evaporación (P >> E). Son suelos bastante ácidos, con abundante humus (de lenta descomposición). Es el tipo de suelo característico de los bosques de coníferas (taiga).

• Suelos de Zonas Templadas

  En estas zonas se distinguen dos tipos principales de suelos:

  • Suelos de Bosque Caducifolio y Esclerófilo (Suelos Pardos y Rojos Mediterráneos)

    Resultan de la alternancia de estaciones húmedas (P > E) y secas (P < E). En ellos se acumula gran cantidad de materia orgánica muerta (necromasa) y humus que se descompone con lentitud.

  • Suelos de Pradera (Tierras Negras o Chernozems)

    Se encuentran en zonas de clima continental donde la escasa precipitación impide la pérdida de iones por lixiviación (P < E), y la estación seca propicia su elevación y depósito en la superficie.

• Suelos de Climas Áridos (Suelos Rojos y Desérticos)

  En lugares donde las precipitaciones son muy escasas (P << E), el ascenso capilar es constante, lo que da lugar a la formación de costras superficiales de yesos o sales (como caliches y rosas del desierto).

• Suelos de Zonas Tropicales (Ferralitas)

  Son las Ferralitas, características de las selvas tropicales. La elevada temperatura y la intensa precipitación (P >> E) favorecen una rápida descomposición de la materia orgánica, de modo que el horizonte A es muy delgado y desprovisto de humus.