Carmen Saeculare, Beatus ille, de Horacio

Quinto Horacio
Flaco nacido en Venisa, cerca de Italia del sur en el 65 a.C. Y muerto en el 8 a.C., fue un importante escritor romano, hijo de padre liberto de modestas posiblidades económicas. Horacio estudió en Roma y después en Grecia. Consiguió ser escribano del Tesoro  y de esa época datan sus primeras producciones literarias. Virgilio, un importante poeta, le presentó a Mecenas y entonces si vida cambió. Mecenas le regala una casa en la Sabina y gracias a esto y a la ayuda de Mecenas, Horacio pasa su vida entregado a su verdadera vocación. Este autor murió poco depués de la muerte de su amigo Mecenas y este último le pidió a Augusto que cuidara de él. Finalmente cuando Horacio murió fue enterrado juntamente con su amigo Mecenas.

Sus obras se pueden dividir en tres grupos diferentes, las primeras son las Sátiras y epodos: sus sátiras son 18 composiciones repartidas entre dos libros. El propio autor se considera un fiel seguidor de Lucilio, que creó este género. Sus sátiras tienen un carácter irónico, y la prueba de esto es que el mismo Horacio las llama sermones. El tema más recurrente es que el ser humano tiene que ser honesto (nadie esta contento con su suerte), otros temas tratados son los avaros, los usureros (personas que se llevan por el interés del dinero), envidiosos, adúlteros… Por otra parte Horacio cultiva los epodos que son 17 composiciones, esta obra es una transición entre el género satírico y la poesía lírica. Algunos son claramente satíricos (en contra una alcahueta, un nuevo rico..) pero también encontramos odas líricas con temas amorosos y otras con temas cívico-moral y la más famosa es una égloga llamada Beatus Ille, un canto a la vida rural. Horacio con el Beatus Ille introduce los tópicos literarios a la literatura como por ejemplo: el Carpe diem (gozar del día, expresa la necesidad de gozar cada día de la vida y olvidar las angustias y las penas); el Locus amoenus (descripción idealizada de la naturaleza), el Tempus Fugit (hace referencia a la fragilidad del tiempo que todo lo acaba y que lleva a la muerte) y el Beatus Ille (ensalza la vida sencialla para encontrar paz y armónía).

La segunda etapa de su producción literaria son las Odas, son 4 libros con un centenar de odas. Horacio pasa al latín los temas y los metros líricos griegos. Los temas principales son: aores, banquetes, partida y regeso de un amigo.. Y se pueden dividir en obras filosóficas (invitan al placer moderado) amorosas y romanas. Dentro de su lírica hay que nombrar el Carmen Saeculare, encargado por Augusto, que invoca a los dioses para que presenten su apoyo a Roma en el porvenir.

La tercera etapa son las epístolas, son cartas dirigidas a sus amigos y Horacio trata la filosofía. Son dos libros con 23 epístolas, en las que trata en que consiste la felicidad, la paz del alma, la vida del campo…

Las carácterísticas más distinguidas de este autor es la concordancia entre pensamiento y expresión.