Cicerón y el Arte de la Oratoria en la Antigua Roma

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La Oratoria según Cicerón

Cicerón, en su obra De Oratore, afirma que el deber fundamental del orador es hablar adecuadamente para persuadir.

Retórica y Oratoria

La retórica no se puede desvincular de la oratoria, pero sus diferencias son notables:

  • Oratoria: Es el producto elaborado siguiendo las reglas retóricas.
  • Retórica: Es el conjunto de normas y principios encaminados a la elaboración eficaz de una obra literaria o discurso.

Podemos concluir diciendo que la oratoria es una aplicación práctica de la retórica.

Fases Clásicas de la Elaboración del Discurso

Para elaborar un discurso, la retórica clásica establece tradicionalmente tres fases principales (aunque posteriormente se consolidarían cinco):

  • Inventio: Búsqueda de los temas y argumentos que deben tratarse en el discurso.
  • Elocutio: Selección de la forma y el estilo adecuados para expresar ese contenido.
  • Dispositio: Organización y estructuración del contenido y las palabras seleccionadas.

Es importante señalar que el número de discursos que nos ha llegado de la antigüedad es escaso en relación con la gran importancia que tuvo este género.

Historia de la Oratoria Romana

Oratoria Antes de Cicerón

Los precursores de este género se encuentran en las antiguas arengas militares.

  • Apio Claudio "El Ciego": Considerado el primer gran orador romano, su discurso contra Pirro fue famoso por su patriotismo.

En el siglo II a.C., se consolida la oratoria en Roma gracias a las aportaciones griegas. Se crearon escuelas para formar a los jóvenes oradores. En esta época destacan:

  • Marco Porcio Catón ("El Censor"): Orador tradicionalista, enemigo de la influencia griega excesiva. Denunciaba la corrupción y se preocupaba más por el contenido moral y práctico (rem tene, verba sequentur).
  • Publio Cornelio Escipión Emiliano: Representa la apertura a la influencia de la cultura griega en el mundo romano, fomentando un estilo más refinado.

De la época inmediatamente anterior a Cicerón, destacan los hermanos Graco (Tiberio y Cayo) con sus discursos en favor de la reforma agraria.

Cicerón y su Época (Siglo I a.C.)

En el siglo I a.C., Roma se encuentra sumida en una profunda crisis social y política que acabará con la República. En este momento crucial, las tendencias oratorias se concretan principalmente en dos escuelas:

  • Escuela Asiánica: Caracterizada por una expresión muy adornada, florida y con tendencia al retoricismo y la exhibición. Su máximo representante fue Quinto Hortensio Hórtalo, rival de Cicerón en los tribunales.
  • Escuela Ática (o Aticista): Propugnaba una mayor sobriedad, claridad, precisión y un menor uso de figuras retóricas, buscando la pureza del estilo inspirado en los oradores atenienses como Lisias.

Julio César, contemporáneo de Cicerón, no se adscribió estrictamente a ninguna de las dos escuelas. Su gran mérito fue utilizar los recursos de ambas, adaptándolos con maestría a sus objetivos y audiencia, destacando por su claridad y vigor.

En la obra anónima Rhetorica ad Herennium y en las numerosas obras retóricas de Cicerón (como De Oratore, Brutus, Orator) encontramos un compendio exhaustivo de normas, preceptos y comentarios sobre el arte de la elocuencia.

Teoría Retórica Clásica

Tipos de Discurso

Según la finalidad, se distinguían principalmente tres géneros de discurso:

  • Género Laudatorio o Epidíctico: Pronunciado para alabar o criticar a alguien o algo (elogios fúnebres, panegíricos).
  • Género Deliberativo: Pronunciado ante una asamblea para persuadir sobre la conveniencia o inconveniencia de tomar una resolución política o decisión futura.
  • Género Judicial: Pronunciado en un tribunal, bien para acusar (accusatio) o para defender (defensio) a un acusado.

Las Cinco Fases (Cánones) de la Retórica

La teoría retórica sistematizó el proceso de creación del discurso en cinco fases:

  1. Inventio: Investigación y descubrimiento de los argumentos apropiados para el caso.
  2. Dispositio: Elaboración y estructuración ordenada de dichos argumentos en el discurso.
  3. Elocutio: Arte de elegir y utilizar las palabras y figuras retóricas adecuadas según el tema, la audiencia y el momento.
  4. Memoria: Capacidad para recordar todos los elementos anteriores del discurso preparado.
  5. Actio (o Pronuntiatio): Puesta en escena del discurso, incluyendo el conjunto de elementos no verbales (voz, gestos, expresión facial) para acompañarlo eficazmente.

Partes del Discurso

Un discurso judicial o deliberativo típicamente se estructuraba en las siguientes partes:

  • Exordium (Exordio o Introducción): Introducción del tema que se va a tratar, cuya finalidad principal es captar la atención y la benevolencia (captatio benevolentiae) de los jueces u oyentes.
  • Narratio (Narración): Exposición clara, breve y persuasiva del tema o de los hechos ocurridos relevantes para la causa.
  • Argumentatio (Argumentación): Parte central del discurso, donde se presentan las pruebas y razonamientos. Se suele dividir en:
    • Probatio: Aportación de argumentos y pruebas que demuestren lo propuesto o la inocencia del defendido.
    • Refutatio: Sirve para refutar los argumentos del adversario.
  • Peroratio (Peroración o Conclusión): Conclusión del discurso, destinada a recapitular los puntos clave y, especialmente, a ganarse definitivamente a los jueces o a la audiencia. Su función principal es apelar a las emociones y conmover el ánimo del oyente (pathos).

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