El Barroco: Origen, Características y Contexto Histórico
Enviado por Chuletator online y clasificado en Arte y Humanidades
Escrito el en español con un tamaño de 3,04 KB
Conceptos Generales del Barroco
Etimología y Valoración
La palabra "Barroco", de etimología incierta, aparece utilizada con sentido despectivo por los tratadistas neoclásicos a fines del s. XVI, referida a la arquitectura del periodo anterior como sinónimo de extravagante e irregular. A fines del siglo XIX, el término se utiliza para denominar el estilo artístico de la cultura occidental que sucedió al Renacimiento, iniciándose entonces una valoración positiva del período.
Cronología
Cronológicamente, se inicia en las últimas décadas del s. XVI (tras el agotamiento del Manierismo) y se extiende hasta el Rococó (mediados del s. XVIII), la culminación del Barroco que da paso a la reacción Neoclásica de la segunda mitad del XVIII.
Geografía y Estética
Geográficamente, tiene su origen en la mitad occidental de Europa (con centro en Italia), extendiéndose después al resto del continente europeo y a la América hispana. El Barroco viene a ser la reacción frente al Manierismo (complicado e intelectual) y a la estética renacentista (basada en el equilibrio, la proporción y el orden). Supone una concepción del mundo y el arte donde la belleza no se basa en la proporción clásica, sino en el gusto por la realidad cotidiana, lo aparatoso y monumental.
Marco Histórico del Barroco
El marco histórico en el que se desarrolla se caracteriza por:
División religiosa de Europa
La Reforma protestante se ha consolidado en el Norte de Europa, al tiempo que la Iglesia católica reacciona con la Contrarreforma (Concilio de Trento). El Barroco será la respuesta a las aún no cerradas guerras de religión, a la dialéctica Reforma-Contrarreforma.
Reforzamiento del poder papal en las naciones católicas
La Iglesia se convierte otra vez en el más poderoso cliente del arte, transformando la iconografía tanto en la escultura como en la pintura, con temas fácilmente identificables por el pueblo, de gran teatralidad. Roma será, desde finales del s. XVI, el centro neurálgico del Barroco, como residencia papal y capital del mundo católico.
Fortalecimiento de la monarquía
La monarquía conoce un proceso de fortalecimiento. Su absolutismo se plasmará en el establecimiento de una corte y de una amplia administración, asentadas sobre un nuevo tipo de ciudad: la capital del Estado, lo que supone la potenciación del urbanismo, el desarrollo de la jardinería y la construcción de grandes palacios y edificios públicos, reflejo del poder absoluto de la monarquía, que adopta, como la Iglesia, un lenguaje grandioso del arte. De esta manera, el Barroco encontró su doble escenario: la ciudad como marco de lo político y la Iglesia como lugar de lo religioso.