Arte y Arquitectura del Siglo XX: Corrientes y Obras Emblemáticas

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Escultura del Siglo XX

La escultura del siglo XX se caracteriza por la ruptura con las formas tradicionales y la pérdida de la condición figurativa. Se observa un marcado individualismo y una tendencia hacia la abstracción. El lenguaje escultórico expresionista se aleja de la omnipresencia de la figura humana y explora nuevos temas y formas. La obra tridimensional queda sometida a la interpretación del autor, quien le otorga una importancia crucial al espacio vacío y al movimiento unido a la energía.

Obras destacadas:

  • El profeta de Gargallo
  • Formas únicas de continuidad en el espacio de Boccioni
  • Mujer peinándose en el espejo de Julio González
  • El furgón y Brancusi de Constantin Brancusi
  • Trampa de langosta y cola de pez de Calder
  • Figura reclinada de Henry Moore

Arquitectura del Siglo XX

En Europa, la arquitectura del siglo XX se ve influenciada por el funcionalismo, el racionalismo y el organicismo. La industrialización y el crecimiento urbano generan nuevas necesidades que llevan a la transformación del mundo contemporáneo. Se busca romper con los modelos pasados y adaptar los edificios a las necesidades, la tecnología y los materiales modernos. La Bauhaus, en Alemania, y el organicismo en Brasil, son ejemplos de esta búsqueda de una arquitectura funcional y estética.

Obras destacadas:

  • Edificio de la Bauhaus de Walter Gropius
  • Pabellón alemán de Barcelona de Mies van der Rohe
  • Villa Saboya de Le Corbusier
  • La Casa de la Cascada de Frank Lloyd Wright
  • Unidad de Habitación de Le Corbusier

Dadaísmo

El dadaísmo surge en Zúrich como un movimiento antiartístico y nihilista. Se opone a los valores racionalistas y positivistas, cuestionando los criterios artísticos afianzados. El humor, la ironía, la burla y la provocación son sus principales herramientas. Se busca la libertad del individuo y se rechaza el arte como sostén de la burguesía. Se introducen nuevos modelos como el fotomontaje y el ensamblaje, utilizando incluso desechos de la calle.

Surrealismo

El surrealismo, heredero del dadaísmo, surge en París con André Breton como figura central. Se basa en el inconsciente y la creatividad, inspirándose en el mundo de los sueños y las teorías de Freud. Busca construir un arte y un mundo nuevo, rompiendo con los convencionalismos sociales. El automatismo psíquico se convierte en un método para la creación artística, y se explora el subconsciente a través de imágenes oníricas y fantásticas.

Obras destacadas:

  • El carnaval del Arlequín de Miró
  • La persistencia de la memoria de Dalí

Expresionismo Abstracto

El expresionismo abstracto aparece en Estados Unidos tras la Segunda Guerra Mundial. Se caracteriza por la ruptura con la figuración y la expresión de la angustia y el desaliento. Influenciado por las vanguardias europeas, rechaza la racionalidad y busca la expresión pura de las emociones a través de grandes formatos y la improvisación. Jackson Pollock es uno de sus máximos exponentes.

El informalismo europeo, paralelo al expresionismo abstracto, refleja el estado anímico de la posguerra. Se caracteriza por la expresión matérica y la ausencia de colores intensos. Antoni Tàpies y Manolo Millares son figuras clave de este movimiento.

Neofiguración

La neofiguración surge en la segunda mitad del siglo XX como una reacción al arte abstracto. Se retoma la pintura figurativa, pero con un enfoque informal y expresionista. Se denuncian las realidades sociales a través de formas orgánicas deformadas y monstruosas. Francis Bacon es un representante destacado, con su visión subjetiva y tremendista del mundo.

Arte Pop

El arte pop surge en Inglaterra y Estados Unidos como un reflejo de la sociedad de consumo. Utiliza imágenes tomadas de la comunicación de masas, como carteles y embalajes, otorgándoles un valor iconográfico. Se caracteriza por su carácter popular, efímero y su producción en serie. Andy Warhol y Roy Lichtenstein son dos de sus figuras más conocidas.

Hiperrealismo

El hiperrealismo es un nuevo periodo de figuración que reproduce la realidad con gran detalle, utilizando la fotografía como referencia. Se representan paisajes, fachadas, retratos y aspectos de la vida cotidiana con un detallismo extremo. Antonio López es un ejemplo de hiperrealismo en España.

Movimiento Posmoderno

El movimiento posmoderno cuestiona la validez del movimiento moderno, considerándolo frío, monótono y difícil de entender. Se busca una arquitectura más variada, imaginativa y divertida, que satisfaga a un público diverso. Se retoman tipologías del pasado y se rechazan las formas puras. Philip Johnson es un ejemplo de arquitectura posmoderna.

El tardomoderno, por otro lado, no reniega del modernismo, pero busca potenciar el aspecto brillante y tecnológico de la arquitectura. El High Tech utiliza elementos tecnológicos como escaleras mecánicas y grúas, exhibiendo los componentes y jugando creativamente con los espacios. El Centro Pompidou es un ejemplo icónico.

El deconstructivismo, por su parte, es la antítesis de la claridad y la pureza racionalista. Se caracteriza por la fragmentación del diseño, la falta de armonía y simetría, y la sensación de inestabilidad. El Museo Guggenheim de Frank Gehry es un ejemplo de arquitectura deconstructivista.

Obras destacadas:

  • AT&T Building de Philip Johnson
  • Centro Pompidou de Richard Rogers y Renzo Piano
  • Museo Guggenheim de Nueva York de Frank Lloyd Wright
  • Museo Guggenheim de Bilbao de Frank Gehry
  • La Casa de la Ópera de Sídney de Jørn Utzon
  • Gran Vía de Madrid de Antonio López
  • Fuente de Marcel Duchamp

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