Socorro

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<span>La del once jota.</span>
La viuda de R. Abuela malvada de Luis, Leandro y la pequeña Lilibeth. Ellos quedaron huérfanos y quedaron a cargo de su abuela, ella le hacia la vida imposible a ellos, en especial a la pequeña Lilibeth. Los chicos crecen y cada uno hace su vida. Luis y Leandro se casaron y tuvieron hijos, Lilibeth fue a vivir a un departamento sola. Cuando un día, llaman Luis y Leandro para contarle que su malvada abuela había muerto y le dijeron que no se preocupe mañana hablaban. Luis y Leandro le entregan parte de la herencia de su abuela a Lilibeth, pero ella no quería porque no quería tener nada de su abuela con ella. A todo esto, pasa un tiempo y ella decide usar los electrodomésticos heredados, uno de ellos, el televisor, al que la muchacha, veía de noche y siempre se dormía y quedaba prendido, hasta que se despertaba por los ruidos que este emitía. Se despabilo, tratando de apagarlo cuando de repente la cara de la abuela, aparecía y desaparecía de televisor. Ella decide anotar en un cuaderno lo que le sucedía. Al otro día todos trataron de entrar al departamento. Forcejearon la puerta hasta que entraron. En el departamento no había nadie, ni rastros de la joven.
<span>La casa viva.</span>
Juan y Claudia consiguen una casa en villa la Resolana a muy buen precio para pasar las vacaciones con sus hijos Greta y Marvin. La familia viaja a Villa la Resolana a pasar sus vacaciones, pero Juan y Claudia tienen que volver una semana a su localidad para trabajar. Juan consigue un contestador que no se usaba en su trabajo, para dejarle mensajes a sus hijos si es que llamaban y no estaban en casa. Greta y Marvin, empiezan a disfrutar sus días de grandes, cuando sucesos extraños les empiezan a pasar. A Greta la molestaba un fantasma de un niño rubio y de cabello ondulado, vestido con una maya antigua, que estaba enamorado de ella. A Marvin le sucedían cosas malas todo el tiempo ocasionadas por este niño, ellos deciden no decirles nada a sus padres, para no preocuparlos. Llega el viernes y los padres se anticiparon y vinieron antes. Cuando ellos llegan, tomaron chocolate y fueron a dormir, cuando se empiezan a sentir ruidos abajo, se despiertan y bajan. Se desarmo toda la pared de vidrio. Después de ver esto el padre, empezó a quejarse de lo que le habían vendido, la mama lo tranquilizo y les volvió a dar chocolate cuando de repente se cae el ventilador. Al otro día, después de una horrible noche, deciden ir a navegar en canoas. Greta y Juan fueron primeros, mientras Marvin nadaba y Claudia tomaba sol y controlaba. A Greta algo la hunde y Juan la ve y la ayuda, cuando la saca del agua, buscan a Marvin y Claudia y no encontraron a nadie, de repente ven a ambulancias y policías, Marvin, sufrió un terrible golpe y murió. Luego se enteraron que el niño que molestaba en esa casa era un niño que hace años murió ahogado y cada vez que vienen a vivir a su casa los molesta y a los hombres les hace la vida imposible. La familia se fue de la casa, y ahora está a mitad del precio que la compraron ellos.
<span>Manos.</span>
Martina, Camila y Oriana eran muy amigas, tan amigas, que hacían todo juntas. Un invierno decidieron ir de vacaciones en la casa de campo de la abuela de Martina. Esa noche las chicas se acostaron a dormir, en la pieza de huéspedes, hasta que el padre las despierta para decirles que la abuela se había descompuesto, nada grave pero la vamos a llevar al hospital. Luego de que los padres se fueron, la niñas no podían dormir, encima se largo a llover y caían rayos. Oriana que era la que mas miedo tenia, entonces sus amigas, le dijeron Nos tapamos bien y estiramos los brazo, bien estirados, hasta darnos las manos. Hasta que se durmieron. Cuando llegaron los padres, les contaron lo que habían hecho para no tener miedo, pero cuando se lo quisieron mostrar sus brazos y manos no llegaban…
<span>Los muyins.</span>
Kenzo vivía en Tokio. En esa época, no se podía salir de noche sin sus linternas. El quería atravesar las lomas, para ver qué era lo que podía llegar a haber del otro lado. Entonces, pasó, de pronto sintió pisadas, se dio vuelta era una niña que estaba llorando, él le preguntaba que le pasaba y ella no respondía, hasta que se destapo la cara, tenía la cara lisa, y sin forma, Kenzo apenas la vio, salió corriendo hasta que encontró a un grupo de personas, él gritando les pedía ayuda, ellos, estaban todos de espalda, hasta que uno le empezó a peguntar que le paso, pero cuando el les cuenta todos se dan vuelta y ven al muchacho. Kenzo vio todos sus rostros lisos y brillantes, empezó a gritar mientras ellos largaban unas carcajadas tenebrosas. Los muyins nunca más vieron a Kenzo pasar por ahí.
<span>Cuento de los angelitos.</span>
Cora y Eloy Molina tenían 2 hijos, llamados Ivan y Boris. La familia se había mudado a la gran ciudad. Eloy consiguió un trabajo en el exterior por medio año que le pagarían mucho, entonces Cora insistió en que lo acepte. Cora y sus dos hijos siempre salian a hacer las compras bien tempranito. Hasta que un dia, un ladron le pego a Cora y le robo su bolso. El hombre cruzo el paso a nivel, Cora lo seguía corriendo, los niños la siguieron hasta que en ese momento paso el tren. Pasaron los años y al ladron nada le traia paz, estaba torturado por los remordimientos. El hombre, fue a las carreras, tuvo suerte, gano una fortuna. Al irse, esperando a la locomotora, no iba ni parado ni sentado, cuando de repente empezó a escuchar pequeñas pisadas. Cuando de la nada antes de que llegue el tren, el hombre se arrojo y la locomotora lo desarmo. Nadie sabe que paso.
<span>Nunca visites Maladonny.</span>
Mi compañero de viaje, empezó a contarme esta historia. Timothy Orwell era un muchacho de 13 años. Una tarde a la salida del colegio Timothy cruzo a unos ex vecinos, a los que cordialmente él saluda, pero sus vecinos ni al caso. Así le paso con 3 vecinos más, hasta que el decide ir a su casa a ver que pasaba. Cuando toca la puerta lo atiende una mujer extraña que no era su madre, el empieza a gritar a pedir ayuda. Hasta que uno de los vecinos lo lleva al hospital. Él se despierta y alguien le estaba acariciando la cabeza, cuando el mira, ve que era su hermana vestida de enfermera, junto a su tío y tía que la ayudaban. Los médicos eran sus padres, nadie lo reconocía. Permaneció 40 años en ese lugar hasta que sus familiares murieron. Mi compañero de viaje me repetía, eran mis padres! Mis padres y no me reconocían. Fue ahí cuando me di cuenta que él era Timothy Orwell, y estaba yendo hacia Maladonny. Apenas llegué a la parada, espere el próximo tren y me fui de nuevo a Buenos Aires.

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