Características del orador ideal

¿QUÉ SE PUEDE HACER?:

Las siguientes estrategias pueden servir de orientación a la hora de afrontar la ansiedad a hablar en público. Su utilidad puede aumentar dependiendo del compromiso de cambio que se adopte.

PUNTOS ESENCIALES PARA AFRONTAR LA ANSIEDAD:

Hay que procurar exponerse ante las situaciones que produzcan ansiedad. Este paso es necesario para abordar la ansiedad en general, y con ello ir aumentando día a día las habilidades para manejarla. Si se espera al momento de la 'gran exposición', como un examen oral, para ponerse delante del público, es probable no tener el mismo éxito que si se ha estado practicando en situaciones cotidianas, como preguntar la hora por la calle, a un grupo de personas, pedir un café a voces en un bar lleno de gente...//Se debe intentar reconocer qué acompaña a la respuesta de ansiedad en las situaciones críticas. El objetivo es el de detectar con la mayor premura posible la aparición de la ansiedad, y poner así en marcha estrategias para impedir que ésta aflore, como la respiración abdominal. Consiste en respirar fuerte y pausadamente llenando totalmente los pulmones desde el abdomen, algo que no solemos hacer en la respiración normal.

AL PREPARAR LA PRESENTACIÓN

:Es importante pensar en el tipo de público. Saber el número de gente ante la que se va a exponer o sus conocimientos previos pueden ayudar a adaptar la presentación a la audiencia.//También conviene preparar el tema de la presentación. Incluso si se sabe mucho de lo que se va a hablar, obtener más información sobre el mismo ayudará a estar más seguro de uno mismo y a disponer de mayor número de respuestas ante posibles preguntas del público.//Es útil escribir la presentación. Este proceso ayudará a preparar el discurso. También se puede disponer de él durante la charla en caso de que se necesite.//No está de más elaborar un resumen con los puntos principales. Este método puede servir como guía durante la exposición y resulta mucho más efectivo que recurrir al texto original, ya que esto último puede no ser agradable para el público.//Otra herramienta útil pasa por tener preparadas algunas 'salidas'. Cualquier persona se puede perder mientras da una conferencia, así que es conveniente tener preparadas algunas salidas como anécdotas o comentarios breves para darse tiempo mientras se vuelve a coger el hilo de la exposición.//Se puede practicar la presentación con otra persona. Es importante que esa persona sea crítica con la exposición, de forma que se puedan descubrir los puntos débiles para así tratar de mejorarlos y los puntos fuertes para afianzarlos. También puede resultar adecuado imaginar la presentación como si ya se estuviera viviendo o incluso practicarla frente a un espejo.

DURANTE LA PRESENTACIÓN

: Siempre viene bien hablar con gente del público antes de empezar. Cuanta más gente se conozca, más fácil será percibir a la audiencia como un grupo amigable. Siempre uno puede mirar hacia ellos o hacia otros conocidos si se necesita ver una cara amistosa.//Lo primero es presentarse. En este punto no debe faltar el nombre y el título de la charla. Este comienzo suele producir un buen efecto en el público.//Relaja la tensión de los hombros. Ésta produce malestar en el cuello y en la cabeza, lo que puede hacer que uno se sienta más nervioso durante la presentación. Un ejercicio práctico consiste en exagerar la postura de tensión (acercando los hombros a la cabeza) durante unos segundos y a continuación destensar los hombros, así durante dos o tres veces.//Hay que moverse. Si es posible, al movernos por el escenario nos sentiremos más calmados y daremos al público una sensación muy positiva de estar dominando el espacio y la situación.

DESPUÉS DE LA PRESENTACIÓN

: Debemos reforzarnos. Independientemente de cómo salga la presentación, nunca viene mal premiarse por haber realizado la conferencia, por ejemplo con una buena comida.//Evaluación. Más adelante, evaluaremos la forma de hacer la presentación. Conviene recordar aquello que hicimos bien para volver a repetirlo en la siguiente ocasión. A continuación pensaremos en los errores y en cómo mejorarlos la siguiente vez.

LA IMPORTANCIA DEL FICHERO

Para llegar al público hay que hacer fichero. Hay que aprender a leer con un lápiz en la mano que nos ayude a marcar las ideas, citas o modos de decir que nos resulten atractivos. Marcaremos en el margen lo que nos parezca interesante, lo repasaremos y lo que nos guste lo pasaremos a un fichero que confeccionaremos como mejor nos venga. El mejor fichero es el que a su dueño le resulta más práctico.//El fichero es una inversión que va a resultar muy rentable. Son los cimientos de lo que luego serán nuestras conferencias, cursos, artículos, informes y presentaciones. No sólo debemos fijarnos en los libros, también nos serán de utilidad periódicos y revistas, sucesos cotidianos… ojo, tampoco hay que ficharlo todo ya que cada uno conoce sus ámbitos de trabajo, los temas sobre los que suele hablar…//No hacer fichero es valorar pretenciosamente las posibilidades de la memoria. Otra herramienta útil para preparar discursos es la utilización del diccionario

SOBRE EL TEMA

Tampoco se pueden pronunciar buenos discursos si no se conoce el tema. Si se domina el tema, el discurso está preparado y se posee conocimiento del mismo, puede afirmarse que el discurso está casi pronunciado. Los discursos se preparan reuniendo cien pensamientos y desechando noventa. La selección proporcionará al comunicador confianza y seguridad. La falta de tiempo no sirve como disculpa.

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LAS CUALIDADES DEL ORADOR

No es la voz, ni la perfección del gesto, ni la mirada ni el tema, ni siquiera el dominio de las técnicas de expresión y comunicación lo que hace brillar a un orador, sino el conjunto de cualidades que tiene y muy especial, su personalidad. // El orador es una persona que siente y transmite y esa es la razón por la que los mejores oradores son aquellos que comunican lo que llevan dentro de sí, sacando a relucir sus cualidades más específicas. Existen tres clases de oradores: aquellos a quienes se escucha; aquellos a quienes se puede escuchar y aquellos a quienes no se puede dejar de escuchar. Si queremos estar entre los últimos hay que conocer y potenciar aquellas cualidades que caracterizan a los mejores oradores.// No existe un perfil de orador ideal. De personalidades muy distintas han surgido grandes oradores. Sin embargo, si se pueden señalar una serie de cualidades que se repiten en todos los buenos comunicadores. Todas las cualidades necesarias están muy interrelacionadas. Son las siguientes:

1

.AUTOCONFIANZA

Es importante tener una amplia seguridad en uno mismo. El ponerse delante de un auditorio requiere además de superar el miedo y controlar los miedos iniciales, transmitir un mensaje importante e interesante para el auditorio. Si uno se pone delante de un auditorio pensando que es mal comunicador, que no vale para hablar, que nadie le va a hacer caso, seguro que tiene razón, nadie la prestará atención y producirá una lamentable impresión. Todo comunicador tiene que estar convencido de lo que dice, creer en el mensaje que emite y tener la suficiente confianza en sí mismo de que es capaz de transmitirlo de forma satisfactoria.

2

SENSIBILIDAD

Consiste en tener en cuenta aspectos tan esenciales como fijarse unos objetivos claros a alcanzar, contemplar a quién vamos a hablar, qué medios vamos a utilizar, buscar ejemplos y anécdotas que clarifiquen y faciliten la comprensión del mensaje, tener un cierto sentido de la oportunidad, etc. La sensibilidad comunicativa es una cualidad que se desarrolla claramente con el ejercicio de su práctica.

3.PROXIMIDAD

Todo orador debe ser próximo a su auditorio. Es imposible hacer una buena disertación desde el pedestal, desde la distancia. Todo buen orador debe ser próximo a su público, tanto física como emocionalmente. La proximidad física permite la implicación con el auditorio, hacer sentir que está con él, que participa de sus problemas e intereses. La proximidad emocional se realiza de diversas formas: la primera desde la propia actitud interior de querer ser útil y valioso a todos los oyentes, pero además se manifiesta a través del contacto visual y facilitando la participación.

4.NATURALIDAD

Hay que manifestarse como uno es, sin fingimientos ni dobleces. Nunca hay que tratar de ser distinto a como es, no hay que tratar de imitar a nadie ya que al final surge nuestro yo profundo y nos desenmascara. Aceptarse tal como uno es, ser naturales con nuestras virtudes y defectos es una cualidad básica en la que coinciden todos los buenos oradores.

5

SINCERIDAD

CREDIBILIDAD. Al auditorio se le engaña una vez, quizás dos, pero pronto percibirá que el comunicador miente. Nunca debe decirse nada en contra de las propias convicciones. Las palabras deben ajustarse siempre a la verdad por lo que no se debe expresar cariño, simpatía, admiración o respeto si no se experimenta. El público percibe de inmediato la falsedad que puede esconderse detrás de las palabras y no tarda en perder el respeto y la credibilidad.

6

HUMILDAD

Es indispensable para crear un clima favorable. El orador debe evitar ser arrogante puesto que es una actitud que produce un efecto desagradable en el auditorio. Si el orador se complace en escucharse a sí mismo o busca ser admirado o trata de deslumbrar con su sabiduría, el público se sentirá menospreciado y perderá interés en las palabras que está escuchando. En cambio si el orador no se siente superior a los demás y adopta una actitud humilde, los oyentes escucharán con interés, respeto y admiración.

7.CORTESÍA

El orador debe ser amable y respetar a los oyentes y sus ideas, aunque no las comparta. El respeto se manifiesta en el vocabulario, en los gestos y en los ejemplos y chistes utilizados, como en el vestuario y el arreglo personal del orador. Esconder las manos en los bolsillos, lucir prendas demasiado provocativas son signos de poco respeto hacia el auditorio.

8.ENTUSIASMO

9.CAPACIDAD DE TRABAJO