Amistad civil, democracia, familia y bioética: Reflexiones desde la Doctrina Social de la Iglesia
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Amistad Civil: Fraternidad, Libertad e Igualdad
¿En qué consiste la amistad civil?
La amistad civil se define como el principio de la fraternidad, inseparable de los conceptos de libertad e igualdad. Sin embargo, su plena realización se ve dificultada en las sociedades políticas modernas por ideologías individualistas y colectivistas. Es importante no confundirla con la convivencia civil, que se basa en la amistad civil y la fraternidad.
Joseph Ratzinger, en este texto, reflexiona sobre las ideologías contemporáneas. Señala que, si bien la sociedad evoluciona, el hombre permanece esencialmente igual. Por ello, el progreso debe tener límites para evitar desviaciones. Ejemplos históricos como el nazismo y situaciones políticas actuales (como pactar con grupos terroristas) ilustran los peligros de un progreso sin límites, que puede suponer un retroceso en lugar de un avance. El hombre, en su libertad, debe respetar los derechos de los demás. El autor cuestiona la consideración del aborto como un derecho, defendiendo el derecho a la vida del bebé.
Democracia: Valores, Riesgos y la Denuncia de la DSI
Los valores que inspiran la democracia
La democracia debe:
- Respetar la dignidad del ser humano.
- Respetar los derechos fundamentales del ser humano.
- Basarse en el bien común (que no es la suma de bienes particulares, sino algo que requiere solidaridad y subsidiariedad).
Riesgos de las democracias actuales
Las democracias actuales enfrentan desafíos como el relativismo ético y moral, el agnosticismo y el relativismo escéptico. La falta de una verdad última puede llevar a la instrumentalización de las ideas populares para obtener el poder. Una democracia sin valores se convierte en totalitarismo, como lo demuestra el régimen nazi.
La Familia: Visión de la Iglesia y el Estado
La familia es la base de la sociedad. La Iglesia la considera la primera sociedad natural, titular de derechos propios e inviolables. Relegarla a un papel secundario daña el crecimiento social y estatal. El Estado debe ayudar a las familias a subsistir. La familia nace del amor conyugal entre un hombre y una mujer, y los hijos son un regalo para la sociedad. El niño debe crecer en un clima familiar que le permita desarrollar sus potencialidades.
El Estado considera a la familia como la base procreativa de la sociedad, con derechos inviolables. Las autoridades no deben interferir en las tareas que la familia puede desarrollar por sí misma, pero sí deben auxiliarla cuando sea necesario.
Técnicas de Reproducción: La postura de la DSI
Técnicas de reproducción no moralmente aceptables
La Doctrina Social de la Iglesia (DSI) considera ilícitos:
- La esterilización.
- El aborto (considerado un delito que pone en peligro la convivencia y el desarrollo social).
- Los métodos contraceptivos (ya que impiden la procreación, un componente esencial de la sexualidad).
- La clonación (por la replicación idéntica del ADN y su posterior reproducción).
La DSI considera lícita la abstinencia durante los periodos de fertilidad. Rechazar la contracepción y optar por métodos naturales promueve el respeto mutuo en la pareja y un orden social más humano. Se defiende que un niño por nacer tiene los mismos derechos que una persona.
El desarrollo de las técnicas de reproducción plantea un debate social que requiere regulación.
Reflexión sobre el Progreso: Comentario al texto de Joseph Ratzinger
El texto de Joseph Ratzinger destaca que el progreso material no implica necesariamente un “hombre nuevo” o una “sociedad nueva”. El hombre sigue siendo el mismo, y la sociedad debe construirse continuamente. No existe una sociedad definitivamente sana, ya que la libertad humana implica un comienzo constante en cada generación. La política debe centrarse en el presente, buscando formas de derecho y paz que puedan perdurar, pero sin falsas expectativas de un futuro utópico. Es crucial reconocer los límites del progreso y evitar ilusiones en un futuro idealizado.