Ciencia aristotélica

ARISTÓTELES ONTOLOGÍA:                                                                                                                                        Metafísica: A pesar de su formación platónica, desarrolla una crítica a la teoría de las ideas: Platón duplica el mundo para intentar explicarlo, por lo que el problema también se duplica al tener que explicar dos mundos. Metafísica : llamada filosofía primera, trata de lo más universal que existe, el ser.

Ontología (el ser sin determinaciones): Hay muchas acepciones del ser, pero todas ellas se refieren a un término único. Todas las diferentes formas del ser se refieren a una primordial, la sustancia, pero la sustancia no es única, hay muchas sustancias (muchos seres). Sustancia y accidentes son los géneros supremos del ser, llamados categorías, estas permiten ordenar el pensamiento y realidad y son las clases más amplias de predicados que se pueden afirmar de un sujeto. En total son 10 categorías: una sustancia y 9 accidentes (cantidad, cualidad, relación, lugar, tiempo, estado, posición, acción y pasión).                                                                                                                                                                    Con la teoría Hilemórfica se opone a Parménides (quien no admite el cambio en el ser) y a Platón (la esencia está en la cosa, no separada), y admite que el individuo se compone por materia y forma.
El individuo está sometido a cambios, mientras que la materia y forma. El individuo está sometido a cambios, mientras que la materia y forma son eternas, pero no existen independientemente, sino en el compuesto formado por ambas.                                                                                                                         - Forma: esencia, lo que hace que la materia sea esa sustancia y no otra. Es también Naturaleza (principio de actividad) y principio de inteligibilidad (universal).                                                                        - Materia: sustrato del cambio, lo que permanece en el devenir y recibe una forma u otra. Carece de forma y es indeterminada. No puede existir si no es bajo la determinación de una forma, pero es principio de individualización.                                                                                                                                  TEORÍA DE LAS CUATRO CAUSAS DE LA NATURALEZA:                                                                                        - Causa formal: ¿Qué es la Naturaleza?
Aristóteles la define como principio y causa de movimiento y reposo, es decir, el cambio que significa paso de potencia al acto. Si este cambio se da según la sustancia, tenemos el cambio sustancial; pero si este cambio se da según los accidentes, tenemos el cambio accidental.                                                                                                                                                      - Causa material: ¿De qué está hecho? La materia del movimiento en el mundo sublunar son las cuatro raíces de Empédocles (tierra, agua, fuego y aire) y dan lugar al movimiento rectilíneo. Y la materia en el mundo supralunar es el éter que da lugar al movimiento circular.                                            - Causa eficiente: ¿Quién o qué lo ha hecho? Es principio de movimiento, todo lo que se mueve es movido por otro (agente o motor): No podemos encontrar cuál es la causa eficiente de la Naturaleza.    - Causa final: ¿Para qué? Se postula la existencia de un motor inmóvil que mueve el objeto sin necesidad de moverse él mismo. Este motor es inmóvil porque es acto puro, sin potencia que está excluido de todo cambio por ser forma inmaterial. Es pura forma, pues la materia es privación.              TEOLOGÍA: Estudio del ser más excelente, el ente que es acto puro y pura forma y causa de todo movimiento, Dios. Aristóteles afirma un tipo de ente inmaterial e inmóvil que es la forma pura y suprema que mueve todas las cosas como causa final: Dios es la finalidad, el acto puro que supondría la realización de la perfección de la Physis. La Naturaleza se mueve con la finalidad de atracción divina (concepción teológica de la Naturaleza), está se opone a la explicación mecanicista. Los precedentes históricos de Aristóteles son Leucipo, Demócrito y Descartes. 

ARISTÓTELES ÉTICA:

Aristóteles elaboró dos éticas: Ética a Eudemo, acusa influencias platónicas; y la Ética a Nicómaco, es la versión definitiva de la ética aristotélica . Nos atendremos a esta última. La ética aristotélica es un “eudemonismo”, es decir, es una ética de la felicidad, pero es también una ética de la virtud, ya que esta es el medio por excelencia para alcanzar la felicidad.                                                                                  Para Aristóteles no es posible afirmar la existencia del “bien en sí”, de un único tipo de bien: del mismo modo que el ser se dice de muchas maneras, habrá también muchos tipos de bienes. La ética no es, ni puede ser, una ciencia que dependa del conocimiento de la definición universal del bien, sino una reflexión práctica encaminada a la acción.                                                                                                     - La Felicidad: El bien no es una realidad única, sino que hay muchos tipos de bienes. Además, la ética no puede ser abordada de un modo puramente teórico y científico; hay que partir de los hechos, es decir, de la experiencia. Hay tantos tipos de bienes como tipos de seres; para cada ente su bien y finalidad es el perfeccionamiento de su propio ser, de su esencia.                                                                    - Ser humano: Animal racional, pues su forma o substancia 2ª  es el alma, principio de actividad del cuerpo, que desarrolla las funciones vegetativa y sensitiva en tanto que ser vivo y animal y, además, la función racional propia de la especie humana. Aristóteles afirma que la actividad más propia del hombre y la que mayor felicidad le proporciona es la contemplación teórica, la sabiduría. Así, si la felicidad para un ser humano consiste en el ejercicio perfecto de su actividad propia, la actividad racional, y para que sea perfecta debe ir acompañada por todas las virtudes.                                              - La virtud: es una disposición del alma, es decir, una aptitud permanente y preferencial para comportarse de un modo determinado. La virtud requiere también la voluntad. Por esta razón la virtud se adquiere por el ejercicio y el hábito. Aristóteles señala que la virtud consiste en un término medio, un equilibrio entre dos extremos igualmente viciosos, Así, el valor es un “justo medio” entre el miedo y la temeridad. TIPOS:                                                                                                                                  + Virtudes morales (éticas): Aristóteles se dedica a hacer notables descripciones de los tipos humanos que las poseen. Procederá al análisis de la acción humana, determinando que hay tres aspectos fundamentales que intervienen en ella: la volición, la deliberación y la decisión.                                        + Virtudes intelectuales (dianoéticas): prudencia (phrónesis), virtud del hombre sensato; y sabiduría (Sophía), culminación de la vida moral. La sabiduría representa el nivel más elevado de virtud al que puede aspirar el hombre y Aristóteles la identifica con la verdadera felicidad. La segunda definición aristotélica del hombre como animal político deriva de la primera definición. La función racional específica del ser humano sólo se desarrolla a partir de la elaboración abstracta de conceptos, los cuales no se desarrollan si no es sobre la base de un lenguaje. El Empirismo ético conduce a Aristóteles a una postura ecléctica: la felicidad consiste en unir sabiamente la virtud, la contemplación y los bienes exteriores, siendo función del Estado garantizar las condiciones que lo hacen posible.

PLATÓN EPISTEMOLOGÍA:

                                                                                                                                        Platón, siglo V a. C, fue un filósofo griego, alumno de Sócrates y maestro de Aristóteles. Su influencia como autor y sistematizador ha sido incalculable en toda la historia de la filosofía. Fundó la Academia. El conjunto de las obras más famosas de Platón, se han denominado Diálogos. Entre las más importantes se encuentran: La República (elabora filosofía política de un Estado ideal), el Fedro (desarrolla una compleja e influyente teoría psicológica) y el Timeo y el Fedón. 

- Crítica a los sofistas: Platón admite, con Protágoras, que el conocimiento sensible es relativo, pero no admite que sea la única forma de conocimiento, por lo que, con Parménides cree que hay otra forma conocimiento propia de la razón, y se dirige a un objeto distinto al que nos presenta las Ideas. El verdadero conocimiento ha de versar sobre el ser, no sobre el devenir.                                                          - Clases de conocimiento (La República): La República nos ofrece la dialéctica (basada en la teoría de las Ideas) en la que se establece una correspondencia estricta entre los niveles y grados de realidad y niveles de conocimiento. Platón lo explica mediante la alegoría de la línea en la que se distinguen dos tipos de conocimiento: doxa (conocimiento sensible) y episteme (conocimiento inteligible). 

Mundo sensible

Mundo Inteligible

Imágenes     Cosas, animales               Matemáti Geométric.       Ideas y relación entre ideas       

Eikasia              Pistis                               Dianoia                              Nóesis             

(imaginación)       (creencia)               (conoc. Discursivo)              (Inteligencia)

Doxa (opinión)

Episteme (ciencia)

- Doxa: no cumple las condiciones de un conocimiento universal que puede guiar la vida humana hacia lo perfecto.

• Eikasia: conocimiento en el que el individuo vive en un mundo de conjeturas, creyendo lo que le cuentan (es el más bajo).

• Pistis: conocimiento de las cosas y solo muestra un mundo imperfecto, reflejo de lo universal. Son creencias, opiniones sobre lo cambiante.  

- Episteme: 

• Dianoia: conocimiento discursivo en el que toma las figuras sensibles como pretexto para pensar en aquello común a ellas, su aspecto matemático.

• Noesis: verdadero conocimiento universal y necesario; permite conocer los modelos racionales de la realidad, las ideas y relaciones entre ellas. A este conocimiento también se le llamará “dialéctico” y le corresponde la función ordenadora de la vida humana.

- Dialéctica: método que permite ir de de lo sensible a lo inteligible y permite conocer las relaciones necesarias entre las ideas, por lo tanto, es el proceso del conocimiento que conduce a la acción: la ciencia se convierte así en una condición de la ética y política. Supone la liberación de los prejuicios e ignorancia y permite la contemplación de la verdad pero el filósofo que ha completado este proceso debe ayudar a los otros también mediante la educación. 

- Educación de los ciudadanos: Su finalidad es promover que se alcance la virtud, la justicia, colaborando en un proceso natural en que la persona tiende a la virtud y el Estado también. Corresponde al Estado educar a los ciudadanos evitando el egoísmo y promoviendo el sentimiento de comunidad. Y a los filósofos les corresponde formar a cada persona para que cumpla función dentro del Estado. 

PLATÓN ONTOLOGÍA:

Platón, siglo V a. C, fue un filósofo griego, alumno de Sócrates y maestro de Aristóteles. Su influencia como autor y sistematizador ha sido incalculable en toda la historia de la filosofía. Fundó la Academia. El conjunto de las obras más famosas de Platón, se han denominado Diálogos. Entre las más importantes se encuentran: La República (elabora filosofía política de un Estado ideal), el Fedro (desarrolla una compleja e influyente teoría psicológica) y el Timeo y el Fedón.                                        La doctrina central de la filosofía platónica es la doctrina de las ideas, que consiste en la afirmación de que existen entidades inmateriales, absolutas, inmutables y universales independientemente del mundo físico.                                                                                                                                                               - Cosmología: La constitución del universo físico es narrada por Platón en el Timeo en forma de mito. En su explicación sobre el origen del cosmos recurre al Demiurgo (forma mítica para explicar la acción de las ideas sobre la materia), que no crea el universo de la nada, sino que la configura moldeando la materia tomando como modelo las ideas. El resultado es materia imperfecta. El Universo se convierte en un cosmos por la acción del Demiurgo. Los cuatro cuerpos adquieren su consistencia en forma de sólidos regulares: tetraedro (fuego), cubo (tierra), octaedro (aire) icosaedro (agua).                                    - Antecedentes de la teoría de las Ideas: Se remonta a los pitagóricos y su concepción de las matemáticas como formas perfectas y a Parménides y su idea de que la esencia de lo existente no cambia, de que la verdad no es accesible a los sentidos sino a la razón; y, por otro, a Sócrates y sus planteamientos sobre el conocimiento “epistémico”, es decir, las definiciones rigurosas de los conceptos morales a través del diálogo.                                                                                                                + Las ideas no son conceptos o modos de pensar, sino la propia realidad universal de la que se deriva el mundo físico.                                                                                                                                                            + Las ideas tienen una existencia separada de las cosas sensibles. Tienen una realidad trascendente y no inmanente a las cosas.                                                                                                                                        + Las ideas son los modelos perfectos de los objetos del mundo físico.                                                          - División de mundos (dualismo ontológico): Cada idea es una sustancia (ousía), algo que existe en sí, como una realidad trascendente. Como consecuencia de esta teoría, surge la duplicación del mundo, expresada en el mito de la caverna. El interior de la caverna sería el mundo material (mundo sensible), el de las cosas concretas y particulares a las que podemos acceder por los sentidos. El exterior de la caverna sería el mundo de las Ideas (mundo Inteligible), el de la verdadera realidad a la que sólo se puede acceder por la inteligencia o el pensamiento. La concepción platónica de la realidad es dualista.                                                                                                                                                                        + El mundo visible, sometido al devenir, accesible por los sentidos.                                                                + El mundo inteligible, de lo permanente, accesible por la razón.                                                                    - Relación entre ambos mundos: explicada por la relación de Participación (Methexis): las cosas participan de la Idea. E inversamente, por la Presencia (Parousía): La Idea está en cierto modo presente en la cosa. Platón fue evolucionando desde una concepción inmanente de las ideas hacia una concepción trascendente. El ontologismo de las ideas de Platón debe interpretarse en el sentido de que no dependen de las cosas, de su relación con ellas. Ellas tienen sus propiedades y su realidad. En cambio, los seres físicos sí dependen de las ideas. Por tanto, las ideas son los modelos (para dogmas) de las cosas. De todo esto se deduce un dualismo ontológico, formado por el mundo de las ideas, de una parte, como realidad auténtica, y por el mundo de las cosas, de otra. Las Ideas están “entrelazadas” formando lo que Platón llama “symploné”, un todo organizado y jerárquico; en la base estarían las Ideas de los objetos materiales, después las Ideas matemáticas, por encima de ellas las Ideas de virtudes morales y, en la Cúspide, la Idea del bien, que es comparada con el Sol fuera de la caverna: la Idea del bien “ilumina” al resto de las Ideas, confiriéndole la inteligibilidad que nos permite conocerlas