Aplicaciones Terapéuticas del Calor en Reumatología y Patologías Circulatorias: Indicaciones y Precauciones
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Indicaciones del Tratamiento Térmico en Patologías Musculoesqueléticas y Circulatorias
El calor terapéutico está indicado en diversas afecciones, especialmente en:
- Procesos Reumatológicos: Articulares degenerativos, artritis reumatoide y otros reumatismos (particularmente en los procesos degenerativos de articulaciones y de la columna vertebral).
- Lesiones de Tejidos Blandos: Epicondilitis, bursitis (así como contusiones, distorsiones y distensiones musculares), tenosinovitis y penartritis escapulohumeral.
Beneficios del Calor en Afecciones Musculoesqueléticas
En estas condiciones, el calor contribuye significativamente a:
- Vencer la contractura y la rigidez articular.
- Aumentar la extensibilidad de los tejidos colágenos, especialmente cuando se aplica conjuntamente con medidas cinesiterápicas apropiadas para incrementar el grado de movilidad articular.
Aplicaciones en Trastornos Circulatorios y Dolor Crónico
La aplicación de calor también está indicada en los trastornos funcionales y orgánicos del riego sanguíneo periférico. Es eficaz para combatir:
- El espasmo muscular de defensa en cuadros postraumáticos subagudos y crónicos.
- Distrofia simpática refleja.
- Enfermedad de Raynaud.
- Enfermedad de Dupuytren.
- Enfermedad inflamatoria pélvica crónica, tales como colecistopatías, anexitis, adherencias y prostatitis.
Precauciones y Contraindicaciones Fundamentales en Termoterapia
Evaluación Previa a la Aplicación
Previamente a la aplicación, es imperativo evaluar dos aspectos clave del usuario:
1. Sensibilidad Térmica y Dolorosa
Se debe valorar la sensibilidad térmica y dolorosa de la zona a tratar, así como el estado circulatorio general. El calor se encuentra contraindicado generalmente o debe emplearse con extrema precaución sobre áreas anestesiadas o en personas con estado de obnubilación.
2. Dosimetría y Umbral de Tolerancia
La dosimetría (medición de la dosis de calor) rara vez es exacta. Se debe considerar que el paciente percibirá molestias o dolor una vez que el umbral de calentamiento seguro haya sido superado.
Contraindicaciones Relacionadas con la Perfusión Tisular
El calor está contraindicado en tejidos con un riego sanguíneo inadecuado. La elevación de la temperatura incrementa las demandas metabólicas sin las adaptaciones vasculares necesarias, lo que conlleva el riesgo de producir una necrosis isquémica. Las alteraciones circulatorias, especialmente arteriales, pueden reducir el mecanismo convectivo de disipación del calor suministrado, aumentando el riesgo de quemadura en los tejidos cutáneos.
Contraindicaciones Sistémicas y Locales Específicas
No debe aplicarse calor en las siguientes situaciones:
- Diátesis hemorrágicas (se facilita la hemorragia por el incremento del flujo sanguíneo, lo que conlleva mayor formación de linfa y tendencia al edema).
- Procesos inflamatorios agudos.
- Hemorragias activas.
- Estados febriles o procesos infecciosos floridos.
- Tromboflebitis o trombosis.
- Casos de hemofilia.
- Traumatismos agudos.
- Usuarios con fragilidad capilar derivada de tratamientos esteroideos de larga duración.
Consideraciones Oncológicas y Reproductivas
Se encuentra contraindicada la aplicación en zonas donde se haya localizado una neoplasia maligna, dado que temperaturas subterapéuticas (como las usadas en fisioterapia) pueden potenciar la tasa de crecimiento tumoral. Es fundamental proteger o excluir los testículos de la zona de aplicación. Además, debe evitarse de manera intensa sobre el abdomen y las regiones pélvicas en mujeres embarazadas.
Normas para Aplicaciones Balneoterápicas Calientes
En aplicaciones balneoterápicas calientes, se deben respetar los siguientes límites:
- La temperatura corporal central del usuario debe mantenerse por debajo de los 38,9 ºC.
- La temperatura máxima del agua no debe sobrepasar los 37,8 ºC.
Advertencia Final
Debe insistirse en que una mala indicación, una selección inadecuada de la modalidad termoterápica o una aplicación incorrecta deben considerarse situaciones peligrosas que pueden desencadenar reacciones adversas, a veces lamentables.