El Animador Sociocultural: Rol, Características y Aptitudes Esenciales
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Finalmente, la animación sociocultural pretende incidir en la realidad social, intentando no reproducir las estructuras sociales vigentes, sino colaborando con las fuerzas orientadoras en su transformación. Esta gavilla de capacidades presupuestas en el hombre y en los grupos por la animación sociocultural, constituye el fundamento de la necesidad de la misma.
El Animador, Pilar de la Animación Sociocultural
Al hablar del animador queremos referirnos, normalmente, a un equipo de animación, aunque entendemos que excepcionalmente en algunas circunstancias el animador interviene a título individual. El animador es la persona que dinamiza y ayuda a organizar el proceso de animación; el animador es el técnico que ayuda a las personas y a los grupos, grandes o pequeños, a que planifiquen sus actividades, las pongan en práctica y consigan sus objetivos.
El liderazgo es una cualidad clave en este rol.
Tipos de Animadores
Existen varios tipos de animadores:
- Cada animador realiza su quehacer conforme a su temperamento: algunos son los autoritarios, otros los democráticos y otros los que dejan hacer.
- Lo cierto es que a ningún animador se le puede encasillar a priori y para siempre en uno de esos tipos.
- Lo importante es que cada animador conozca cuáles son sus tendencias y, en caso necesario, trate de corregirlas.
Creemos firmemente que, en un proyecto de animación que pretende el crecimiento y desarrollo de las personas y los grupos, solo una animación democrática es válida, aunque a corto plazo, no parezca ser siempre la más eficaz.
Un proyecto de animación sociocultural, guiado por un animador democrático, será un proyecto de animación democrática.
Características del Animador Democrático
Características que debe poseer el animador para ser democrático:
- Debe prever ciertas cosas de antemano, y discutir de ello con el grupo para introducir mejoras o cambios, según los deseos que se manifiesten.
- Debe pedir al grupo que formule sus objetivos. El grupo es el que decide. Una vez hecha la elección, mantiene enérgicamente al grupo en el objetivo que se ha marcado.
- Debe proponer un abanico de procedimientos y actividades posibles, y solicitar otras al grupo. Una vez realizada la elección por todos, la mantiene suave pero enérgicamente.
- Debe favorecer diversos cauces de comunicación: del animador a los miembros del grupo, de los miembros entre sí, y viceversa; tras un comienzo, que ha podido parecer lento, se crea un clima distendido de confianza y amistad, fuente de auténtica eficacia.
- El reparto de tareas se hace en común. Todos toman iniciativas y tienen responsabilidades.
- El animador concede a la evaluación gran importancia, y escoge con el grupo los mecanismos más idóneos para realizarla. No la teme, porque aún en el caso de que sus actitudes sean evaluadas negativamente, ve en ello una ocasión de perfeccionarse.
Características Generales del Animador Sociocultural
No podemos hacer un listado exhaustivo de las características propias del animador sociocultural. Ni son privativas de su vocación - profesión, ni son tampoco motivadoras. No conviene dar impresión de que el animador es un superhombre, alguien privilegiado que nace con una plusvalía de valores, actitudes y aptitudes.
Monera señala tres categorías de aptitudes que se piden a un buen animador:
- Facilidad en crear contactos humanos para que surjan con rapidez lazos estrechos entre los miembros del grupo.
- El animador debe poseer la capacidad de mandar sin imponer o, lo que es lo mismo, una suficiente personalidad y dinamismo para suscitar sin imponer. Por otra parte, debe tener cierta viveza intelectual y buena dosis de imaginación para responder a las situaciones nuevas que se presentan en el grupo, así como la suficiente flexibilidad y objetividad para aceptar y apoyar las iniciativas de los otros.
- Una gran resistencia física y psíquica para realizar su quehacer que conlleva multiplicidad de tareas y muchas horas de dedicación, así como un amplio sentido de la organización para no verse desbordado por su actividad.