Transepto románico

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ROMánico – Arquitectura


El arte ROMánico aparece en el Occidente cristiano entre  los siglos XI, XII y, en algunos países, Siglo XIII.  Es el resultado de la suma de la tradición romana, las influencias orientales (Bizancio y Al-Ándalus) y algunas particularidades locales. La fecha de su inicio guarda cierta relación con el llamado “terror del milenio”, una convicción generalizada de que el mundo acabaría en el año mil.  El monje medieval Raúl Gabler afirma que en gratitud por no haber sucedido tal catástrofe Europa se cubríó de santuarios. El nacimiento de un incipiente comercio, una cierta estabilidad política y, sobre todo la fundación y el desarrollo de la orden benedictina de Cluny son elementos claves para entender la difusión de ROMánico.  Esta orden extendíó la costumbre de venerar las reliquias de los santos e instauró las peregrinaciones, mediante las cuales se unificaría la cultura europea. Las principales rutas de peregrinación fueron Los Santos Lugares, El Mont-Saint-Michel y, sobretodo, Santiago de Compostela.

Elementos de construcción y problemas suscitados

Los constructores ROMánicos quieren edificios sólidos y no muy costosos.

Materiales:

El más frecuente es el sillar pétreo, como en Roma pero si revestimiento de mármol.  También utilizan el sillarejo, ocasionalmente el ladrillo (influencia mudéjar), el mármol (Italia).

Elementos sustentantes:

  

El arco

: de medio punto.  A veces ligeramente rebajado, a veces decorado en su intradós.  A partir del Siglo XII empieza a utilizarse también el arco ojival (Normandía, Inglaterra…)
La columna y el pilar son los elementos que reciben el empuje de arcos y bóvedas.  Las columnas, de proporciones totalmente ajenas a las clásicas, suelen estar compuestas de basa (ática), fuste (liso, cilíndrico, sin éntasis) y capitel (decorado con motivos vegetales o historiados).  El pilar más frecuente es el cruciforme, normalmente con semicolumnas embebidas para recibir el empuje de los arcos.

Cubiertas:

El sistema más empleado es la bóveda de cañón reforzada con arcos fajones (perpiaños).  Se usan en la nave central y y descargan su peso en columnas o pilares.  También segmentan el espacio interior.  En las naves laterales aparece la bóveda de arista. En el primer ROMánico se abovedaba solo la cabecera del templo y el resto se cubría con una estructura de madera.  El problema de la bóveda son grandes empujes laterales, por lo que se contrarrestaban con naves laterales que al elevarse en altura dejaban la nave central sin luz. La cubierta es a dos aguas en la nave central y a un agua en las laterales. El crucero (lugar en el que se cruzan el transepto y la nave principal de una iglesia)
Se emplea la cúpula, elevada sobre pechinas, o la torre (cuadrangular) o el cimborrio (normalmente octogonal) sobre trompas. Los ábsides de cabecera, de planta semicircular, se cubren con bóveda de horno (o de cuarto de esfera).

Planta

Las más frecuentes son las plantas longitudinales predominan las de cruz latina, con número de naves variable (según la importancia de la iglesia) Los principales elementos visibles en planta son:

Nártex:

A los pies del templo, es una pequeña nave transversal que hace las funciones de vestíbulo de entrada. 

Cuerpo central:

naves longitudinales (central y laterales) separadas por columnas o pilares Transepto:
Nave transversal que forma la crus al ser perpendicular a la nave ppal.
Cabecera, formada por uno o varios ábsides.

Girola o deambulatorio:

rotonda que rodea al ábside central, por la que deambulan los peregrinos para poder venerar las reliquias del templo.
Absidiolos: capillas radiales en la girola o los brazos del transepto, muy frecuentes en las iglesias de peregrinación.

Cripta:

espacio subterráneo normalmente bajo el altar mayor que albergaba las reliquias más importantes de la época.

Alzado

El interior de los templos ROMánicos es sobrio, decorado sólo por elementos arquitectónicos.  Hay un claro predominio del muro sobre el vano, (muros gruesos, ventanas pequeñas) lo que hace que el interior sea oscuro.  En las Iglesias de peregrinación encontramos un altillo sobre las naves laterales, llamado tribuna, que permite aumentar la capacidad de la iglesia.Primer ROMánico (ROMánico meridional o lombardo)Se llama así al arte llevado a cabo por los maestros lombardos que desde finañes del s. X hasta mediados del XI se desplazaron en cuadrillas volantes desde Lombardía (sur de Italia) hasta el Sur de Francia y Cataluña).  Es un estilo de gran unidad constructiva y decorativa.  Sus carácterísticas son:Sillares de pequeño tamaño, irregulares, alargados.Decoración con bandas lombardas (galerías de arquillos colocadas en la partealta de los muros) enmarcados por pequeñas pilastras planas (lesenas)Alternancia de pilares y columnas. Es frecuente la triple cabecera (tres ábsides semicirculares, mayor el del centro)Criptas sobreelevadas.Edificios bajos, achaparrados, con torres campanario de planta cuadrada unidas al cuerpo de la iglesia, bastante altas en relación al tamaño del templo y en las que se suceden varios cuerpos en los que se abren ventanas que las aligeran de peso.Muchos.


Principales representaciones artísticas europeas


Francia:


En Francia se conservan los ejemplos más interesantes de la arquitectura ROMánica.  Aparecen hasta seis escuelas regionales que se diferenciarán por los materiales de construcción empleados, los aspectos decorativos y la influencias que recogen de épocas anteriores.  Las escuelas son: Borgoña, Aquitania, Poitou, Provenza, Auvernia y Normandía Además, existe la gran familia de las iglesias de peregrinación que se llaman así por estar situadas en las rutas de peregrinación a Santiago de Compostela..  Son las iglesias de San Martín de Tours, San Marcial de Limoges, Sta. Fe de Conques  y San Saturnino de Touluse. Se trata de iglesias de planta de cruz latina, de tres naves (San Saturnino de 5) con un transepto ancho (tres naves) y muy desarrollado en planta.  Cabecera central muy desarrollada también, con deambulatorio y capillas radiales.  También tienen absidiolos en los brazos del transepto, y cripta subterránea en la cabecera. El alzado nos muestra edificios totalmente abovedados,, con la nave central cubierta por bóveda de cañón reforzada por arcos fajones.  Las naves centrales se cubren con bóveda çs de aristas.  Presenta dos alturas, siendo el segundo cuerpo el de tribunas.  El exterior se aprecia la presencia de contrafuertes que contrarrestan el empuje de las bovédas en unos edificios que son bastante altos.

Italia

El arraigo de la arquitectura clásica se hace patente en el ROMánico italiano.  Además podemos encontrar las siguientes carácterísticas: Materiales: utilizan una piedra abundante, el mármol, lo que confiere a sus edificios un aspecto vistoso por su policromía. Planta: dominan las basilicales, sin transepto.  Es raro encontrar deambulatorio y capillas radiales. Campanarios y baptisterios se encuentran a menudo separados de los templos. Predomina la horizontalidad frente a la verticalidad. Reconocemos tres zonas: La norte, influenciada por el ROMánico lombardo, la centro (Pisa, Florencia y Roma) con gran influencia de la arquitectura clásica y la zona sur, en la que destacan influencias artísticas islámicas, normandas y bizantinas.

Inglaterra

La conquista de Inglaterra por Guillermo de Normandía en el 1066 marcará la arquitectura ROMánica inglesa ya que se destruirán todas las construcciones anteriores.  La mayor parte de las construcciones son al mismo tiempo abadías y catedrales, conjuntos constructivos formados por una iglesia de grandes dimensiones y varias dependencias  anejas a la iglesia dedicadas a la vida en comunidad monástica. La gran altura de la nave central hace que muchas veces se cubran con cubiertas de madera.  En cuanto al alzado, se observan tres niveles: arquerías, tribunas y triforio, en que se abren ventanas al exterior. La cabecera tiene forma rectilínea, sin deambulatorio y el transepto es muy amplio y desarrollado en planta. Destacamos entre todas la catedral de Durham, por ser pionera en el uso de arcos apuntados y bóvedas de crucería.

Alemania

El templo ROMánico alemán se caracterizará por ser de gran monumentalidad, con naves de gran altura, plantas basilicales y doble ábside; en cabecera y a los pies del templo.  Para dar simetría a los edificios aparecen también dos transeptos. En la zona de Colonia aparece un tipo de cabecera distinto, con tres ábsides dispuestos en forma de trebo (cabecera trebolada), así como la presencia exterior de pequeñas galerías de arcos y columnitas que recorren la parte alta (influencia lombarda).

España

Desde finales  del s, X y a lo largo de todo el s. XI se desarrolla en Cataluña un estilo muy ligado al primer ROMánico lombardo que girará sobre sí mismo con cerca de 500 edificios (ya lo hemos visto antes: San Pere de Roda, etc…) durante el s. XI surge en la mitad norte de la península el ROMánico inspirado directamente en Cluny, que crea Iglesias y monasterios a lo largo del camino de Santiago. Destacan: San Isidoro de León, Panteón real construido por Fernando I y doña Sancha, con los primeros capiteles iconográficos españoles. Catedral de Jaca, de planta basilical, con sus potentes arcos torales, sus influencias mozárabes (cúpula nervada, modillones de rollos), su particular motivo decorativo (taqueado jaqués…) San Martín de Frómista, pequeña iglesia de gran pureza de volúMenes, con un gran cimborrio octogonal, torrecillas cilíndricas en las esquinas y modillones de canecillos que soportan tejaroces (aleros) Pero la gran obra ROMánica española es la Catedral de Santiago de Compostela.  Al final del camino debía haber una gran iglesia que recompensara las fatigas del viaje.  Es la típica iglesia de peregrinación según el modelo francés de San Saturnino, con planta de cruz latina, tres naves  y una cabecera muy desarrollada. Presenta un crucero profundo, también de tres naves, y una girola cubierta con bóveda de arista. El interior está definido por la bóveda de cañón con unos arcos formeros muy peraltados, lo que le da sensación de esbeltez, y unos arcos fajones, por el contrario, ligeramente rebajados.  Algunos arcos lobulados y la presencia de modillones de rollo denotan la influencia musulmana.  Otra carácterística es la Tribuna, que se extiende por todo el templo, incluida la girola. En el s. XII, en Cataluña se repiten los modelos el siglo anterior y, además, aparecen interesantes claustros  anexos a las catedrales (Girona, Rosellón, San Cugat) En el resto del territorio encontramos que el ROMánico se aleja del Camino de Santiago, dejando un rosario de iglesias rurales, pobres (están naciendo cientos de municipios) y también ricos y nuevos claustos en monasterios. Avila: San Andrés, San Pedro, San Vicente… Soria: San Esteban de Gormaz, San Juan de Duero, Santo Domingo… Zamora y Salamanca:, en la segunda mitad del s. XII, con sus catedrales viejas anuncian ya el gótico.

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