Argentina 1973-1983: Del Regreso de Perón al Ocaso de la Dictadura Militar y la Guerra de Malvinas
Contexto y Ascenso de la Dictadura: Argentina 1973-1976
El Gobierno de Héctor Cámpora y el Frejuli (1973)
El peronismo, junto con sus aliados, conformó el Frente Justicialista de Liberación (Frejuli). Con esta alianza, el Frejuli ganó las elecciones del 11 de marzo de 1973, obteniendo una clara victoria sobre la Unión Cívica Radical (U.C.R.). Así, asumió la presidencia la fórmula Héctor Cámpora - Vicente Solano Lima.
El Regreso de Perón: Esperanzas y Conflictos Internos (1973-1974)
Tras la llegada definitiva de Juan Domingo Perón al país en junio de 1973, Héctor Cámpora renunció a la presidencia por indicación de los dirigentes peronistas para facilitar nuevas elecciones. En la nueva convocatoria electoral, compitieron principalmente tres fórmulas: Juan Domingo Perón - María Estela Martínez de Perón por el Frente Justicialista de Liberación, Ricardo Balbín - Fernando de la Rúa por la U.C.R., y Francisco Manrique - Martínez Raymonda por la Alianza Popular Federalista.
El peronismo, que estuvo nuevamente en el poder entre 1973 y 1976, se caracterizó por profundas divisiones internas, careciendo de acuerdos básicos de convivencia entre sus alas de izquierda y derecha.
La fórmula Perón - María Estela Martínez de Perón llegó al poder con un Juan Domingo Perón ya anciano (79 años). Su proyecto político se basaba en la búsqueda de la convivencia con los partidos opositores y en un acuerdo entre empresarios y sindicatos conocido como el Pacto Social. Sin embargo, la creciente inestabilidad política y la agudización de los enfrentamientos internos llevaron a que, en mayo de 1974, Perón rompiera públicamente con los sectores de la izquierda peronista. Poco menos de dos meses después, el 1 de julio de 1974, Juan Domingo Perón falleció.
La Presidencia de Isabel Perón y la Escalada de Violencia (1974-1976)
Tras la muerte de Perón, asumió la presidencia su esposa y vicepresidenta, María Estela Martínez de Perón (conocida como Isabel Perón). Su gestión estuvo marcada por una profunda crisis económica y política, y un fracaso en la contención de la violencia. La izquierda peronista, junto con otras organizaciones armadas, retomó e intensificó la lucha armada contra su gobierno. La violencia política se generalizó, instalándose en toda la sociedad.
La Triple A y el Terrorismo Paraestatal
La Alianza Anticomunista Argentina (Triple A) fue un grupo paramilitar de ultraderecha que operó bajo la protección e impulso de sectores del gobierno peronista, destacándose la figura de José López Rega, ministro de Bienestar Social y secretario privado de Perón y luego de Isabel. Este grupo terrorista persiguió y asesinó a militantes de izquierda, intelectuales, artistas y opositores, alimentando el clima de conflicto y violencia que caracterizó el período previo al golpe de Estado y que contribuyó al fracaso del gobierno peronista (1973-1976).
El Golpe de Estado de 1976 y la Dictadura Cívico-Militar (1976-1983)
Finalmente, la presidenta María Estela Martínez de Perón fue desalojada del poder por un nuevo golpe de Estado el 24 de marzo de 1976.
El Quiebre Institucional: 24 de Marzo de 1976
El Golpe de Estado de 1976 fue protagonizado por la Junta Militar de Gobierno, integrada por los comandantes en jefe de las tres Fuerzas Armadas: el Teniente General Jorge Rafael Videla (Ejército), el Almirante Emilio Eduardo Massera (Armada) y el Brigadier General Orlando Ramón Agosti (Fuerza Aérea). Con el golpe militar, la Junta anunció dos objetivos principales para su autodenominado "Proceso de Reorganización Nacional": la erradicación de la "subversión" (término utilizado para referirse a organizaciones guerrilleras, militantes políticos, sindicales, estudiantiles y cualquier forma de oposición) y la reorientación de la economía, con el supuesto fin de "salvar al país de la disgregación".
Terrorismo de Estado y Violaciones Sistemáticas a los Derechos Humanos
Durante este régimen dictatorial se produjeron masivas y sistemáticas violaciones a los derechos humanos, ejecutadas como parte de un plan de terrorismo de Estado. Miles de personas fueron secuestradas, trasladadas a centros clandestinos de detención, torturadas y, en muchos casos, asesinadas y desaparecidas. El objetivo era desarticular cualquier oposición política y social, e infundir el terror en la población.
La represión, entendida como la acción de impedir el desarrollo de ideologías consideradas contrarias al régimen mediante el uso extremo de la violencia estatal y paraestatal, fue una herramienta central de la dictadura.
Los Desaparecidos: Crimen y Metodología de Exterminio
En esta época, se denominó "desaparecido" a toda persona que, tras ser secuestrada o detenida ilegalmente por las fuerzas de seguridad del Estado o grupos paramilitares actuando bajo su amparo, su paradero era sistemáticamente ocultado por las autoridades. Esta práctica implicaba la negación oficial de la detención, la privación de cualquier derecho legal a la víctima y la sumisión de sus familiares a una angustiante incertidumbre sobre su suerte y paradero, constituyendo un crimen de lesa humanidad.
Resistencia y Lucha por la Memoria: Las Madres de Plaza de Mayo
El principal objetivo de las Madres de Plaza de Mayo fue, y sigue siendo, encontrar a sus hijos e hijas desaparecidos durante la dictadura cívico-militar, así como exigir verdad y justicia. Desde abril de 1977, estas mujeres comenzaron a reunirse en la Plaza de Mayo, ubicada frente a la Casa Rosada (sede del gobierno), realizando sus emblemáticas rondas de los jueves. Cubriendo sus cabezas con pañuelos blancos, que se convirtieron en un símbolo de su valiente lucha y resistencia pacífica contra la dictadura.
La Guerra de Malvinas (1982): Crisis y Ocaso del Régimen Militar
La Decisión de Invadir y el Conflicto Bélico
En abril de 1982, la Argentina entró en guerra con Gran Bretaña. Esta conflagración fue desencadenada por la decisión del entonces presidente de facto, el General Leopoldo Fortunato Galtieri (quien encabezaba la tercera junta militar), de invadir las Islas Malvinas (Falkland Islands), un archipiélago austral cuya soberanía ha sido históricamente disputada por Argentina y que se encontraba bajo administración británica desde comienzos del siglo XIX.
La invasión y la consecuente declaración de la Guerra de Malvinas fueron inicialmente recibidas con un amplio, aunque efímero, apoyo popular en Argentina, fuertemente incentivado por la propaganda oficial del régimen. Sin embargo, a nivel internacional, la Argentina fue condenada como país agresor por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, y Estados Unidos, junto con la Comunidad Económica Europea y otras potencias, respaldaron militar y políticamente a Gran Bretaña.
La Derrota Argentina y sus Consecuencias Políticas
La marcada disparidad de fuerzas militares y tecnológicas, sumada al aislamiento internacional, llevó a la inevitable derrota argentina. Las tropas argentinas se rindieron el 14 de junio de 1982. La guerra duró 74 días y la Argentina sufrió la pérdida de más de 700 vidas (entre ellas, 649 combatientes argentinos). Tres días después de la rendición, el General Galtieri renunció a la presidencia. La derrota en la Guerra de Malvinas aceleró la crisis y el desprestigio de la dictadura militar, abriendo el camino hacia la transición democrática que se concretaría en 1983.