Características de la ideología que defiende Estados Unidos en la Guerra Fría
Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Historia
Escrito el en español con un tamaño de 4,55 KB
La Guerra Fría: el nuevo orden de la posguerra
Origen y carácterísticas de la Guerra Fría
El fin de la Segunda Guerra Mundial, con la derrota de los Estados fascistas, marcó el inicio de una nueva etapa en la historia mundial.
El triunfo aliado no significó el fin de los conflictos, sino que inició un largo período de nuevas tensiones. A poco andar se hicieron evidentes los desacuerdos al interior del bando triunfador, particularmente entre estadounidenses y soviéticos.
A pesar de que Gran Bretaña y Francia también participaron del triunfo aliado, los elevadísimos costos materiales y sociales de la guerra impidieron todo intento de estas y otras naciones europeas por volver a ejercer el liderazgo a nivel mundial. Estados Unidos y la Uníón Soviética fueron, entonces, los países que experimentaron los mayores beneficios del triunfo aliado. Al poco tiempo, estos dos Estados alcanzaron un gran poderío, no solo militar y económico, sino también ideológico. La primera de ellas promulgó la libertad de las naciones y el más férreo rechazo a las dictaduras de izquierda, convirtiéndose así en el máximo referente para las democracias capitalistas del mundo.
La Uníón Soviética, por su parte, ejercíó una enorme influencia sobre los países comunistas y sus adherentes esparcidos por el orbe. Las llamadas superpotencias iniciaron así un largo período de disputas ideológicas en las que, directa o indirectamente, casi todas las naciones se vieron involucradas. Esta nueva forma de relaciones internacionales fue conocida como Guerra Fría. Este período se extendíó desde el fin de la Segunda Guerra en 1945 hasta 1991. No hay consenso entre los historiadores acerca de la fecha de inicio de la guerra; algunos postulan que el conflicto comenzó en 1947, con la ruptura definitiva de Estados Unidos y la URSS, aunque la mayoría coincide en 1945, período en que comenzaron las hostilidades.
Así, fue casi medio siglo en que el mundo estuvo dividido en dos bloques antagónicos. El resultado fue la configuración de un orden mundial bipolar, es decir, con dos polos de desarrollo capaces de afectar e influir sustancialmente sobre el resto de los países del mundo. No obstante, a este conflicto se le denominó “frío”, porque en ningún momento estas dos potencias se enfrentaron directamente en una guerra directa o “caliente”. Lo que hubo fue, más bien, un estado permanente de tensiones y conflictos aislados esparcidos por todo el mundo, así como una intensa campaña propagandística en la que cada potencia exaltaba sus cualidades y los defectos de sus adversarios.
La Uníón Soviética y Estados Unidos intentaron mantener su seguridad y ampliar o proteger sus zonas de influencia. Para ello, utilizaron todos los medios posibles con el fin de contrarrestar el poder de su enemigo y de ganarse adeptos a nivel mundial. Algunas de estas formas de demostración de poder y presión fueron:
•
El desarrollo de una verdadera carrera de armamentos, cuyo objetivo fue intimidar al oponente y brindar protección a sí mismos y a sus aliados.
•
Una intensa propaganda ideológica orientada a convencer a la población mundial de los beneficios que brindaba el sistema propio de cada superpotencia.
•
Diversas formas de espionaje a través de servicios secretos. Tanto la Cía norteamericana, como la KGB soviética fueron mecanismos de gran relevancia a la hora de neutralizar los planes del contrario o sacar ventaja en diversos aspectos.
•
Las presiones políticas y económicas fueron una forma habitual de mantener a los países aliados en esa posición o bien de obligar a los del bloque contrario a cambiar su postura.
•
La guerra localizada, es decir, en zonas específicas de países subdesarrollados, con el fin de mantener el dominio sobre la zona.
Todas estas medidas, con mayor o menor intensidad, marcaron los años de la Guerra Fría en todo el mundo.