Conocimiento intelectual

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En el niño 

      a) necesita ver fines y medios dentro de su campo perceptivo para hallar la solución;

      b) aún no fabrica un instrumento valiéndose de otros instrumentos;

      c) es frecuen­temente desordenado (sin método alguno); y

      d) comete muchos errores antes de llegar a la solu­ción.

En el adulto

       a) puede prescindir de lo que halla en su campo perceptivo;

      b) fabrica instrumentos sirviéndose de otros instrumentos;

      c) utiliza conscientemente métodos claros para alcanzar sus obje­tivos; y

      d) reduce al mínimo indispensable el juego de ensayos y errores.

     

La inteligencia teórica o racional en el hombre

Las tres operaciones de la razón

      El hombre tiene la capacidad de elaborar conceptos, formular jui­cios y hacer razonamientos.

      a) Un concepto es la representación intelectual de un objeto; es decir, es lo que uno tiene en la mente cuando comprende lo que es una cosa.  

      b) Un juicio es una operación mental consistente en atribuir un concepto a otro concepto (uniéndolos o separándolos mentalmente por me­dio de la afirmación o la negación).  

      c) Un razonamiento es la operación mental consistente en relacio­nar juicios entre sí de modo que de la verdad de uno o varios de ellos ya conocidos (las premi­sas) se siga la verdad de otro nuevo juicio (la conclusión). P. ej.: “Todos los ani­males son mortales; el hombre es un animal; luego el hombre es mortal.”

 Se comprende que no hay razonamiento sin juicios, ni juicio sin conceptos. El concepto es la base del edificio de nuestra vida intelec­tual.



Las coordenadas del pensamiento racional

El pensamiento racional va unido a:

      1/ el poder de abstracción y de generalización;

      2/ el uso del lenguaje simbólico, cuya función es precisamente re­presentar nuestros conceptos, juicios y razonamientos;

      3/ una cierta inhibición (= disminución, menor frecuencia y hasta eliminación) de los actos reflejos, instintivos y ha­bituales (que disminuyen su importancia e influencia en la vida del hom­bre, en beneficio de la conducta basada en operaciones racionales);

      4/ la capacidad de saber emplear inteligentemente los saberes acu­mulados por la experiencia (aprovechando, incluso, la de otros, transmi­tida por medio del len­guaje oral o escrito);

      5/ la flexibilidad del pensamiento, que se hace capaz de dirigir conductas futuras de largo alcance mediante la consideración de relaciones de medios a fines;

      6/ la capacidad de tomar decisiones adaptadas en situaciones nue­vas y compli­cadas. ()

  LA FORMACION DE CONCEPTOS EN EL NIñO

 

Según Jean PIAGET, las conductas intelectuales superiores implican dos elemen­tos fundamentales:

      1) el descentramiento, que es la aptitud para situarse objetiva­mente en el mundo (en vez de referirlo todo al propio yo);

      2) la operación, que es una acción mental, cuya forma más elabo­rada es la re­versibilidad, o capacidad de manejar mentalmente las rela­ciones y las clases.

      1) P. senso-motriz  (0-2 años). El niño va diferenciándose progresivamente de la realidad externa a base de actuar sobre ella mediante una coordinación de sus esquemas senso-motrices innatos (reflejos, instintos).        

2) P. preoperatorio  (2-4 años) postura egocéntrica. Atribuye características vitales a los objetos inertes. La imitación le permite interiorizar las acciones y acceder al campo del pensamiento simbólico y al aprendizaje del lenguaje.

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